Según Amorós, "hay una evidente dejación de funciones en la delegación del Consell, porque no actúa como intermediador entre los intereses de la provincia y el Gobierno valenciano, sino como agente electoral al servicio de Camps".
En este sentido, para el político socialista, "la provincia de Alicante carece de referentes del PP que defiendan los intereses colectivos". A su juicio, sólo existen "pugnas por las cuotas de poder de los distintos bandos en los que se ha fragmentado la derecha alicantina".
"Quien capitanea a los campsistas es una persona que cobra de todos los alicantinos, una realidad que debería tener en cuenta Císcar", opinó el portavoz del PSPV-PSOE, quien añadió que el delegado del Consell "se olvida de sus funciones y sólo se nota su presencia entre asamblea y asamblea del PP".
Para Amorós, la Generalitat tiene "cientos de compromisos incumplidos" con la institución provincial, si bien el delegado del Consell "no se ha molestado en entrevistarse con los diputados provinciales" ni "se ha preocupado de qué planes, inversiones o mejoras pierde la provincia", a su juicio, "por la pésima gestión de la Generalitat".
El político socialista señaló que "esta situación" es fruto "de la parálisis del PP y de la guerra interna a la que está sometido" el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, en su opinión, "entre los ripollistas y los que colaboran con las ansias de poder" del vicesecretario general de Comunicación del PP, Esteban González Pons.
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