ALICANTE.- Caja Mediterráneo es la tercera caja de ahorros de España, tras Caja Madrid y Bancaja, con mayor aumento de la productividad, entendida esta variable como la relación del volumen de negocio (crédito a clientes más recursos captados a los clientes) por oficina operativa.
El dato se extrae del último análisis estadístico del anuario de la patronal del sector español Ceca y revela que la CAM ha superado la barrera sicológica de los 90 millones de euros de negocio por oficina, en base a una red de 1.060 sucursales a finales del año 2006 (a día de hoy alcanza ya las 1.080 oficinas, tras las últimas aperturas previstas en su plan de expansión).
El aumento es en términos relativos del 24%, lo que supone aumentar la productividad de las oficinas de la CAM en una media de 17,9 millones de euros, teniendo en cuenta que el volumen de negocio por sucursal de 91,1 millones de euros.
Sólo Caja Madrid, con un aumento de la productividad del 26% y 22 millones de euros por sucursal, y la Caja de Valencia, Castellón y Alicante (Bancaja), con un crecimiento en el último ejercicio del 30% y 23,4 millones de euros, superan a Caja Mediterráneo en esta ratio.
Además, la CAM se consolida como la sexta caja de ahorros española con mayor productividad neta por oficina operativa. Por delante se sitúan en el último año, por orden descendente, Caja Madrid, Bancaja, Caja Vitoria y Álava (Vital), Bilbao Bizkaia Kutxa (BBK) y Caja Gipúzkoa y San Sebastián (Kutxa).La productividad por oficina es, en esta relación de más a menos, 105,8 millones de euros, 98,6 millones, 96,6, 92,4 y 92,2 millones de euros.
Una fuente oficial de la CAM atribuye esa notable mejora de tan importante variable de negocio a la ampliación de la red de oficinas, sobre todo al carácter selectivo de dichas aperturas. «Caja Mediterráneo no abre oficinas en los sitios que lo hace por casualidad, porque independientemente de cuándo y dónde abrimos oficinas, creados una cadena de trabajo con equipos previos que van de avanzadilla y hacen estudios de mercado con visitas a futuros y potenciales clientes; es decir, no partimos de cero sino de 1,5», explicó de forma ilustrativa un portavoz autorizado de CAM.
Este argumento desmonta la explicación que, en lógica, debería justificar la reducción del volumen de negocio. Es decir, no se produce la relación a más puntos de venta, más reparto de la tarta de negocio y, en consecuencia, menos productividad y volumen de negocio. Antes bien, el fuerte proceso expansivo de la red en la CAM y en Caja Madrid, Bancaja y las tres cajas de ahorros vascas no ha hecho mella alguna en la productividad de las sucursales. Lejos de este escenario, las cajas de ahorros españolas no paran de abrir oficinas nuevas y la productividad de cada una de ellas aumenta todavía más.
Según los datos del anuario de Cea, en el año 2006 las cajas de ahorros de España cerraron el ejercicio con un total de 23.475 oficinas abiertas, un 4,5% más que en el año 2005. La media de negocio por sucursal creció, sin embargo, un 21% (24% en la CAM).
www.laverdad.es
El dato se extrae del último análisis estadístico del anuario de la patronal del sector español Ceca y revela que la CAM ha superado la barrera sicológica de los 90 millones de euros de negocio por oficina, en base a una red de 1.060 sucursales a finales del año 2006 (a día de hoy alcanza ya las 1.080 oficinas, tras las últimas aperturas previstas en su plan de expansión).
El aumento es en términos relativos del 24%, lo que supone aumentar la productividad de las oficinas de la CAM en una media de 17,9 millones de euros, teniendo en cuenta que el volumen de negocio por sucursal de 91,1 millones de euros.
Sólo Caja Madrid, con un aumento de la productividad del 26% y 22 millones de euros por sucursal, y la Caja de Valencia, Castellón y Alicante (Bancaja), con un crecimiento en el último ejercicio del 30% y 23,4 millones de euros, superan a Caja Mediterráneo en esta ratio.
Además, la CAM se consolida como la sexta caja de ahorros española con mayor productividad neta por oficina operativa. Por delante se sitúan en el último año, por orden descendente, Caja Madrid, Bancaja, Caja Vitoria y Álava (Vital), Bilbao Bizkaia Kutxa (BBK) y Caja Gipúzkoa y San Sebastián (Kutxa).La productividad por oficina es, en esta relación de más a menos, 105,8 millones de euros, 98,6 millones, 96,6, 92,4 y 92,2 millones de euros.
Una fuente oficial de la CAM atribuye esa notable mejora de tan importante variable de negocio a la ampliación de la red de oficinas, sobre todo al carácter selectivo de dichas aperturas. «Caja Mediterráneo no abre oficinas en los sitios que lo hace por casualidad, porque independientemente de cuándo y dónde abrimos oficinas, creados una cadena de trabajo con equipos previos que van de avanzadilla y hacen estudios de mercado con visitas a futuros y potenciales clientes; es decir, no partimos de cero sino de 1,5», explicó de forma ilustrativa un portavoz autorizado de CAM.
Este argumento desmonta la explicación que, en lógica, debería justificar la reducción del volumen de negocio. Es decir, no se produce la relación a más puntos de venta, más reparto de la tarta de negocio y, en consecuencia, menos productividad y volumen de negocio. Antes bien, el fuerte proceso expansivo de la red en la CAM y en Caja Madrid, Bancaja y las tres cajas de ahorros vascas no ha hecho mella alguna en la productividad de las sucursales. Lejos de este escenario, las cajas de ahorros españolas no paran de abrir oficinas nuevas y la productividad de cada una de ellas aumenta todavía más.
Según los datos del anuario de Cea, en el año 2006 las cajas de ahorros de España cerraron el ejercicio con un total de 23.475 oficinas abiertas, un 4,5% más que en el año 2005. La media de negocio por sucursal creció, sin embargo, un 21% (24% en la CAM).
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