ALICANTE.- El abogado Diego de Ramón se ha dirigido al Departamento de Investigación de la Policía del Estado de Nuevo Méjico, en Estados Unidos, para que investigue y, en su caso, se descarten posibles financiaciones desde Valencia, para su campaña electoral, al gobernador Bill Richardson, con objeto de esclarecer y dejar a salvo el buen nombre del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, quien lo visitó el pasado 16 de diciembre, en pleno escándalo.
Recuerda el letrado la investigación abierta a Richardson por el FBI con anterioridad a esa fecha y pide también que las pesquisas se extiendan a entidades financieras españolas radicadas en Florida y a sus empresas participadas en EE UU por haber tenido contacto con CDR, una empresa radicada en California y dedicada a productos financieros, por haber hecho grandes donaciones a la campaña electoral del citado gobernador.
De Ramón insiste en dejar en su sitio el buen nombre de Camps y de las entidades financieras españolas desplazadas a Estados Unidos, "dado, parece ser, que el método operativo de este político norteamericano, investigado, era el cobro de comisiones".
Francisco Camps fue el primer político español del PP que quiso contactar directamente con la nueva Administración Obama para demandar apoyos y así poder postularse después como eventual sucesor de Rajoy, llegado el caso.
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