jueves, 23 de mayo de 2013

Los trabajos de exhumación de un presunto bebé robado concluyen sin resultados tras nueve días de búsqueda

ALICANTE.-   Los trabajos de exhumación llevados a cabo desde el pasado 13 de mayo en una fosa común del cementerio de Alicante, para tratar de localizar los restos de una recién nacida en el Hospital General de la ciudad hace 50 años, han finalizado este jueves sin que se hayan podido encontrar, según la información facilitada por la Fiscalía de Menores.

   Durante nueve días, el equipo dirigido por el fiscal de Menores, Carlos Ferreiro, ha inventariado los diferentes restos hallados y ha alcanzado en la prospección de la fosa hasta comprobar que se llegaba al nivel en el que están enterrados restos de personas adultas.
   Los trabajos, sin embargo, no han permitido localizar la caja referenciada por la familia en la que fue enterrada la supuesta bebé robada, "ni ninguna siquiera parecida en todo o en parte", según las mismas fuentes.
   Por ello, el fiscal ha dado por concluida la diligencia una vez explorada toda el área de la fosa coincidente con los datos facilitados por la familia y en la que, además, constan 19 neonatos enterrados fallecidos en 1962.
   Este caso responde a una denuncia presentada en torno al nacimiento de una niña en marzo de 1962 en el Hospital General de Alicante, que falleció 48 horas después del alumbramiento y fue enterrada en una fosa común del cementerio de Alicante sin que su familia pudiera ver el cuerpo sin vida de la pequeña.
   Cincuenta años después, la hermana melliza y el padre denunciaron lo ocurrido como un presunto caso de bebé robado, y en enero de 2012 el fiscal de Menores de Alicante ordenó, por primera vez en la provincia, abrir la fosa común para localizar y analizar los restos de la pequeña.
   Los trabajos permitieron encontrar la caja de madera que el padre recordaba haber usado para el enterramiento y huesos de un neonato cuyo ADN, una vez analizado, no se corresponden al de ningún familiar de los denunciantes.
   No obstante, documentación posterior aportada por los responsables del cementerio reveló que en 1962, año en que el se produjo el enterramiento, había una fila más, --la número 25--, por lo que el fiscal consideró necesario buscar en este punto y también profundizar en la fila 24. Los trabajos han quedado concluidos este jueves sin que se hayan podido localizar los restos que se buscaban.

No hay comentarios:

Publicar un comentario