lunes, 16 de julio de 2007

Luis Francisco Esplá es hospitalizado grave por una cornada en Perpiñán

PERPIÑÁN.- El torero español Luis Francisco Esplá, de 49 años, fue trasladado hoy domingo con urgencia a un hospital de Perpiñán (sur de Francia), tras sufrir una cornada en el tórax cuando lidiaba su primer toro de la tarde en la vecina localidad de Ceret.

Según informó un miembro del comité organizador de la feria taurina de Ceret, la cornada "le perforó el tórax". Pero precisó que había recibido noticias "tranquilizadoras" por parte de un médico del hospital que atiende al torero de Alicante.

Este fue trasladado primero a la clínica de Ceret, localidad situada a más de media hora de Perpiñán, y luego en helicóptero hasta la capital del departamento de los Pirineos Orientales.

La corrida se interrumpió durante unos tres cuartos de hora, después de la cogida de Esplá, que hacía frente a su primer toro de la tarde.

La cornada en el tórax no ha afectado a ningún órgano vital. El torero fue intervenido por la herida en el tórax, que «no es peligrosa», dijo el presidente del comité de la feria taurina de Céret, Jean-Pierre Piquemale. La cornada pasó entre «dos costillas», en la parte izquierda del tórax, y no alcanzó ningún órgano vital, precisó el también teniente de alcalde de Céret.

Después de ser intervenido en la clínica de Perpignan, el torero fue trasladado a otro centro hospitalario de la ciudad para ser atendido por heridas en los testículos causadas por otra cornada. Además, el torero de Alicante tiene un hematoma importante en la cara porque fue pisoteado por el animal.En la corrida se lidiaron reses de la ganadería de Valverde.

Vicente Portes, su mozo de espadas, vivió muy de cerca lo que podría haber acabado en una auténtica tragedia. Según comentó al diario "Información", poco después de la cogida, el accidente se produjo a causa del viento que azotaba la plaza. «Hubo un momento que el aire levantó la muleta y el toro se dio cuenta y fue a por él directo», relataba nervioso.

«Nos lo encontramos tendido en la arena, boca arriba, parecía que estaba muerto. Después ya pasamos a la enfermería y podía hablar, aunque le tuvieron que poner oxígeno ya que no respiraba perfectamente. El principal miedo que teníamos era que la cornada en el pecho le hubiera llegado al pulmón pero, gracias a Dios, nos han confirmado desde el hospital que ha sido un pinchazo totalmente limpio», manifestaba aliviado.

El mozo de espadas subrayó que se vivieron momentos de tensión aunque destacó la profesionalidad de los franceses, que lo tenían todo preparado para llevar al diestro alicantino al hospital. «Todo fue muy bien. Esplá sólo se quejaba en la enfermería, le dolía mucho, pero nos alegraba que al menos estuviera consciente, era algo que nos relajaba», manifestó.

«Nos han dicho que lo peor que tiene ahora es la parte de los testículos aunque eso se recompone y listo», resaltó Portes.

Esplá compartía cartel con Padilla y Sánchez y Vara, y la ganadería era del Cura de Valverde. «Los toros de Céret tienen la particularidad de ser muy grandes y con buenos pitones».- (Agencias)

ÚLTIMA HORA.- El matador de toros alicantino Luis Francisco Esplá evoluciona favorablemente dentro de la gravedad y ha abandonado en la mañana del lunes la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital francés de "Saint Pierre", de Perpiñan, donde se encuentra hospitalizado, para pasar a planta, según fuentes próximas al torero.

Éste sufrió tres cornadas, una en el tórax, otra en la región parietal y otra en el escroto con pérdida de masa testicular aunque el asta del toro no ha llegado a tocar ningún órgano vital. Eso sí, sufrió un desgarro en la cara, que abarca desde la boca hasta la oreja, y le han tenido que hacer la cirugía estética.

El diestro alicantino ha pasado la primera noche con las consiguientes molestias, si bien su evolución es buena, por lo que los doctores que le atienden han ordenado su traslado a planta. Se espera que el próximo jueves, en vista de su acelerada recuperación, pueda ser trasladado a su domicilio de Alicante para proseguir la convalecencia.

