jueves, 28 de mayo de 2009

Cáritas abre pisos de acogida para familias desahuciadas por el banco

ALICANTE.- La época en la que toda la gente iba a Cáritas pidiendo ropa, comida o algo de dinero para pagar la luz o la guardería ya es historia. Ahora, la "principal demanda es poder pagar la hipoteca del piso", admitió Antonio Esteve, delegado episcopal de Cáritas en Alicante, que tilda de "angustiosa" la situación que afrontan decenas de familias que no pueden hacer frente a la deuda.

Ante esta situación, Cáritas ha habilitado varios pisos de acogida "temporal" para aquellas familias más necesitadas. Dos de ellos están en Alicante pero también existen pisos similares en Petrer o Elche, según 'El País'.

La demanda de ayuda de personas desfavorecidas aumentó el año pasado en un 40% en la provincia de Alicante, donde el pasado mes de abril se acumulaban 178.000 desempleados, de los que 60.000 carecían de prestación alguna, y 37.000 familias tenían a todos sus miembros parados.

"Detectamos un proceso rápido de vulnerabilidad y exclusión social", agregó Fernando Rodríguez, vicario episcopal, quien recordó cómo los demandantes de ayuda "ya no son los transeúntes, sino parados de larga duración, con cierta edad y cargas familiares, son los nuevos pobres".

La diócesis de Orihuela-Alicante presentó ayer el informe El empleo en la provincia de Alicante a la luz de la doctrina social de la Iglesia, que ofrece una radiografía sobre la actual coyuntura en el que defiende una "ética económica" y un crecimiento sostenible.

En cuanto a las propuestas que plantean, defienden la universalización de la cobertura social, el refuerzo de las redes sociales y otra política de empleo, como el cooperativismo, que "estimule el protagonismo de los parados".

Lucio Arnáiz, delegado diocesano de acción social, alertó sobre la "calamidad" de algunos casos que plantean los nuevos pobres.

Los curas donan su paga de verano

La propuesta que lanzó hace unas semanas el obispo de Orihuela-Alicante, Rafael Palmero, de donar íntegra la paga extraordinaria de julio a los más desfavorecidos parece que cala. "La acogida está siendo muy considerable", admitió Fernando Rodríguez, vicario episcopal, quien no supo concretar cuántos de los 351 sacerdotes de la diócesis han renunciado por escrito a esta paga veraniega.

"Se esperaba un gesto público para ayudar a los parados en tiempo de crisis, y se están sumando instituciones y personas particulares", agregó el responsable eclesiástico, quien recordó que será Cáritas, que destina 400.000 euros anuales para los pobres, la beneficiaria de estos donativos, que se concretarán a principios de agosto.

Entre las iniciativas solidarias que se plantean figura también contener los gastos en los presupuestos parroquiales, entregar un día de sueldo al mes a los parados o estimular convenios con supermercados para entregar comida.

La diócesis de Orihuela-Alicante informó de que 234.323 alicantinos marcaron en la declaración de la renta del año 2007 su aportación a favor de la Iglesia, lo que supone un 33,48% de los declarantes, y un aumento de 8,26% con respecto al ejercicio anterior.

La diócesis de Orihuela-Alicante recibirá este año 3,1 millones para su gestión, un 54,75% más que los dos millones del año pasado. El incremento obedece al nuevo sistema de financiación, que eleva al 0,7% su asignación.

1 comentario:

Anónimo dijo...

necesito urgente piso para vivir con mi bb de tres meses, estoy en la calle con el. Soy brasilena y no tengo familia en Espana. Mi correo yaskar2006@hotmail.com