Así lo indicó en un comunicado la coordinadora general de EUPV y diputada en las Corts, Marga Sanz, quien tildó de "inaceptable" que el CJC "se extralimitara en su función" que, según el artículo 2 de la Ley 10/1994, es "velar por la observancia de la Constitución, el Estatuto de Autonomía de la Comunitat Valenciana y el resto del ordenamiento jurídico", al hacer la propuesta de "considerar a los hombres como beneficiarios de las medidas de protección de las víctimas de la violencia de género".
Para Sanz, "es una barbaridad de tal magnitud, tanto política como jurídicamente, que hace pensar que los miembros del Consell Jurídic Consultivo necesitan un curso básico sobre igualdad, además de volverse a leer la Ley Orgánica 1/2004 de medidas de protección integral contra la violencia de género".
"Sólo les hará falta dos líneas del primer artículo para saber que se trata de la violencia que, como manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres, se ejerce sobre éstas".
La coordinadora de EUPV también lamentó la crítica que el Consell Jurídic Consultiu hace del uso del lenguaje no sexista en el texto normativo, lo que, a su juicio, supone "una demostración más de la falta de sensibilidad del máximo órgano consultivo respecto a la discriminación histórica que sufrimos las mujeres y que también se refleja en los usos lingüísticos".
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