Esplá se encuentra muy animado y con ganas de volver a casa, según su esposa, Mimí Tarruella, a quien acompaña su hijo Alejandro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La reaparición en público ayer en Alicante de Luis Francisco Esplá hizo realidad la frase de que los toreros están hechos de otra pasta. El diestro afirmó que no quiere que se le trate como a un héroe porque por esta cogida no quiere “ni crecer ni disminuir en la profesión”, simplemente seguir en el mundo de la tauromaquia.

El maestro entró por su propio pie, pese a las heridas graves sufridas el pasado domingo en la plaza francesa de Ceret. En su primera comparecencia en la ciudad alicantina, Esplá comentó que “hay momentos en la vida en los que hay que esforzarse y sacar fuerzas de donde no hay para responder al público”.

Luis Francisco Esplá agradeció la “poca frivolidad con la que se han tratado las imágenes y la noticia de sus cornadas” lo que le ha demostrado el gran respeto hacia su persona y hacia el mundo del toro en general, lo que se contrapone con aquellos que Esplá considera que “cuando les dan una cornada, salpican toda España de sangre”.

Cuando se le pregunta al maestro sobre “cómo se encuentra”, Esplá contesta con un gran ánimo y con una amplia sonrisa en la cara y dice que está “fenomenal porque la labor de los médicos franceses en los primeros momentos fue maravillosa”. José Francisco afirmó que los toreros responden de otra forma a las lesiones, porque tienen una preparación previa.

Las sensaciones que tiene el maestro después de la grave cogida son diferentes. En el ámbito profesional, los toreros están expuestos a este tipo de peligro. En cuanto al estado de ánimo, Esplá explicó que “ahora mismo se plantea de forma diferente las cosas”. La profesión de torero, según el diestro, “enseña sobre todo a vivir, a diferenciar entre lo bueno, lo esencial o lo accesorio de la vida”.

Esplá describió al toro que le hizo las heridas como “muy complicado, me equivocó en muchos momentos”. El viento también afectó a su faena aunque intentó alargarla pero “hay una frontera en la que estás a merced del azar y esta vez giró a favor del toro”.

El torero fue consciente de la primera cornada sufrida en el escroto, pero a partir de ahí “viví los segundos de violencia en un estado de semi inconsciencia donde oía voces y ruido, pero era como si todo estuviera pasando en la habitación de al lado”.

Reaparición en los ruedos
Los médicos que atienden al torero estiman el tiempo para su recuperación en un mes pero el maestro añadió que “las personas del toreo siempre dejan este periodo a la mitad”, así que en menos de 30 días espera volver a una plaza de toros. Esta fecha coincide con el 18 de agosto en la corrida de Estepona, en Málaga, un mes después de la cogida.

Una de las cuestiones que más preocupa a Esplá no son las lesiones que tiene sino “que no se vaya la temporada sin poder volver al ruedo” y que en veinte días volverá a ser el de antes.

La figura del toreo describió lo vivido como “una ley natural, lo que no termina de matar al hombre, lo hace más fuerte”. Este tipo de situaciones vividas hacen que “te des cuenta de las cosas esenciales de la vida” y que en el fondo “es hasta provechoso un recordatorio, pero nunca tan fuerte”.

“Hay un Esplá antes y después de la cogida en cuanto a arte”, narró el torero refiriéndose a su nuevo planteamiento a la hora de lidiar con un toro. El diestro apuntó que “una experiencia así te revitaliza”.

Futuro torero
El hijo del torero, Alejandro Esplá, es novillero. El diestro tiene intención de darle la alternativa pero “sólo hay intención, no sé cuando”. En cuanto a los consejos que le puede dar al futuro torero si le ocurre algo así, el maestro alicantino comentó que “sólo puede explicarle lo sucedido, no más”.

El torero describió a su hijo como alguien que “debe enderezarse como un barco y que cuando lo consiga, yo buscaré puerto”. Esplá habló de su retirada pero dijo que “hay cuerda para rato pero también sentido común”.

La familia de Luis Francisco, incluida su mujer, le han sugerido que se retire. Esplá contó que “es una canción que se oye en casa pero que no hay porque preocuparse, ya que esto forma parte de la vida del artista y lo saben”.

En su primera aparición, el maestro estuvo arropado por gran cantidad de amigos. En ningún momento dejó de bromear con los asistentes en su reaparición en Alicante tan sólo cinco días después de la cogida.
Las Provincias