lunes, 26 de marzo de 2007

El Ebro vierte al mar el equivalente a trece trasvases y el río se desborda en varios municipios


TORTOSA.- El deshielo de la nieve caída esta semana ha originado la crecida de los afluentes de la margen izquierda del río Ebro y su consiguiente crecida. Sólo el sábado el río vertió al mar el equivalente a trece trasvases. Además, el río se desbordó en varios pueblos.

El aumento de las precipitaciones y la fusión de la nieve en la margen izquierda del Ebro causó una situación de “avenida normal” del río, según la Confederación Hidrográfica, que llegó a originar varios desbordamientos.

Durante el sábado, el volumen que el río estaba vertiendo al mar en la desembocadura, según el Sistema Automático de Información Hidrológica de la Cuenca Hidrográfica del Ebro (SAIH), era de 460 metros cúbicos por segundo, lo que equivale a trece trasvases iguales al incluido en el derogado Plan Hidrológico Nacional.

Es más, la mayor parte de los embalses, según el SAIH, se encontraban por encima del 80% de su capacidad. El pantano de Ribarroja, uno de los puntos desde donde partiría el trasvase, se encontraba el sábado por la tarde al 94,3%.

En cambio, los embalses de la cuenca del Júcar se encontraban esta semana al 17% de su capacidad. Sólo el pantano de Mequinenza albergaba 1.304 hectómetros cúbicos, casi tres veces más que toda el agua almacenada en el sistema del Júcar (584 hectómetros cúbicos).

Por otro lado, el río Ebro se desbordó durante la tarde del sábado en Miranda de Ebro. La Junta de Castilla-León activó la Unidad de Apoyo Logístico y Emergencias ante la avenida del Ebro, y más después de que el desbordamiento afectara a varias calles. Las medidas preventivas incluyeron la adecuación de un polideportivo como refugio y la construcción de diques de arena.

La situación más crítica se puede producir todavía, con caudales que superen los 2.000 metros cúbicos por segundo a la altura de Castejón.- (Agencias)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La crecida del río Ebro por el deshielo y las fuertes lluvias siguió ayer imparable. El caudal que se vertía al mar era ayer superior al del sábado y equivalía, al menos, al agua que se utilizaría para 15 trasvases como el incluido en el Plan Hidrológico Nacional.

Los pantanos de la cuenca seguían casi llenos, hasta el extremo de que fue necesario abrir las compuertas de algunos para aligerar el volumen embalsado. El de Ribarroja, desde donde partiría el trasvase, estaba a media tarde de ayer al 95% de su capacidad. Pese a ello, la Generalitat catalana quiere blindar el Ebro ante cualquier trasvase, presente o futuro. Esta es una de las claves de la política medioambiental e hídrica que está llevando a cabo la Generalitat de Cataluña y que parece contar con la aquiescencia del Gobierno de Rodríguez Zapatero.

La Comisión para la Sostenibilidad de las Tierras del Ebro, organismo en la que se encuentran representados la Generalitat de Cataluña y el Ministerio de Medio Ambiente, ha propuesto un caudal ecológico para el delta que hará imposible plantearse el futuro cualquier trasvase.

El volumen propuesto para este caudal, que se considera la cantidad mínima de agua necesaria para la conservación del entorno medioambiental, está por encima de la cantidad media de agua que lleva el río con lo que cualquier trasvase será imposible. El que el caudal ecológico en la desembocadura de un río supere al volumen total de agua que transporta a lo largo del año no tiene ningún precedente en otro río español o europeo.

Esta propuesta técnica ha sido financiada por la Agencia Catalana del Agua y se presenta con el objetivo de ser incorporada al Plan Hidrológico de Cuenca de la demarcación del Ebro que en estos momentos se encuentra en fase de redacción.

La excepcionalidad del caso resulta más llamativa si se compara con lo que ocurre en la gestión de otros ríos españoles. La práctica habitual en aquellas cuencas hidrográficas intercomunitarias es que la gestión se realiza entre las autonomías afectadas que tratan de consensuar las normas que se aplicarán sobre el cauce.

En el caso del Ebro las comunidades son Cataluña, Aragón, Comunitat Valenciana, La Rioja y Navarra. Pero ha sido Cataluña por su cuenta la que ha dictado las normas para esta cuenca hidrográfica que afecta a varias autonomías. =Los caudales ecológicos propuestos plantean una cifra máxima para el delta del Ebro, donde existe un parque natural, de 12.786 hectómetros cúbicos y una mínima de 7.305. Estas cifras equivalen a 405 metros cúbicos por segundo como máximo y 231 metros cúbicos por segundo como valor mínimo.

Con estos caudales el trasvase del Ebro será imposible, ya que no habrá excedentes. La cantidad media que se ha registrado en el río durante el pasado mes de febrero fue de 190 metros cúbicos por segundo. Sólo en ocasiones excepcionales, como estos días en los que ha coincidido el deshielo con fuertes precipitaciones, se superará la cifra propuesta como caudal ecológico que permitiría la transferencia.

El volumen medio de agua del Ebro durante los últimos años ha sido de 350 hectómetros cúbicos anuales y el caudal ecológico es ahora de 100 metros cúbicos por segundo (el trasvase era de 33 metros por segundo).

La mayor necesidad del Delta del Ebro, según los expertos, no es el volumen en la desembocadura, sino aumentar aporte de sedimentos y reducir la superficie que se destina al cultivo. Los arrozales del delta consumen cerca de 20.000 metros cúbicos de agua por hectárea, el doble que los de la Albufera.
De "Las Provincias"

Anónimo dijo...

El río Ebro vertió el lunes al mar 500 metros cúbicos por segundo, el equivalente a 15 trasvases como el que fue aprobado en la pasada legislatura, que preveía transferir a la Comunitat Valenciana, Murcia y Almería 33 metros cúbicos por segundo.

Por Zaragoza, el caudal era ayer de 1.221 m3/s, según los datos oficiales de la Confederación Hidrográfica del Ebro. El río más caudaloso de España ha alcanzado en los últimos días crecidas importantes.

La media del caudal que el río Ebro ha vertido al mar durante el mes de marzo es de 430 m3/s, el equivalente a 13 trasvases. El máximo se registró el pasado día 16, cuando se desembalsaron 515 m3/s.

Durante este mes, el caudal del río Ebro en su desembocadura es tres veces superior a lo que suele ser habitual. El pasado año, la media fue de 190 metros cúbicos por segundo. Sin embargo, esta cifra todavía supone el equivalente a cinco trasvases como el previsto en el Plan Hidrológico Nacional.