Al respecto, Blasco declaró que la Comunitat es "solidaria con todas las personas inmigrantes que residen en ella", pero advirtió de que el Ejecutivo central "no puede obviar el mapa demográfico" de la autonomía. Por ello, le pidió que proporcione la financiación "necesaria" con el fin de cubrir este aumento de la población para que se pueda prestar una asistencia sanitaria, psicológica, social, educativa adecuada, y sin que ello suponga tensiones en el sistema asistencial.
Recordó, en este sentido, que el incremento de alrededor de un millón de personas de la Comunitat Valenciana se debe, principalmente, al auge de la inmigración de los últimos años. En comparación de este dato con el de 30 países europeos, la autonomía tiene un porcentaje de inmigrantes muy superior a la mayoría, en concreto a 27 países, incluso a los principales como Reino Unido --6,57 por ciento--; Francia --5,76 por ciento--; Italia --5,7 por ciento--; Alemania --8,82 por ciento-- o Suecia --6,57 por ciento--.
Del mismo modo, este porcentaje es superior al de la media de la Unión Europea de los 27 --5,19 por ciento--, de los 25 --6,57 por ciento-- y de los 15 --9,09 por ciento--. Es decir, zonas con gran tradición en materia de inmigración en los últimos 50 años cuentan con una proporción de extranjeros mucho menor.
Así, en la geografía valenciana viven 882.870 personas extranjeras, un número superior al de países europeos enteros como Bulgaria, Irlanda, Dinamarca, República Checa, Estonia, Chipre, Letonia, Luxemburgo, Países Bajos, Portugal, Eslovenia, Eslovaquia, Suecia, Croacia, Finlandia o Noruega.
Los únicos tres países con porcentajes más elevados son Letonia --18,30 por ciento--, Luxemburgo --42,56 por ciento-- y Suiza --21,10 por ciento--. El viejo continente cambió de forma considerable, y las personas extranjeras que deciden emigrar modificaron su destino hacia los países mediterráneos.
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