VALENCIA.- Otras dos firmas valencianas se han incorporado al listado de empresas que optan por solicitar un concurso de acreedores, antigua suspensión de pagos, para poder mantener la actividad de sus empresas, según revela "El Boletín".
Tienen un perfil similar al de Llanera: ambiciosos planes de expansión, segunda residencia y destacadas políticas de marketing. Sin embargo, lo que más les une es tener un tamaño medio y haber planificado su expansión para los años en los que ya se preveía la entrada de la crisis inmobiliaria
La crisis inmobiliaria sigue cobrándose víctimas entre las empresas del sector. Las valencianas Nou Temple y Encoval (accionista de Zamir Inmobiliaria) son las últimas valencianas en presentar la solicitud de concurso de acreedores por incapacidad de afrontar las deudas contraídas, según han confirmado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana. Y en las próximas semanas se anuncia desde el mismo sector que el listado de inmobiliarias valencianas en esta situación seguirá creciendo.
No se vende nada y los proyectos inmobiliarios en marcha se quedan sin financiación. Los últimos datos del INE de enero siguen apuntando al empeoramiento de la crisis y una nueva criba entre las compañías del sector. La compraventa de viviendas en España se redujo un 27%respecto el mismo mes de 2007. Los créditos hipotecarios también fueron menos que en 2007. Concretamente se redujeron un 27,99%.
Al final, la crisis ha puesto en entredicho la solidez financiera de empresas inmobiliarias, pero sobre todo las de tamaño medio. Nou Temple es un claro ejemplo de ello. La promotora de Vicente Flames se dio a conocer por la imagen del futbolista de la Pobla Llarga, David Albelda. Pero ha corrido la misma suerte que su imagen de marca.
La promotora ya registraba una bajada de la cifra de ventas antes de la crisis el año de su décimo aniversario. En 2006 esta cifra descendía un 95,94% respecto a 2005, según los últimos datos de Informa. La evolución de sus flujos de caja tampoco era positiva. En el ejercicio de 2006 el cash flow de la compañía se reducía un 54,96%. Este año, la empresa decidía expandir su negocio hacia la provincia de Castellón y preveía duplicar su cifra de negocio precisamente en los años en los que la crisis ha llegado al sector.
Y es que no ha funcionado la venta de sus promociones de viviendas residenciales, tal vez porque estaban concebidas como segunda residencia y es el primer tipo de vivienda que ha dejado de venderse. Al final, para mantener su actividad, y frente a las deudas, ha tomado la decisión de solicitar un concurso de acreedores.
La pata constructora de Zamir Inmobiliaria (Encoval posee un 40% de las acciones de Zamir y comparte el mismo consejero delegado, Carlos Martínez de Coca), también ha emprendido voluntariamente medidas cautelares y preventivas ante la situación económica que afecta al sector inmobiliario y ha solicitado concurso voluntario de acreedores para garantizar la continuidad de su actividad.
El accionista de Zamir
Los principales motivos por los que la constructora ha tomado esta medida son "la falta de liquidez transitoria derivada del endurecimiento del sistema financiero y la situación de morosidad" de sus clientes promotores, según explican a este semanario fuentes de Zamir. La situación financiera de Encoval no tiene consecuencias para las empresas participadas por la constructora valenciana, como es el caso de Zamir, y no afecta a su actividad principal.
Tampoco afectará a los propios clientes de Encoval, entre los que destaca Espacio como comprador del mayor porcentaje de inmuebles construidos por la empresa (un 13,40% del total levantado).
La falta de liquidez transitoria de la empresa derivada del endurecimiento del sistema financiero y la situación de morosidad de sus clientes promotores inmobiliarios, suponen los principales motivos por los que Encoval se ha visto obligada a tomar esta medida que asegure la viabilidad y futuro de la empresa. Actualmente el número de viviendas en fase de obra a cargo de la empresa alcanza las 957 en la Comunitat Valenciana y Tarragona, y 817 plazas de garaje cuya obra, en 14 localidades diferentes, se encuentra en curso.
En la provincia de Valencia, las localidades de Chiva, Alzira, Puzol (playa), Picassent, El Puig, Gilet y la propia capital son los emplazamientos de sus actuales proyectos en construcción. Además, fuentes de Encoval han asegurado a este semanario que las obras iniciadas "se seguirán desarrollando".
En Alicante, los municipios de Altea, Denia, Calpe, Alfaz del Pi y Villajoyosa son los que albergan obras a cargo de Encoval, mientras que Vinaroz figura como el único municipio en la provincia de Catellón.
Sin embargo, la proyección empresarial de Encoval la ha llevado también a invertir fuera de la Comunitat, ya que se ha previsto destinar 2,63millones euros a la construcción de 44 viviendas y otras tantas plazas de garaje en la playa de Alcanar, en Tarragona.
