Mario Flores ha insistido en que el sector privado "debe ser consciente de su papel protagonista en la consecución de los principios de utilidad pública y de interés social".
"Estoy convencido de que el concepto de gestión pública moderna pasa por un modelo de colaboración público-privada, de participación del sector privado en aquellas iniciativas y actuaciones que así lo permitan", ha recalcado.
Los analistas coinciden en destacar que el nivel y la calidad de las infraestructuras públicas "son un indicador para medir el grado de desarrollo de una sociedad y su potencial económico".
"Sin embargo, la escasez de recursos económicos a los que nos vamos a ver sometidos, no sólo en estos momentos, sino en los próximos años, pueden suponer un freno al importante esfuerzo inversor que se ha realizado en el último decenio, volviendo a quedarnos a la cola de Europa en lo que al stock de infraestructuras se refiere", ha indicado.
Por ello, Flores ha abogado "por la necesidad de seguir creciendo y construir un sector empresarial especializado en fórmula de colaboración público-privada".
"Tanto las empresas que se dedican a la construcción de obra civil, como las empresas consultoras, las firmas de asesoría jurídica y económica, las entidades financieras y, como no, la administración pública debemos aplicarnos con rigor en el estudio de este tipo de fórmulas. No hacerlo, nos podría dejar fuera de juego en futuras licitaciones de obra pública", ha advertido.
En esta línea, y dado que, en una época de crisis económica como la actual, la realidad obliga a llevar a cabo otras fórmulas de financiación y, en este sentido, Flores ha recordado el Plan de Inversiones del Ministerio de Fomento por valor de 17.000 millones de euros a licitar mediante fórmulas de colaboración público-privada.
En esta misma línea, ha señalado que desde la Conselleria de Infraestructuras también se trabaja para sacar un "paquete de obras importante mediante fórmulas concesionales o de colaboración público-privada", a la espera de que el Ministerio "concluya los nuevos pliegos que eviten el cómputo de la deuda en la contabilidad de la Administración pública para poder analizarlos y aplicarlos a nuestros proyectos".
Asimismo, ha explicado que "en breve" se sacará a concurso las concesiones de la Línea 2 de Metrovalencia o la Línea 2 del TRAM de Alicante. "Incluso estamos estudiando que algún tramo del Tren de la Costa, ente Alicante, Benidorm y Dénia, también pueda ser objeto de este tipo de proyectos de colaboración público-privada", ha especificado.
Flores ha abogado por adoptar decisiones con una visión "a largo plazo".
"Debemos concienciarnos de que las grandes infraestructuras pueden financiarse en periodos de tiempo más largos, distribuyendo la carga financiera durante la vida útil de una infraestructura que va a ser utilizada por los contribuyentes de hoy y de mañana", ha destacado.
Por su parte, la directora de Derecho Público de Broseta Abogados, Rosa Vidal Monferrer, ha señalado que si bien la colaboración público-privada en materia de infraestructuras es "habitual desde hace tiempo, la crisis y la falta de liquidez de las administraciones va a imponer este modelo mixto como la única alternativa posible para la puesta en marcha de nuevas infraestructuras, con el añadido de que la obra nueva va a tener que ser susceptible de explotación".
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