ALICANTE.- La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, considera necesario que las ciudades de Alicante y Elche "vayan de la mano en muchas cosas, como por ejemplo en el tema del AVE, para pedir una parada del AVE en Elche, y otra en la ciudad de Alicante".
Al término del encuentro empresarial sobre Las medidas para el impuso económico de la Comunitat Valenciana. El Diálogo Social, un Pacto Valenciano por el Crecimiento y el Empleo, celebrado en Alicante, Sonia Castedo, del PP, destacó que, aunque le conoce "desde hace muy poquito tiempo" tiene "una buena relación" con el alcalde de la ciudad vecina, el socialista Alejandro Soler.
De este modo, la alcaldesa de Alicante aseguró estar dispuesta a reunirse con su homónimo ilicitano para tratar temas que afectan a las dos ciudades, tal y como ha planteado el propio alcalde de Elche.
"Yo creo que Alicante y Elche tienen que vivir de cara, son dos ciudades, las más importantes de la provincia de Alicante, una al lado de la otra", señaló la alcaldesa popular.
"Ni ejes, ni vértices ni nada, al final yo creo que Alicante y Elche tienen que ser dos ciudades que vayan de la mano en muchas cosas, por ejemplo en el tema del AVE, para pedir una parada del AVE en Elche, y otra en la ciudad de Alicante", especificó la máxima responsable municipal alicantina.
Por otra parte, Castedo se refirió también a las críticas vertidas el martes por la Federación Alicantina de Comercio (Facpyme) ante el planeamiento comercial previsto por el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). La alcaldesa instó a los pequeños y medianos comerciales a que "hagan alegaciones, porque están en su derecho" en caso de estar en desacuerdo con el planteamiento.
No obstante, Castedo remarcó que "se está vendiendo como monstruos muchas veces a las grandes superficies y no es así". El Plan General de Ordenación Urbana, añadió, "contempla una limitación importante a la hora de establecer grandes superficies".
La que es también responsable directa de la Gerencia de Urbanismo añadió que "no se va a permitir que la ciudad se inunde de grandes superficies, pero sí -dijo- que hay que tener muy claro que hay que permitir un crecimiento económico a todos los niveles, incluido el del comercio, siempre limitado y buscando el no perjudicar lo más mínimo a los pequeños y medianos comercios", indicó.
"Vivimos en una ciudad con más de 300.000 habitantes censados y más de 400.000 habitantes viviendo durante todo el año, y yo creo que hay que tener muy claro que una ciudad y el comercio tiene una parte importante a la hora de que en una ciudad se produzca un crecimiento".
Los pequeños comerciantes sin embargo se oponen a la instalación de nuevas grandes superficies en el término municipal por considerar que provocan importantes daños reales y perjuicios a los comerciantes tradicional que no pueden competir con ellos en cuestión de horarios ni apertura de festivos.
De este modo, la alcaldesa de Alicante aseguró estar dispuesta a reunirse con su homónimo ilicitano para tratar temas que afectan a las dos ciudades, tal y como ha planteado el propio alcalde de Elche.
"Yo creo que Alicante y Elche tienen que vivir de cara, son dos ciudades, las más importantes de la provincia de Alicante, una al lado de la otra", señaló la alcaldesa popular.
"Ni ejes, ni vértices ni nada, al final yo creo que Alicante y Elche tienen que ser dos ciudades que vayan de la mano en muchas cosas, por ejemplo en el tema del AVE, para pedir una parada del AVE en Elche, y otra en la ciudad de Alicante", especificó la máxima responsable municipal alicantina.
Por otra parte, Castedo se refirió también a las críticas vertidas el martes por la Federación Alicantina de Comercio (Facpyme) ante el planeamiento comercial previsto por el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). La alcaldesa instó a los pequeños y medianos comerciales a que "hagan alegaciones, porque están en su derecho" en caso de estar en desacuerdo con el planteamiento.
No obstante, Castedo remarcó que "se está vendiendo como monstruos muchas veces a las grandes superficies y no es así". El Plan General de Ordenación Urbana, añadió, "contempla una limitación importante a la hora de establecer grandes superficies".
La que es también responsable directa de la Gerencia de Urbanismo añadió que "no se va a permitir que la ciudad se inunde de grandes superficies, pero sí -dijo- que hay que tener muy claro que hay que permitir un crecimiento económico a todos los niveles, incluido el del comercio, siempre limitado y buscando el no perjudicar lo más mínimo a los pequeños y medianos comercios", indicó.
"Vivimos en una ciudad con más de 300.000 habitantes censados y más de 400.000 habitantes viviendo durante todo el año, y yo creo que hay que tener muy claro que una ciudad y el comercio tiene una parte importante a la hora de que en una ciudad se produzca un crecimiento".
Los pequeños comerciantes sin embargo se oponen a la instalación de nuevas grandes superficies en el término municipal por considerar que provocan importantes daños reales y perjuicios a los comerciantes tradicional que no pueden competir con ellos en cuestión de horarios ni apertura de festivos.
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