domingo, 22 de julio de 2012

El puerto de Alicante se ofrece de ejemplo a Beirut pese a sus pérdidas

ALICANTE.- El puerto de Alicante, fuertemente afectado por la crisis desde hace varios años -uno de sus principales tráficos era el relacionado con los materiales de construcción-, atraviesa uno de sus peores momentos. Tras la caída del número de cruceristas, el próximo 17 de agosto perderá a la mayor naviera del mundo, Maersk, que aporta casi el 20% del tráfico de contenedores. El año 2011 se cerró con 1,6 millones de euros de pérdidas -aunque el dato supone mejorar en 400.000 euros la estimación del presupuesto, que preveía unos «números rojos» de dos millones-, según revela 'Abc'.

Pese a todo, la Autoridad Portuaria de Alicante considera que puede servir de ejemplo para los puertos del norte de África, y contribuir así a la mejora de las relaciones comerciales entre este continente y Europa. Así, el puerto alicantino participará en el proyecto «Custom Med», formado por socios del norte de África y de Europa, que persigue ejorar la eficiencia del comercio entre la Unión Europea y Medio Oriente. La terminal alicantina colaborará así con los puertos de Beirut (Líbano) y Aqaba (Jordania).
La Autoridad Portuaria y la Fundación Puerto de Alicante se encargarán de llevar a cabo el análisis DAFO y la identificación de Buenas Prácticas del puerto para la elaboración de la Hoja de Ruta en los citados puertos orientales, así como la identificación de herramientas y soluciones TIC y la organización de cursos de formación para funcionarios aduaneros y operadores de transporte.
El proyecto está formado por los dos países del norte de África, y por España, Grecia e Italia. La definición de una Hoja de Ruta para la adopción y la aplicación de procesos aduaneros compartidos que se hagan extensibles a otros países del norte de África y de Oriente Medio.
El presidente de la Autoridad Portuaria de Alicante, Joaquín Ripoll, está a punto de cumplir su primer año al frente de la terminal. En este tiempo, el puerto había logrado iniciar una tímida tendencia al alza en el tráfico de mercancías, mientras las escalas de cruceros caían en picado. La marcha de Maersk y la posible pérdida de la línea con África amenazan ahora la única magnitud que tenía un comportamiento positivo.

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