ALICANTE.- La secretaria general del PSPV en
Alicante, Ana Barceló, ha manifestado que asume la responsabilidad de
los "errores" que haya podido cometer durante su gestión al frente del
socialismo alicantino en los últimos tres años y medio, y ha recalcado
que su mandato ha estado marcado por la defensa de los intereses de la
provincia, entre los que se ha referido al agua, al aeropuerto de El
Altet, a las empresas o la llegada del AVE a Alicante.
Barceló ha realizado estas declaraciones durante su intervención
para presentar el Informe de Gestión de la Ejecutiva saliente, en el II
Congreso Provincial del PSPV de Alicante y del que saldrá el nuevo dirigente de los
socialistas alicantinos, un cargo al que, hasta el momento, únicamente
ha presentado su candidatura el edil de Aspe y diputado David Cerdán, en
colaboración con el diputado nacional Herick Campos.
De este modo, la dirigente ha agradecido el apoyo a su trabajo
recibido tanto por su equipo como por todas las agrupaciones
provinciales, y ha recalcado que el objetivo de su gestión ha sido ser
"útiles a la sociedad y ser la voz del PSPV de Alicante", así como haber
conformado un partido "fuerte en las instituciones".
Ha incidido en que ha tratado de defender los intereses de la
provincia, entre los que ha citado la exigencia del pago de la deuda a
los ayuntamientos de la provincia, la protección de Caja Mediterráneo
(CAM), de los intereses del puerto de la capital alicantina y del
aeropuerto de El Altet, además de la sanidad, la educación o los
intereses de los sectores comerciales de la provincia.
Por otro lado, ha manifestado su percepción de que en la
ciudadanía existe un "desapego" hacia la política, un aspecto que ha
reconocido comprender ante situaciones como lo ocurrido en CAM, "con los
ocho imputados del PP de la Comunitat Valenciana en Les Corts", ante
casos como los de 'cooperación', 'Brugal' o 'Gürtel', o "cuando España
es intervenida y el presidente nacional, Mariano Rajoy, se va a Polonia a
ver el fútbol".
Por último, ha enfatizado que desde la fortaleza del partido, "hay
que plantar cara al futuro y combatir la crisis recuperando los
derechos cercenados de los ciudadanos", y ha apostado por celebrar un
"buen y excelente congreso".
Finalmente, tras la intervención de Barceló y la votación de los
delegados, el Informe de Gestión ha sido aprobado con 113 votos a favor
-un 55 por ciento--, 32 en contra y un total de 60 abstenciones.
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