MADRID.- Los problemas que empiezan a tener algunos titulares de créditos para hacer frente a sus deudas han hecho que el fantasma de la morosidad asome la cabeza en las cuentas de la gran banca española, lo que marca el principio del fin del "idilio" crediticio que mantenían las entidades y sus clientes.
De hecho, según la información recabada por Efe, a cierre de septiembre, el Grupo Santander, el BBVA, Caja Madrid y el Popular acumulaban entre todos un volumen de activos dudosos de 10.545 millones de euros, un 27,4% más que un año antes, una cifra que se aproxima peligrosamente a los 13.524 millones de euros netos que ganaron en conjunto estas cuatro entidades en este periodo.
En estas cifras no está incluida La Caixa, tercera entidad del panorama financiero español, ya que sólo ofrece datos sobre activos dudosos en sus informes anuales, según informaron fuentes de la entidad catalana.
Así, al término del noveno mes del año, las cuatro entidades analizadas vieron crecer sus activos dudosos por encima del 20%, aunque la que más lo notó en términos porcentuales fue el BBVA, con un repunte del 37,9% que los situó en 3.255 millones de euros.
A continuación, siempre por orden porcentual, se situó Caja Madrid, con un repunte del 32,8%, hasta los 857,5 millones, en tanto que el Grupo Santander sumaba 5.669 millones, un 22,2% más, y el Banco Popular, 761 millones, un 21,2% más.
De todas formas, a la hora de analizar estos datos, conviene no olvidar que la aplicación de las nuevas Normas Internacionales de Contabilidad (NIC) provoca que cuando los retrasos en los pagos de un crédito alcanzan las tres cuotas se considera dudoso todo el préstamo, lo que hace que suba la tasa.
Aún así, el ratio de morosidad de estas entidades se mantiene en niveles realmente bajos, a pesar de la subida que registra en todas ellas en comparación con el dato del año pasado, ya que el Santander tenía una mora del 0,89%, frente al 0,87% de un año antes, en tanto que la del BBVA era del 0,88% (0,82%), la de Caja Madrid, del 0,71% (0,63%) y la del Popular, del 0,77% (0,74%).
Tampoco ayuda a mejorar la situación la crisis de liquidez que viven los mercados internacionales desde comienzos de agosto, con el consiguiente endurecimiento del "examen" que deben pasar en el banco los aspirantes a un crédito de cualquier tipo, lo que contrasta con las facilidades que se les ofrecían no hace tanto tiempo y que algunas voces llegaron a calificar de "café para todos".
Sin embargo, los titulares de un crédito a interés variable -la inmensa mayoría-, que llevan veinticuatro meses observando con preocupación la escalada del Euribor, podrán tomarse un respiro en breve, ya que este índice cerrará octubre en el 4,655%, en su primera bajada en dos años, según datos del mercado.
De hecho, el consejero delegado del Banco Pastor, Jorge Gost, pronosticó recientemente en nombre de la entidad que el Euribor a un año "se relajará" en 2008 y que podría terminar ese ejercicio en el 3,9 por ciento, en sintonía con las previsiones realizadas días antes por el Servicio de Estudios del BBVA.
Pero, volviendo a los activos "dudosos", de momento ninguna de las grandes entidades del sistema financiero español ha dejado entrever preocupación alguna por estos repuntes de la morosidad, y casi todas han argumentado que la economía española continúa creciendo bien, aunque haya que revisar un poco a la baja las previsiones, y que no hay motivo para preocuparse mientras siga creciendo el empleo.- (EFE)
De hecho, según la información recabada por Efe, a cierre de septiembre, el Grupo Santander, el BBVA, Caja Madrid y el Popular acumulaban entre todos un volumen de activos dudosos de 10.545 millones de euros, un 27,4% más que un año antes, una cifra que se aproxima peligrosamente a los 13.524 millones de euros netos que ganaron en conjunto estas cuatro entidades en este periodo.
En estas cifras no está incluida La Caixa, tercera entidad del panorama financiero español, ya que sólo ofrece datos sobre activos dudosos en sus informes anuales, según informaron fuentes de la entidad catalana.
Así, al término del noveno mes del año, las cuatro entidades analizadas vieron crecer sus activos dudosos por encima del 20%, aunque la que más lo notó en términos porcentuales fue el BBVA, con un repunte del 37,9% que los situó en 3.255 millones de euros.
A continuación, siempre por orden porcentual, se situó Caja Madrid, con un repunte del 32,8%, hasta los 857,5 millones, en tanto que el Grupo Santander sumaba 5.669 millones, un 22,2% más, y el Banco Popular, 761 millones, un 21,2% más.
De todas formas, a la hora de analizar estos datos, conviene no olvidar que la aplicación de las nuevas Normas Internacionales de Contabilidad (NIC) provoca que cuando los retrasos en los pagos de un crédito alcanzan las tres cuotas se considera dudoso todo el préstamo, lo que hace que suba la tasa.
Aún así, el ratio de morosidad de estas entidades se mantiene en niveles realmente bajos, a pesar de la subida que registra en todas ellas en comparación con el dato del año pasado, ya que el Santander tenía una mora del 0,89%, frente al 0,87% de un año antes, en tanto que la del BBVA era del 0,88% (0,82%), la de Caja Madrid, del 0,71% (0,63%) y la del Popular, del 0,77% (0,74%).
Tampoco ayuda a mejorar la situación la crisis de liquidez que viven los mercados internacionales desde comienzos de agosto, con el consiguiente endurecimiento del "examen" que deben pasar en el banco los aspirantes a un crédito de cualquier tipo, lo que contrasta con las facilidades que se les ofrecían no hace tanto tiempo y que algunas voces llegaron a calificar de "café para todos".
Sin embargo, los titulares de un crédito a interés variable -la inmensa mayoría-, que llevan veinticuatro meses observando con preocupación la escalada del Euribor, podrán tomarse un respiro en breve, ya que este índice cerrará octubre en el 4,655%, en su primera bajada en dos años, según datos del mercado.
De hecho, el consejero delegado del Banco Pastor, Jorge Gost, pronosticó recientemente en nombre de la entidad que el Euribor a un año "se relajará" en 2008 y que podría terminar ese ejercicio en el 3,9 por ciento, en sintonía con las previsiones realizadas días antes por el Servicio de Estudios del BBVA.
Pero, volviendo a los activos "dudosos", de momento ninguna de las grandes entidades del sistema financiero español ha dejado entrever preocupación alguna por estos repuntes de la morosidad, y casi todas han argumentado que la economía española continúa creciendo bien, aunque haya que revisar un poco a la baja las previsiones, y que no hay motivo para preocuparse mientras siga creciendo el empleo.- (EFE)
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