lunes, 20 de febrero de 2012

Fabra llama a capítulo a Rus por sus presuntas palabras despectivas contra Rajoy y Cospedal

VALENCIA.- El presidente de la Generalitat y del PP en la Comunitat Valenciana, Alberto Fabra, llamó ayer luners al presidente provincial de los populares valencianos, Alfonso Rus, para pedirle explicaciones por sus comentarios sobre Mariano Rajoy y Dolores de Cospedal, presidente y secretaria general del PP, respectivamente, revela hoy 'Las Provincias'.

A Alberto Fabra «no le ha gustado demasiado» lo sucedido en la noche del viernes en el interior del restaurante ''La Isla'', donde cenó Alfonso Rus y su núcleo más próximo tras asistir al final de la jornada inaugural del congreso nacional del PP, tratan de suavizar desde el Palau de la Generalitat.
Alfonso Rus, como ha publicado 'Las Provincias', realizó comentarios sobre Mariano Rajoy y Dolores de Cospedal. Pero Rus se lo negó ayer al presidente regional del PP cuando éste le reclamó una explicación convincente sobre lo sucedido.
¿El presidente Fabra se creyó a Alfonso Rus? La respuesta oficial es que el jefe del Consell y del PP en la Comunitat Valenciana tiene que hacer caso a la versión que le transmita su presidente provincial. Pero en el fondo tiene sus dudas y su balanza parece inclinarse más hacia la versión de los hechos que cuentan los compromisarios castellano-manchegos que estaban en el mismo restaurante, en la mesa de al lado.
«El problema es que allí había otras personas que lo oyeron», apuntaron fuentes oficiales consultadas tras asegurar que el presidente Fabra, lo lógico, es que hiciera caso a Rus.
Desde el Palau tratan de quitar algo de hierro al asegurar que al presidente Fabra le preocupa la situación económica que sufren los ciudadanos valencianos, las empresas, los trabajadores, la deuda que arrastra la Generalitat, por lo que está centrado «en mejorar la situación económica». Lo sucedido con Rus en Sevilla se considera, pues, «un asunto menor, son anécdotas de bar».
No obstante, las mismas fuentes incidieron en que «al presidente Fabra no le ha gustado demasiado» lo que pasó en Sevilla y se atribuye a que debido a la situación pregongresual -en cuatro meses se va a celebrar el congreso regional y los tres provinciales en el PPCV-, algo que, al parecer, está creando «nerviosismo en algunos», apuntaron ayer otras fuentes.
Pero lo sucedido en Sevilla no se queda solamente en la cena en la que, al parecer, se paseó entre los postres el nombre humorístico de 'Marianico, el corto', en relación a Mariano Rajoy, presidente del Gobierno, y comentarios soeces en relación a la dama de hierro castellano-manchega. El plante de una buena parte de la delegación valenciana a Fabra mientras pronunciaba su discurso sobre los estatutos del PP fue significativo del distanciamiento, aunque, por contra, a la comida organizada por el PPCV el sábado no faltó nadie.
Desde el Palau se considera que el presidente nacional del PP «le ha dado el poder absoluto a Fabra» hasta el punto de que le encargó la 'carta magna' de los populares de toda España «se la ha aprobado y con ella se va a regir el partido durante los próximos años». A ello hay que añadir a los nueve valencianos presentes en el comité ejecutivo nacional del PP.
De ahí que desde el Palau no haya preocupación alguna de que Alberto Fabra pueda tener enfrente una lista alternativa en el congreso regional del PPCV, que se celebrará en abril.
Además, se defienden desde el núcleo de poder político autonómico al asegurar que hablar ahora de la posibilidad que se presenten listas alternativas «no es nada serio». Ahora, si alguien quiere hacerlo, desde el Palau de la Generalitat se advierte de que Génova ha dado todo su apoyo a Fabra, «más es imposible».
«El presidente quiere contar con todos y mirar hacia adelante, al futuro, aunque si alguien no se quiere subir a ese carro será cosa suya», advirtieron las mismas fuentes. Ahora, Fabra «cuenta con todos para el partido, pero está centrado en trabajar por lo verdaderamente importante: solucionar los problemas de los ciudadanos».
Otra cuestión es lo que pueda suceder con Alfonso Rus, que aspira a repetir al frente de la presidencia provincial del PP en Valencia, como ya anunció hace tiempo. Fuentes cercanas al actual máximo responsable de la Diputación llegaron a asegurar ayer que se pretende apartar políticamente a Rus, que están «tratando de minarlo» y que aunque tenga un candidato alternativo, él seguirá como presidente provincial después del congreso.
«Rus ganará el congreso provincial del PP en Valencia, le costará pero al final lo ganará con claridad», aseguraron las mismas fuentes.
Las mismas fuentes advirtieron de que si fuera verdad lo que se le atribuye a Rus «sería, sin ninguna duda, para abrirle expediente». Consideran que con ese ataque, si no es verdad de lo que se le acusa al presidente provincial del PP , lo que se provoca es enrabietar a Alfonso Rus, que es mal enemigo.
Rus recibió también el recado de su colega en la Diputación de Castellón, Javier Moliner, que aspira a convertirse en el presidente del PP castellonense. Moliner dijo que del Congreso Nacional del PP «sale reforzado» Alberto Fabra y «parece ser que en las cenas sale reforzado Alfonso Rus».
Fuentes de la organización regional del PPCV incidieron en que Alfonso Rus ya ha manifestado públicamente su intención de continuar al frente de la provincial y no se va a levantar un dedo para tratar de impedírselo. «Nosotros no actuamos así», argumentaron desde la calle Quart, donde se encuentra la sede regional y la provincial del PPCV.
Otra cosa será si las palabras que varios compromisarios del PP castellano-manchego atribuyen al presidente del PP de la provincia de Valencia sobre el presidente del Gobierno y la secretaria general del partido y responsable de la Junta de Castilla-La Mancha calan en la calle Génova donde Dolores de Cospedal es ahora el ama y señora.
Un dirigente del PP cercano a Alberto Fabra reconoció la división evidente con la que ha vuelto el PPCV de Sevilla, donde la regional va por su lado, Castellón por donde marca el otro Fabra, Carlos, el avispero en el que se está convirtiendo Valencia y los líos que están volviendo a Alicante. «Fabra está en lo importante, en gobernar y buscar soluciones a la crisis económica. Pero alguien tendrá que poner orden ahí. Eso está fallando en el partido», aseguró.
 
