ALICANTE.- Los 42.200 parados sin derecho a la percepción de la prestación por desempleo en la provincia de Alicante podrían cobrar unos 1.050 euros durante los tres meses que estén realizando cursos de formación y actividad de reinserción laboral en sede sindical y de las patronales.
Es una de las propuestas del plan de choque que presentó a los agentes sociales, en plena campaña electoral, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, para combatir la desaceleración del mercado laboral, en especial el de la construcción.
La mayor discrepancia reside en estos momentos en qué fórmula se arbitra para la dotación de 201 millones de euros previstos para el plan de recolocación laboral. Desde los sindicatos se pide que esos fondos no se toquen de la caja única de la Seguridad Social y sólo salgan de los presupuestos generales del Estado.
Inicialmente, la propuesta que ha llegado ya a los agentes sociales establece una ayuda de 350 euros al mes durante un período máximo de tres meses a los nuevos parados (o también antiguos) que no tengan cobertura por desempleo contributiva o asistencial.
El objetivo del plan, que prevé la contratación de 1.500 orientadores de empleo en toda España, en estrecha colaboración con patronales y sindicatos mayoritarios, es la reinserción laboral en sectores con más posibilidades de empleabilidad como administración de fincas urbanas, televenta, gestión de almacenes, comercio, relación con clientes, gestión comercial de seguros o mantenimiento y rehabilitación de edificios en los sectores con más excedentes de mano de obra, como el inmobiliario en general y el de construcción.
Es una de las propuestas del plan de choque que presentó a los agentes sociales, en plena campaña electoral, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, para combatir la desaceleración del mercado laboral, en especial el de la construcción.
La mayor discrepancia reside en estos momentos en qué fórmula se arbitra para la dotación de 201 millones de euros previstos para el plan de recolocación laboral. Desde los sindicatos se pide que esos fondos no se toquen de la caja única de la Seguridad Social y sólo salgan de los presupuestos generales del Estado.
Inicialmente, la propuesta que ha llegado ya a los agentes sociales establece una ayuda de 350 euros al mes durante un período máximo de tres meses a los nuevos parados (o también antiguos) que no tengan cobertura por desempleo contributiva o asistencial.
El objetivo del plan, que prevé la contratación de 1.500 orientadores de empleo en toda España, en estrecha colaboración con patronales y sindicatos mayoritarios, es la reinserción laboral en sectores con más posibilidades de empleabilidad como administración de fincas urbanas, televenta, gestión de almacenes, comercio, relación con clientes, gestión comercial de seguros o mantenimiento y rehabilitación de edificios en los sectores con más excedentes de mano de obra, como el inmobiliario en general y el de construcción.
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