martes, 9 de junio de 2009

Crespo rechaza fusiones entre cajas valencianas porque "Bancaja y CAM tienen más recorrido" y "posibilidades de crecer"

VALENCIA.- El nuevo presidente de la Caja del Mediterráneo (CAM), Modesto Crespo, mostró hoy su rechazo a las fusiones entre Cajas de la Comunitat Valenciana, porque, según dijo, "dos entidades tan importantes como Bancaja y CAM, que son la tercera y la cuarta del país, tienen más recorrido que una fusión entre ellas", y "más posibilidades de crecer".

El presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, recibió hoy en audiencia a Crespo, después de que ayer el Consejo de Administración de Caja Mediterráneo le eligiera por unanimidad, en sesión extraordinaria, como presidente de la entidad financiera en sustitución de Vicente Sala, quien estuvo al frente de la caja durante 11 años.

Preguntado por su rechazo a las fusiones entre cajas valencianas, señaló que tanto Bancaja como la CAM "tienen posibilidades de crecer mucho más, no necesariamente entre ellas", y añadió que ambas ocupan "un terreno propio con un corte social importante".

No obstante, matizó que "si fuera absolutamente necesario" desde el punto de vista "técnico" tampoco deberían "girar la cara hacia otro lado", aunque, "en este momento, no corresponde, subrayó.

En relación al fondo de reestructuración bancaria que pretende impulsar el Ministerio de Economía, resaltó que tanto la CAM, como por el "conocimiento" que él tiene de Bancaja, "ambas instituciones son suficientemente solventes como para poder hacer este tránsito sin problemas de ningún tipo".

En este sentido, aseguró que es "necesario que esto se sepa, porque estos negocios se basan en la confianza, sobre todo de los clientes". Insistió en que ambas entidades tienen una posición "lo suficientemente dominante de sus negocios y suficientes posibilidades de hacer este tránsito en un momento complicado", y "superarlo".

Sin embargo, Crespo precisó que, "tal vez, en España esas ayudas no vendrían mal porque en un mundo globalizado se juega en competencia" y entidades financieras de otros países "ya han obtenido recursos de los distintos estados". Al respecto, auguró que "se dará más la necesidad por ahí, que por el hecho real de que puedan tener un problema técnico", las cajas valencianas.

Por su parte, el presidente de la Generalitat felicitó al nuevo presidente de la CAM, y agradeció al Consejo de Administración y a la propia entidad "la excepcional labor financiera que han venido haciendo en favor de la economía de la provincia de Alicante". También destacó la "ejemplar transición" entre Vicente Sala y Modesto Crespo, quien, según dijo "va a ser un excepcional presidente de la CAM".

El jefe del Consell deseó "lo mejor" a Vicente Sala, al tiempo que reconoció el "encomiable esfuerzo" que ha llevado a cabo durante los "muchos años de servicio de la caja de ahorros", que se sitúa como "una de las cuatro grandes de España", recordó Camps.

En su opinión, la CAM es "un factor económico y financiero fundamental para entender el crecimiento y la prosperidad durante estos años de Alicante, de la Comunitat y de tantos otros lugares en los que la Caja de Ahorros del Mediterráneo ha estado trabajando".

Del mismo modo, Crespo agradeció "todos los apoyos" que ha recibido, "también desde el punto de vista institucional" porque "eso supone un apoyo unánime, no sólo a mi persona, sino a toda la institución, en un momento complicado" en el ámbito financiero.

Manifestó que, a partir de ahora, se va a seguir una línea de actuación de "continuidad", respecto a su antecesor, aunque "implantando su impronta personal".

Fitch mantiene los ratings a la CAM
pero le revisa la perspectiva a "negativa"

La agencia de calificación Ftich Ratings ha confirmado los rating a Caja Mediterráneo (CAM) en 'A' a largo plazo y en 'F2' a corto plazo, pero le ha revisado la perspectiva de "estable" a "negativa", informó hoy la caja a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Según la firma, este cambio de perspectiva refleja los desafíos que representa para la entidad un incremento de las dificultades del entorno operativo en España.

Además, Fitch ha rebajado el rating individual de la entidad a 'C' desde 'B/C', lo que refleja la "fuerte contracción" de la economía española, y del sector inmobiliario y el crecimiento del desempleo, que han afectado negativamente a la calidad de los activos de la caja y a su capacidad de generar beneficio.

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