Tienen un perfil similar al de Llanera: ambiciosos planes de expansión, segunda residencia y destacadas políticas de marketing. Sin embargo, lo que más les une es tener un tamaño medio y haber planificado su expansión para los años en los que ya se preveía la entrada de la crisis inmobiliaria
La crisis inmobiliaria sigue cobrándose víctimas entre las empresas del sector. Las valencianas Nou Temple y Encoval (accionista de Zamir Inmobiliaria) son las últimas valencianas en presentar la solicitud de concurso de acreedores por incapacidad de afrontar las deudas contraídas, según han confirmado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana. Y en las próximas semanas se anuncia desde el mismo sector que el listado de inmobiliarias valencianas en esta situación seguirá creciendo.
No se vende nada y los proyectos inmobiliarios en marcha se quedan sin financiación. Los últimos datos del INE de enero siguen apuntando al empeoramiento de la crisis y una nueva criba entre las compañías del sector. La compraventa de viviendas en España se redujo un 27%respecto el mismo mes de 2007. Los créditos hipotecarios también fueron menos que en 2007. Concretamente se redujeron un 27,99%.
Al final, la crisis ha puesto en entredicho la solidez financiera de empresas inmobiliarias, pero sobre todo las de tamaño medio. Nou Temple es un claro ejemplo de ello. La promotora de Vicente Flames se dio a conocer por la imagen del futbolista de la Pobla Llarga, David Albelda. Pero ha corrido la misma suerte que su imagen de marca.
La promotora ya registraba una bajada de la cifra de ventas antes de la crisis el año de su décimo aniversario. En 2006 esta cifra descendía un 95,94% respecto a 2005, según los últimos datos de Informa. La evolución de sus flujos de caja tampoco era positiva. En el ejercicio de 2006 el cash flow de la compañía se reducía un 54,96%. Este año, la empresa decidía expandir su negocio hacia la provincia de Castellón y preveía duplicar su cifra de negocio precisamente en los años en los que la crisis ha llegado al sector.
Y es que no ha funcionado la venta de sus promociones de viviendas residenciales, tal vez porque estaban concebidas como segunda residencia y es el primer tipo de vivienda que ha dejado de venderse. Al final, para mantener su actividad, y frente a las deudas, ha tomado la decisión de solicitar un concurso de acreedores.
La pata constructora de Zamir Inmobiliaria (Encoval posee un 40% de las acciones de Zamir y comparte el mismo consejero delegado, Carlos Martínez de Coca), también ha emprendido voluntariamente medidas cautelares y preventivas ante la situación económica que afecta al sector inmobiliario y ha solicitado concurso voluntario de acreedores para garantizar la continuidad de su actividad.
El accionista de Zamir
Los principales motivos por los que la constructora ha tomado esta medida son "la falta de liquidez transitoria derivada del endurecimiento del sistema financiero y la situación de morosidad" de sus clientes promotores, según explican a este semanario fuentes de Zamir. La situación financiera de Encoval no tiene consecuencias para las empresas participadas por la constructora valenciana, como es el caso de Zamir, y no afecta a su actividad principal.
Tampoco afectará a los propios clientes de Encoval, entre los que destaca Espacio como comprador del mayor porcentaje de inmuebles construidos por la empresa (un 13,40% del total levantado).
La falta de liquidez transitoria de la empresa derivada del endurecimiento del sistema financiero y la situación de morosidad de sus clientes promotores inmobiliarios, suponen los principales motivos por los que Encoval se ha visto obligada a tomar esta medida que asegure la viabilidad y futuro de la empresa. Actualmente el número de viviendas en fase de obra a cargo de la empresa alcanza las 957 en la Comunitat Valenciana y Tarragona, y 817 plazas de garaje cuya obra, en 14 localidades diferentes, se encuentra en curso.
En la provincia de Valencia, las localidades de Chiva, Alzira, Puzol (playa), Picassent, El Puig, Gilet y la propia capital son los emplazamientos de sus actuales proyectos en construcción. Además, fuentes de Encoval han asegurado a este semanario que las obras iniciadas "se seguirán desarrollando".
En Alicante, los municipios de Altea, Denia, Calpe, Alfaz del Pi y Villajoyosa son los que albergan obras a cargo de Encoval, mientras que Vinaroz figura como el único municipio en la provincia de Catellón.
Sin embargo, la proyección empresarial de Encoval la ha llevado también a invertir fuera de la Comunitat, ya que se ha previsto destinar 2,63millones euros a la construcción de 44 viviendas y otras tantas plazas de garaje en la playa de Alcanar, en Tarragona.
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