El europarlamentario socialista Perelló defiende zumos libres de azúcares añadidos y etiquetas claras para el consumidor de la Unión Europea

BRUSELAS.- El eurodiputado socialista Andrés Perelló ha defendido hoy que los zumos naturales exprimidos o concentrados que se comercialicen en la Unión Europea estén libres de azúcares añadidos, aunque se permita en los néctares siempre que se alerte de ello en su etiqueta; al tiempo que ha recalcado la necesidad de mejorar la información que llega a los consumidores para que tengan claras las calidades y contenido del producto que adquiere.

   En la actualidad se tolera que los zumos etiquetados como sin azúcar añadido incluyan hasta 15 gramos de azúcar por litro para corregir la acidez, pero en opinión del eurodiputado es una concesión que ya "no tiene sentido" porque ahora los productores mezclan el producto de distintas cosechas y con ello se corrige dicha acidez.

   Perelló es el ponente de un informe del Parlamento Europeo sobre la directiva de zumos de frutas que Bruselas ha propuesto mejorar las normas de producción, etiquetado y comercialización, que se debatirá en los próximos meses en la Eurocámara con el objetivo de que se someta al voto del pleno en el mes de junio.

   Los principales objetivos de las enmiendas que propone Perelló están dirigidos a ofrecer una mayor información a los consumidores, eliminar la presencia de azúcares añadidos en los zumos exprimidos o concentrados, garantizar la calidad de los jugos y asegurar la "igualdad de trato" para que se exija a los productores terceros los mismos estándares que a los europeos, según ha resumido el eurodiputado en un encuentro con la prensa.

   "Los consumidores somos los mismos y nuestra salud es la misma", ha recalcado para defender la importancia de que la "excelencia" en el cumplimiento de las normas que se exija al producto europeo se pida también a competidores terceros como Estados Unidos y Brasil, principales potencias del sector.

   España es el primero productor y primer consumidor de zumos en la Unión Europea, cuyo mercado total representan un 10% de las bebidas no alcohólicas que consumen los europeos. La Unión Europea sólo produce el 12,4% del zumo que consume, en su mayoría (80%) de naranja y manzana.

   Entre las enmiendas defendidas por Perelló figura el permitir hasta un 10% de mandarina en el zumo de naranja sin que sea necesario anunciarlo como mezcla, una medida que puede encontrar "serios detractores" en las negociaciones.