Rus pone en riesgo su futuro político
 
Al líder de los populares en la provincia de Valencia, Alfonso Rus, la cena del viernes por la noche en el restaurante 'La Isla' de Madrid le va a salir cara. No en lo económico (Crespo le vendió lotería de la premiada en Navidad) sino en los orgánico. Rus, al estilo Rus, sufrió una vez más de incontinencia verbal . En esta ocasión, según las fuentes consultadas, contra los dos números uno del partido, Mariano Rajoy y María Dolores de Cospedal, con una serie de términos que escandalizaron a comensales de otras mesas y que, casi al minuto, informaron, a la dama de hierro manchega, que desde este fin de semana manda más (si es que se puede) en la calle Génova, publicaba ayer 'Las Provincias'.
Ayer, un alto cargo de los populares valencianos apuntó: «Rus se ha dado la puntilla él solito». Y es que a pocas semanas del congreso regional y provincial, el alcalde de Xàtiva se queda en una posición de debilidad después de que la dirección nacional haya tomado nota de su actuación en Sevilla en la cena del viernes.
En la reunión participaron 21 personas, Rus incluido. Su núcleo más íntimo. Según las fuentes consultadas, ya en los postres el presidente de la Diputación de Valencia comenzó a disertar sobre si la política es muy desagradecida, que si un día estás arriba y otro abajo y que cuando uno cae nadie se acuerda de él. Algunas fuentes aseguraron que Rus empezó a hacer referencias a personas concretas como Rajoy y De Cospedal con comentarios de mal gusto. Otros confirmaron los comentarios pero negaron que nombrara a los dos líderes del PP.
Le llamaron la atención
En plena disertación, hubo algún comensal que le hizo ver al dirigente provincial que no todo era así, a lo que Rus, todavía más entrados los postres, se envalentonó y subió el tono de su intervención, que ya estaba siendo pública entre el resto de comensales del restaurante.
Rus endureció el tono, y según las fuentes consultadas, utilizó calificativos duros hacia ciertos cargos e insultos graves. Las mismas fuentes confirmaron que se refirió a Rajoy como 'Marianico, el corto', como el popular humorista, mientras que de la número dos del partido, Dolores de Cospedal, dijo obscenidades.
A pesar de que se le intentó hacer ver que sus palabras estaban llamando la atención de otras mesas y que le estaban mirando, Rus siguió con el mismo discurso y con el tono elevado.
En una de las mesas del restaurante cenaron delegados del PP de Castilla-La Mancha y algún miembro de la dirección regional de esa Comunidad que, tras lo visto, esa misma noche telefoneó a María Dolores de Cospedal casi al minuto para darle cuenta de cada una de las expresiones que el líder del PP en la provincia de Valencia utilizó en la cena con su núcleo de colaboradores más íntimo.
De Cospedal fue informada y de la misma manera, a la mañana siguiente, se informó a Juan Carlos Vera, otro de los pata negra del actual PP.
Las palabras de Rus sentaron muy mal en la dirección nacional que, según algunas fuentes, incluso han puesto sobre la mesa la posibilidad de abrir algún expediente al presidente de la Diputación de Valencia.
Génova, como ayer reconoció un cargo del PP valenciano, tiene «calado» a Rus. El día después de la cena en 'La Isla', el dirigente popular no asistió a la ponencia de su líder, Alberto Fabra, ante el plenario del congreso haciendo evidente su distanciamiento y, por la tarde, ni siquiera se acercó a la urna a votar a Mariano Rajoy como presidente del partido.
No es la primera vez que Rus saca los pies del tiesto en una afrenta directa contra la dirección nacional. En la última Junta Directiva Regional ya tomó la palabra para expresar su malestar con el trato que Madrid dispensaba a la Comunitat Valenciana. Incluso llegó a apuntar que Génova trataba al territorio valenciano «como si fuera Guinea Ecuatorial».
Fuentes del PP valenciano hicieron la reflexión que la pillada a Rus le señala de cara a los congresos regional y provincial. «Positivo para él desde luego que no va a ser. Le han pillado con el carrito del helado y él solito se ha dado la puntilla», señaló un cargo del partido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario