sábado, 28 de mayo de 2022

El mundo reduce su apoyo a Washington, según Rusia


MOSCÚ.- «EEUU ha perdido el apoyo de la mayoría del mundo. Las últimas votaciones en la ONU muestran que los países que no respaldan a Washington representan a la mayoría de la población del planeta», escribió en Telegram el presidente de la Duma de Estado (Cámara Baja del Parlamento ruso), Viacheslav Volodin.

Tras las decisiones que se toman en la ONU por mayoría de votos está en realidad una minoría, señaló Volodin y afirmó que está es la razón por la que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, intenta reformar a Naciones Unidas, procurando conservar el obsoleto modelo unipolar.

Klaus Schwab, dueño del Foro de Davos: el hermético negocio familiar más influyente del mundo


MADRID.- El Foro Económico Mundial celebrado esta semana en Davos ha reunido a líderes políticos, presidentes de gobierno y a algunos de los empresarios más poderosos del mundo en un bucólico resort de ski suizo. Un encuentro fruto de una organización familiar liderada por el octogenario germano, Klaus Schwab (81), según recuerda El Mundo

Un profesor de universidad formado en Suiza y con un postgrado en Harvard que enseñaba gestión industrial en la universidad de Lausana y que sin ser un cargo electo, ni figurar en las listas de los hombres más ricos del mundo, goza de una influencia global sin parangón.

Poco después de estudiar en EEUU, Schwab creó el Simposio Europeo de Management en 1971 al que acudieron directivos de 450 empresas europeas con el fin de conocer las estrategias de gestión empresarial implantadas en Norteamérica. 

Un encuentro cuyo campo de acción se limitaba al business pero que, con el paso del tiempo, fue adquiriendo tintes cada vez más políticos. Especialmente desde 1987, cuando cambió su nombre a World Economic Forum y dotó al encuentro de la forma jurídica de una fundación.

Con la misión de "comprometer a líderes políticos, de negocios, culturales y de otros ámbitos a dar forma a las agendas globales, regionales e industriales", el Foro de Davos, que se encuentra filiado en el registro mercantil del cantón suizo de Ginebra como una fundación, ha sido criticado por partidos políticos y organizaciones a izquierda y derecha del espectro político.

Algunas, como el Instituto Transnacional de los Países Bajos, aseguran que Davos es "un golpe de estado global silencioso". Acusaciones que basan en polémicos informes -elaborados en el propio Foro Económico Mundial- como el que sostiene que los gobiernos "ya no son los actores dominantes en la escena mundial" y que "ha llegado la hora de un nuevo paradigma internacional de gobernanza accionarial" que mezcle lo público con lo privado.

Davos cuenta el funcionamiento hermético de un negocio familiar. Una primitiva forma de gestión que el propio Shwab utiliza para la fundación que da forma jurídica a este influyente encuentro. 

Su mujer, Hilde, le acompaña desde los primeros pasos y actualmente ocupa el cargo de presidenta de la Fundación el Emprendimiento Social de la familia. Su hija, Nicole, ha trabajado en organizaciones juveniles y de género vinculadas a Davos, además de para el Ministerio de Sanidad de Bolivia durante el gobierno del general Hugo Banzer. Finalmente, su hijo, Olivier, es actualmente director ejecutivo del Foro.

Davos es siempre objeto de polémica. Este año no ha sido una excepción y la controversia ha llegado de la mano del veterano Henry Kissinger (amigo personal de Schwab que ha abogado por la idea de que Ucrania ceda parte de su territorio a Rusia para lograr la paz, en una edición en la que han participado tanto el presidente Zelensky como el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko

Aun así, el postulado más célebre de Davos fue su predicción en la "agenda global" que dice a los ciudadanos de a pie que en el año 2030 "no serás dueño de nada y serás feliz".

En términos mercantiles, el Foro de Davos es una organización sin ánimo de lucro pero Schwab obtiene inmensos réditos económicos del mismo y ha sido acusado reiteradamente de falta de transparencia contable. 

Buscando aplacar las críticas, dio a conocer su salario: 963.000 euros. Sin embargo, Davos es el medio que el germano ha utilizado para ocupar a lo largo de su carrera asientos en consejos de administración de grandes empresas como en Swatch (propietaria de Tissot, Omega o Hamilton), en el grupo mediático del periódico Daily Mail o en Vontobel, en la banca privada suiza.

Lavrov dice que si Occidente suministra armas a Ucrania capaces de alcanzar Rusia sería una “escalada inadmisible”


MOSCÚ.- El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, advirtió que si Occidente suministraba armas capaces de alcanzar el territorio ruso sería una “escalada inadmisible”.

“Occidente ha llamado a asestar a Rusia una derrota en el campo de batalla y para ello hay que continuar la guerra, suplir con armamento a los nacionalistas ucranianos, al régimen ucraniano, incluido armamento que pueda alcanzar la Federación Rusa”, dijo Lavrov en una entrevista con el canal RT Arabic

Lavrov subrayó que “eso es precisamente lo que exige públicamente (el presidente de Ucrania, Volodímir) Zelenski”.

“Advertimos a Occidente de la manera más seria que ellos ya libran, en esencia, una guerra subsidiaria contra Rusia con las manos, cuerpos y cerebros de los neonazis ucranianos, pero que eso sería un grave paso hacia una escalada inadmisible”, señaló, para destacar que esperan que “las personas con sentido común en Occidente, de los que aún quedan unos pocos, entiendan esto”. 

Por otra parte, el Gobierno de Rusia afirmó este viernes que Occidente ha declarado una guerra total contra su país llegando a la aplicación de políticas extremistas de cancelación cultural.

Lavrov señaló que "Occidente nos ha declarado la guerra total, ha declarado la guerra total a todo el mundo ruso, nadie lo oculta ahora".

En este sentido, apuntó que “ya está llegando al punto de lo absurdo, la propia cancelación de la cultura de Rusia y de todo lo relacionado con nuestro país”.

Al mismo tiempo, expresó que "los clásicos están prohibidos: Chaikovski, Dostoyevski, Tolstói, Pushkin. La persecución también afecta a figuras de la cultura nacional y de las artes, que hoy representan nuestra cultura".

De igual forma, el diplomático denunció la persecución a la que están sometidos los artistas rusos mientras afirmó que es posible que esta situación “nos acompañará durante mucho tiempo”.

Asimismo,  aseguró que la situación actual revela "la verdadera actitud de Occidente hacia aquellos hermosos eslóganes que se plantearon hace 30 años, tras el fin de la Guerra Fría, sobre los valores humanos universales".

A su vez, Lavrov manifestó que  Estados Unidos y sus naciones satélites basan su política exterior contra Rusia en un esfuerzo concentrado implementado mediante “sanciones económicas unilaterales hasta la propaganda falsa en el espacio mediático mundial".

El ministro de Relaciones Exteriores advirtió que la política occidental «antirusa» se prolongará durante mucho tiempo

«Ya no se anda con tapujos, se llega al absurdo, a la supresión de Rusia y de cuanto está relacionado con nuestro país. Se prohíbe a clásicos como Chaikovski, Dostoyevski, Tolstói o Pushkin. Las personalidades que representan hoy nuestra cultura y nuestras artes sufren acoso», dijo el ministro.

Lavrov expresó la certeza de que «esa situación va para rato” e insistió en que Rusia no estaría de acuerdo en soportar esto.

«Se ha puesto al descubierto la verdadera actitud de Occidente a las bellas consignas, de valores universales, que enarboló hace 30 años, después de terminada la Guerra Fría. Ahora vemos lo que vale esa palabrería», sentenció.

«En esta situación hay una gran demanda de una discusión concreta sobre cómo desarrollamos nuestra cooperación, cooperación entre nuestro ministerio y la sociedad civil, incluso a nivel de regiones», agregó.

Nuevo efecto secundario detectados por vacunas covid: vejiga hiperactiva


TAIPEHI/CHICAGO.- Nuevos efectos secundarios de las vacunas del Covid-19. Los expertos alertan sobre los síntomas relacionados con la inoculación de las dosis de Pfizer, Astrazeneca o Moderna, como pueden ser la urgencia urinaria, la miocarditis o la vejiga hiperactiva.

Un informe publicado por el Instituto de Posgrado de Medicina Clínica de la Universidad Médica de Kaohsiung, en Taiwán, alerta que estas vacunas se han asociado "significativamente" con problemas en el STUI, conocido como el tracto urinario inferior, con cambios en la urgencia y la frecuencia urinaria.

En esta investigación participaron un total de 889 voluntarios inoculados contra el SARS-CoV-2 y que no se habían sometido a procedimientos urológicos en los últimos tres meses. El 65,9 por ciento de participantes (586) recibieron la vacuna de Astrazeneca, el 29,2 por ciento (260) la de Pfizer-Biontech y el resto, 89, la de Moderna.

Los resultados demostraron que los eventos adversos "autoinformados" tras la aplicación de una de las vacunas Covid-19 estuvieron presentes en el 13,4 por ciento de personas, relacionados con la orina, mientras que el 5,5 por ciento buscaron ayuda médica. Los autores concluyeron que "nuestros hallazgos demostraron que después de la vacunación contra el Covid-19, hasta el 13,4 por ciento de los 889 participantes revelaron un deterioro en los STUI de almacenamiento".
 

Un estudio de la revista JAMA Cardiología revela que la aparición de miocarditis o la vejiga hiperactiva es más frecuente tras la vacunación de la segunda dosis.

 

Además, el síndrome de la vejiga hiperactiva previo a la vacunación se ha asociado significativamente con posterioridad a un mayor riesgo de empeoramiento de los STUI de almacenamiento, especialmente en la urgencia y la frecuencia urinaria.

¿Qué otros efectos secundarios se han detectado?

Por otro lado, un estudio de la revista JAMA Cardiología revela que la aparición de miocarditis o la vejiga hiperactiva es más frecuente tras la vacunación de la segunda dosis. La miocarditis consiste en la inflamación del corazón, lo que puede producir la disminución del bombeo del miocardio o la aparición de arritmias.

El origen de la miocarditis suele estar en un virus o en una reacción ante un medicamento y presenta una serie de síntomas como el dolor de pecho, problemas de respiración, fatiga o latidos irregulares.

En el caso de la vejiga hiperactiva, provocada en algunos casos por las vacunas contra el covid, conlleva una necesidad constante y repentina de miccionar en más ocasiones que lo habitual. Aunque es posible controlar este síntoma mediante distintas técnicas, la vejiga hiperactiva suele alterar el modo de vida del que la padece. Algunas enfermedades como la diabetes o los trastornos neurológicos pueden provocarla, así como también las infecciones o tumores. 

¡Aumentan las muertes súbitas un 65% en Mallorca!


PALMA.-  Según publica el periódico Última hora, si bien el incremento de Urgencias es generalizado, donde más han crecido es en los procesos críticos que dependen del tiempo de reacción, explica el director médico del 061, Txema Álvarez.

Y para ello da cifras escalofriantes. Los códigos de infarto han subido un 20 %, los ictus lo han hecho un 11 % y los casos de muerte súbita son los que más han crecido con un 65 % respecto a ejercicios anteriores.

De hecho, 2018 fue el último año con registros más altos, que ahora se verían sobrepasados. Respecto a los traumatismos graves, también hay más. Proceden de accidentes de tráfico, además de la novedad de los patinetes o caídas desde altura.

El gobernador de Oklahoma firma una nueva ley que prohíbe el aborto desde el momento de la fertilización


OKLAHOMA CITY.- El gobernador de Oklahoma, Kevin Stitt, firmó esta semana una nueva ley que prohíbe el aborto en el estado desde el momento de la fertilización, considerada la legislación más restrictiva de Estados Unidos.

La ley, que permite emprender procesos penales contra cualquier persona que ayude a una mujer a abortar, entró en vigor tras la firma del mandatario estatal. «La vida comienza desde la concepción y tenemos la responsabilidad como seres humanos de hacer todo lo posible para proteger la vida de ese bebé y la de la madre», dijo en un comunicado el gobernador.

La ONG Unión de Libertades Civiles (ACLU) respondió en un comunicado que «nadie debería ser forzada a continuar con un embarazo en contra de su voluntad» y advirtió de que prohibir el aborto pone en peligro a las mujeres, que tienen que interrumpir su embarazo fuera del sistema de salud.

La ley, aprobada por ambas cámaras del estado, prohíbe cualquier aborto a partir de la fertilización, excepto cuando la vida de la madre se encuentra en peligro, o cuando el embarazo es resultado de una violación o de incesto.

Además, siguiendo la línea de la polémica ley contra el aborto aprobada el año pasado en Texas, la nueva norma permite a los ciudadanos denunciar a cualquier compañía o persona que asista a una mujer en la interrupción de su embarazo.

El gobernador Stitt, quien busca su reelección en los comicios de medio mandato del próximo noviembre, ha prometido firmar cualquier ley aprobada por el parlamento de Oklahoma en contra del aborto. Oklahoma ya tiene en vigor una ley que, como la de Texas, prohíbe los abortos a partir de las primeras seis semanas de embarazo.

Además, otra norma firmada por el gobernador en abril y que debería entrar en vigor este verano, prohíbe cualquier interrupción del embarazo salvo para salvar la vida de la madre.

La prohibición del aborto en Oklahoma se aprobó ante la expectativa de que el Tribunal Supremo, de mayoría conservadora, tumbe en junio la sentencia «Roe versus Wade», que desde 1973 protege el derecho constitucional al aborto en todo el país.

Organizaciones de la sociedad civil calculan que al menos 26 de los 50 estados del país, gobernados por conservadores, prohibirán el aborto una vez el Supremo emita su fallo.

Heroísmo tragacionista / Juan Manuel de Prada *


Sucumbisteis heroicamente al miedo y a la propaganda que os exhortaba a inocularos el mejunje, sin atender a sus posibles efectos secundarios, sin reparar en la obscena colusión de vuestros ‘representantes políticos’ y la industria farmacéutica, lanzados al saqueo. Contribuisteis heroicamente a la difamación de los disidentes, obedeciendo las consignas de los loritos sistémicos que exigían que se les hiciera la vida imposible. 

Os tragasteis heroicamente las paparruchas más irracionales sobre el origen del coronavirus, sobre la ‘inmunidad’ de la ‘vacuna’, sobre la eficacia del pasaporte covid. Pero gracias a vuestra heroica sumisión y heroica vileza los planes sistémicos pudieron ejecutarse, según la denominada ‘doctrina del shock’, que se aprovecha del impacto causado por una calamidad en la psicología de las masas para ejecutar los designios de la plutocracia.

Así, gracias a vuestro heroico apoyo, han empezado a modelar una Humanidad de hombres programados que se enorgullezcan de vivir en un cuchitril inmundo, de tener mascotas en lugar de hijos, de poner la lavadora en el conticinio y pasar los inviernos sin calefacción.

Habéis sido una vanguardia heroica en estos planes de sometimiento colectivo; y merecéis que os regalen un patinete eléctrico, para que podáis ir al trabajo sin contaminar. Pero la ‘doctrina del shock’ exige ir cambiando a cada poco de calamidad, para mantener en vilo a las masas cretinizadas. 

Ahora los planes sistémicos se logran a través de la guerra de Ucrania, que servirá para justificar inflaciones, exacciones, carestías y hambrunas. Y, para más inri, ahora ya se sabe que el mejunje que os inocularon es, en el mejor de los casos, un placebo; aunque hay indicios (como que el presidente de una empresa farmacéutica que cotiza en el Ibex-35 se agenciara un pasaporte covid falso) que permiten deducciones mucho más amedrentadoras. 

Ahora ya se sabe que habéis participado en una tómbola siniestra que a miles de personas ha dejado hechas una piltrafa. Aunque, por supuesto, vuestro heroísmo puede atribuir su desgracia al cambio climático.

Pero no debéis desanimaros. Cuando la guerra de Ucrania esté más vista que el tebeo, azuzarán una nueva histeria colectiva que os resarza, al estilo de esa viruela del mono con la que ahora amagan (pero que no os estigmatice si queréis fluir de género o daros por retambufa). 

Aunque ya nada encaje, no debéis recular, porque hacerlo sería como dar la razón a esos negacionistas cabrones que no pillan el bicho ni a tiros. Tenéis que mostrar vuestro heroísmo una vez más, inoculándoos la cuarta dosis, y la quinta si hace falta; y, debéis haceros una foto mientras os pinchan, poniendo una sonrisita forzada y haciendo como panolis el signo de la victoria, y colgarla en Instagram, con guarnición de emoticonos memos. 

Y debéis exigir un Día del Orgullo Tragacionista, para desfilar en carroza, luciendo la tirita del pinchazo, pero sin menearos mucho, no sea que el cambio climático os provoque una repentinitis. 

 

(*) Escritor 

 

https://www.abc.es/opinion/abci-juan-manuel-prada-heroismo-tragacionista-202205272349_noticia.html

JP Morgan, los Rockefeller y los Rothschild


NUEVA YORK.-  Los Cuatro Jinetes de la Banca (Bank of America, JP Morgan Chase, Citigroup y Wells Fargo) son dueños de los Cuatro Jinetes del Petróleo (Exxon Mobil, Royal Dutch/Shell, BP y Chevron Texaco); junto con Deutsche Bank, BNP, Barclays y otros gigantes europeos del dinero antiguo.

Pero su monopolio sobre la economía global no termina al borde del parche petrolero.

De acuerdo con las presentaciones de la compañía 10K ante la SEC, los Cuatro Jinetes de la Banca se encuentran entre los diez principales accionistas de prácticamente todas las corporaciones Fortune 500.

Entonces, ¿quiénes son los accionistas de estos bancos del centro de dinero?

Esta información se guarda mucho más de cerca. Mis consultas a las agencias reguladoras bancarias con respecto a la propiedad de acciones en las principales 25 sociedades de cartera bancarias de EE. UU. recibieron el estatus de la Ley de Libertad de Información, antes de ser denegadas por motivos de “seguridad nacional”. Esto es bastante irónico, ya que muchos de los accionistas del banco residen en Europa.

Un depósito importante de la riqueza de la oligarquía mundial propietaria de estos holdings bancarios es US Trust Corporation, fundada en 1853 y ahora propiedad de Bank of America.

Un Director Corporativo de US Trust y Fideicomisario Honorario reciente fue Walter Rothschild. Otros directores incluyeron a Daniel Davison de JP Morgan Chase, Richard Tucker de Exxon Mobil, Daniel Roberts de Citigroup y Marshall Schwartz de Morgan Stanley.

JW McCallister, un miembro de la industria petrolera con conexiones de House of Saud, escribió en The Grim Reaper que la información que obtuvo de los banqueros saudíes citaba el 80% de la propiedad del Banco de la Reserva Federal de Nueva York, con mucho, la sucursal más poderosa de la Reserva Federal, por parte de solo ocho familias, cuatro de los cuales residen en los EE.UU.

Son los Goldman Sachs, Rockefellers, Lehmans y Kuhn Loebs de Nueva York; los Rothschild de París y Londres; los Warburg de Hamburgo; los Lazards de París; y el Israel Moses Seifs de Roma.

El CPA Thomas D. Schauf corrobora las afirmaciones de McCallister y agrega que diez bancos controlan las doce sucursales del Banco de la Reserva Federal.

Nombra a NM Rothschild de Londres, Rothschild Bank de Berlín, Warburg Bank de Hamburgo, Warburg Bank de Amsterdam, Lehman Brothers de Nueva York, Lazard Brothers de París, Kuhn Loeb Bank de Nueva York, Israel Moses Seif Bank de Italia, Goldman Sachs de Nueva York y JP Morgan Chase Bank de Nueva York. Schauf enumera a William Rockefeller, Paul Warburg, Jacob Schiff y James Stillman como individuos que poseen grandes acciones de la Reserva Federal.

Los Schiff son expertos en Kuhn Loeb. Los Stillman son miembros de Citigroup que se casaron con miembros del clan Rockefeller a principios de siglo.

Eustace Mullins llegó a las mismas conclusiones en su libro Los secretos de la Reserva Federal, en el que muestra gráficos que conectan a la Fed y sus bancos miembros con las familias de Rothschild, Warburg, Rockefeller y otros.

El control que estas familias de banqueros ejercen sobre la economía global no se puede exagerar y está envuelto en secreto intencionalmente. Su brazo de medios corporativos se apresura a desacreditar cualquier información que exponga a este cartel de la banca central privada como una “teoría de la conspiración”. Sin embargo, los hechos permanecen.

La Casa de Morgan

El Banco de la Reserva Federal nació en 1913, el mismo año en que murió el vástago de la banca estadounidense J. Pierpont Morgan y se formó la Fundación Rockefeller.

La Casa Morgan presidió las finanzas estadounidenses desde la esquina de Wall Street y Broad, actuando como un banco central casi estadounidense desde 1838, cuando George Peabody lo fundó en Londres.

Peabody era socio comercial de los Rothschild. En 1952, el investigador de la Fed, Eustace Mullins, planteó la suposición de que los Morgan no eran más que agentes de Rothschild. Mullins escribió que los Rothschild, “…prefirieron operar de forma anónima en los Estados Unidos detrás de la fachada de JP Morgan & Company”.

El autor Gabriel Kolko declaró:

“Las actividades de Morgan en 1895-1896 en la venta de bonos de oro estadounidenses en Europa se basaron en una alianza con la Casa de Rothschild”.

El pulpo financiero de Morgan envolvió rápidamente sus tentáculos alrededor del mundo. Morgan Grenfell operaba en Londres. Morgan et Ce gobernó París. Los primos Lambert de los Rothschild fundaron Drexel & Company en Filadelfia.

La Casa Morgan abasteció a los Astor, DuPont, Guggenheim, Vanderbilt y Rockefeller. Financió el lanzamiento de AT&T, General Motors, General Electric y DuPont. Al igual que los bancos Rothschild y Barings con sede en Londres, Morgan se convirtió en parte de la estructura de poder en muchos países.

Para 1890, la Casa de Morgan estaba prestando al banco central de Egipto, financiando ferrocarriles rusos, flotando bonos del gobierno provincial brasileño y financiando proyectos de obras públicas argentinas.

Una recesión en 1893 aumentó el poder de Morgan. Ese año, Morgan salvó al gobierno de los EE. UU. de un pánico bancario, formando un sindicato para apuntalar las reservas del gobierno con un envío de $ 62 millones en oro Rothschild.

Morgan fue la fuerza impulsora detrás de la expansión occidental en los EE. UU., financiando y controlando los ferrocarriles con destino al oeste a través de fideicomisos con derecho a voto. En 1879, el Ferrocarril Central de Nueva York de Cornelius Vanderbilt, financiado por Morgan, otorgó tarifas de envío preferenciales al incipiente monopolio Standard Oil de John D. Rockefeller, consolidando la relación Rockefeller/Morgan.

La Casa Morgan ahora cayó bajo el control de la familia Rothschild y Rockefeller. Un titular del New York Herald decía: “Los reyes del ferrocarril forman una confianza gigantesca”. J. Pierpont Morgan, quien una vez dijo: “La competencia es un pecado”, ahora opinó alegremente,

“Piénsalo. Todo el tráfico ferroviario que compite al oeste de St. Louis está bajo el control de unos treinta hombres”.

El banquero de Morgan y Edward Harriman, Kuhn Loeb, tenía el monopolio de los ferrocarriles, mientras que las dinastías bancarias Lehman, Goldman Sachs y Lazard se unieron a los Rockefeller para controlar la base industrial estadounidense.

En 1903, Banker’s Trust fue establecido por las Ocho Familias. Benjamin Strong de Banker’s Trust fue el primer gobernador del Banco de la Reserva Federal de Nueva York. La creación de la Reserva Federal en 1913 fusionó el poder de las Ocho Familias con el poderío militar y diplomático del gobierno de los Estados Unidos.

Si sus préstamos en el extranjero no se pagaban, los oligarcas ahora podían desplegar marines estadounidenses para cobrar las deudas. Morgan, Chase y Citibank formaron un sindicato internacional de préstamos.

La Casa de Morgan fue acogedora con la Casa británica de Windsor y la Casa italiana de Saboya. Kuhn Loebs, Warburgs, Lehmans, Lazards, Israel Moses Seifs y Goldman Sachs también tenían estrechos vínculos con la realeza europea. Para 1895, Morgan controlaba el flujo de oro dentro y fuera de los Estados Unidos. La primera ola estadounidense de fusiones estaba en pañales y estaba siendo promovida por los banqueros.

En 1897 hubo sesenta y nueve fusiones industriales. En 1899 había mil doscientas. En 1904, John Moody, fundador de Moody’s Investor Services, dijo que era imposible hablar de los intereses de Rockefeller y Morgan por separado.

Desconfianza pública de la cosecha combinada. Muchos los consideraban traidores que trabajaban para el viejo dinero europeo. Standard Oil de Rockefeller, US Steel de Andrew Carnegie y los ferrocarriles de Edward Harriman fueron financiados por el banquero Jacob Schiff en Kuhn Loeb, quien trabajó en estrecha colaboración con los Rothschild europeos.

Varios Estados occidentales prohibieron a los banqueros. El predicador populista William Jennings Bryan fue tres veces candidato demócrata a la presidencia entre 1896 y 1908. El tema central de su campaña antiimperialista fue que Estados Unidos estaba cayendo en una trampa de “servidumbre financiera al capital británico”.

Teddy Roosevelt derrotó a Bryan en 1908, pero este incendio populista en expansión lo obligó a promulgar la Ley Sherman Anti-Trust. Luego fue tras Standard Oil Trust.

En 1912 se celebraron las audiencias de Pujo, que abordaban la concentración de poder en Wall Street. Ese mismo año, Edward Harriman vendió sus acciones sustanciales en Guaranty Trust Bank de Nueva York a JP Morgan, creando Morgan Guaranty Trust. El juez Louis Brandeis convenció al presidente Woodrow Wilson de pedir el fin de las juntas directivas entrelazadas. En 1914 se aprobó la Ley Clayton Antimonopolio.

Jack Morgan, hijo y sucesor de J. Pierpont, respondió pidiendo a los clientes de Morgan, Remington y Winchester, que aumentaran la producción de armas. Argumentó que Estados Unidos necesitaba ingresar en la Primera Guerra Mundial. Incitado por la Fundación Carnegie y otros frentes de la oligarquía, Wilson se acomodó.

Como escribió Charles Tansill en America Goes to War: “Incluso antes del choque de armas, la firma francesa de Rothschild Freres cablegrafió a Morgan & Company en Nueva York sugiriendo la emisión de un préstamo de $100 millones, una parte sustancial de los cuales iba a ser dejado en los EE. UU. para pagar las compras francesas de productos estadounidenses”.

La Casa Morgan financió la mitad del esfuerzo de guerra de EE. UU., mientras recibía comisiones por contratar a contratistas como GE, Du Pont, US Steel, Kennecott y ASARCO. Todos eran clientes de Morgan.

Morgan también financió la guerra de los bóers británicos en Sudáfrica y la guerra franco-prusiana. La Conferencia de Paz de París de 1919 fue presidida por Morgan, que dirigió los esfuerzos de reconstrucción tanto alemanes como aliados.

En la década de 1930 resurgió el populismo en Estados Unidos después de que Goldman Sachs, Lehman Bank y otros se beneficiaran del crash de 1929.

El presidente del Comité Bancario de la Cámara, Louis McFadden (D-NY), dijo sobre la Gran Depresión:

“No fue un accidente. Fue un hecho cuidadosamente ideado… Los banqueros internacionales buscaron generar una condición de desesperación aquí para que pudieran emerger como gobernantes de todos nosotros”.

El senador Gerald Nye (D-ND) presidió una investigación sobre municiones en 1936. Nye concluyó que la Casa Morgan había llevado a los EE. UU. a la Primera Guerra Mundial para proteger los préstamos y crear una industria armamentista en auge.

Más tarde, Nye produjo un documento titulado La próxima guerra, que se refería cínicamente al “viejo truco de la diosa de la democracia”, a través del cual Japón podría usarse para atraer a los EE. UU. a la Segunda Guerra Mundial.

En 1937, el secretario del Interior, Harold Ickes, advirtió sobre la influencia de las “60 familias de Estados Unidos”. El historiador Ferdinand Lundberg más tarde escribió un libro con exactamente el mismo título. El juez de la Corte Suprema William O. Douglas denunció:

“La influencia de Morgan… la más perniciosa en la industria y las finanzas de hoy”.

Jack Morgan respondió empujando a los Estados Unidos hacia la Segunda Guerra Mundial. Morgan tenía estrechas relaciones con las familias Iwasaki y Dan, los dos clanes más ricos de Japón, que han sido propietarios de Mitsubishi y Mitsui, respectivamente, desde que las empresas surgieron de los shogunatos del siglo XVII.

Cuando Japón invadió Manchuria y masacró a los campesinos chinos en Nanking, Morgan minimizó el incidente.

Morgan también tuvo estrechas relaciones con el fascista italiano Benito Mussolini, mientras que el nazi alemán Dr. Hjalmer Schacht fue un enlace de Morgan Bank durante la Segunda Guerra Mundial. Después de la guerra, los representantes de Morgan se reunieron con Schacht en el Banco de Pagos Internacionales (BIS) en Basilea, Suiza.

La casa de Rockefeller

BIS es el banco más poderoso del mundo, un banco central global para las Ocho Familias que controlan los bancos centrales privados de casi todas las naciones occidentales y en desarrollo. El primer presidente del BIS fue el banquero de Rockefeller, Gates McGarrah, funcionario del Chase Manhattan y de la Reserva Federal.

McGarrah era el abuelo del exdirector de la CIA Richard Helms. Los Rockefeller, como los Morgan, tenían estrechos vínculos con Londres. David Icke escribe en Children of the Matrix, que los Rockefeller y los Morgan eran solo “gofers” para los Rothschild europeos.

BIS es propiedad de la Reserva Federal, el Banco de Inglaterra, el Banco de Italia, el Banco de Canadá, el Banco Nacional Suizo, el Nederlandsche Bank, el Bundesbank y el Banco de Francia.

El historiador Carroll Quigley escribió en su libro épico Tragedy and Hope que BIS era parte de un plan:

“Crear un sistema mundial de control financiero en manos privadas capaz de dominar el sistema político de cada país y la economía del mundo como un todo… ser controlado de manera feudal por los bancos centrales del mundo actuando en concierto por medios secretos acuerdos.”

El gobierno de EE. UU. desconfiaba históricamente del BIS, y presionó sin éxito para su desaparición en la Conferencia de Bretton Woods posterior a la Segunda Guerra Mundial de 1944. En cambio, se exacerbó el poder de las Ocho Familias, con la creación en Bretton Woods del FMI y el Banco Mundial. La Reserva Federal de los EE. UU. solo tomó acciones en BIS en septiembre de 1994.

BIS posee al menos el 10% de las reservas monetarias de al menos 80 de los bancos centrales del mundo, el FMI y otras instituciones multilaterales. Sirve como agente financiero para acuerdos internacionales, recopila información sobre la economía global y sirve como prestamista de último recurso para evitar el colapso financiero global.

BIS promueve una agenda de fascismo capitalista monopolista. Otorgó un préstamo puente a Hungría en la década de 1990 para garantizar la privatización de la economía de ese país.

Sirvió como conducto para la financiación de Ocho Familias de Adolf Hitler, dirigida por J. Henry Schroeder de Warburg y Mendelsohn Bank of Amsterdam. Muchos investigadores afirman que BIS se encuentra en el punto más bajo del lavado de dinero de las drogas a nivel mundial.

No es coincidencia que BIS tenga su sede en Suiza, el escondite favorito de la riqueza de la aristocracia mundial y la sede de la Logia Alpina de la masonería italiana P-2 y la Internacional Nazi.

Otras instituciones que controlan las Ocho Familias incluyen el Foro Económico Mundial, la Conferencia Monetaria Internacional y la Organización Mundial del Comercio.

Bretton Woods fue una bendición para las Ocho Familias. El FMI y el Banco Mundial fueron fundamentales para este “nuevo orden mundial”. En 1944, Morgan Stanley y First Boston emitieron los primeros bonos del Banco Mundial. La familia francesa Lazard se involucró más en los intereses de House of Morgan.

Lazard Freres, el mayor banco de inversión de Francia, es propiedad de las familias Lazard y David-Weill, antiguos vástagos de la banca genovesa representados por Michelle Davive. Un presidente y director ejecutivo reciente de Citigroup fue Sanford Weill.

En 1968, Morgan Guaranty lanzó Euro-Clear, un sistema de compensación bancaria con sede en Bruselas para valores en eurodólares. Fue el primer esfuerzo automatizado de este tipo. Algunos empezaron a llamar a Euro-Clear “La Bestia”.

Bruselas sirve como sede para el nuevo Banco Central Europeo y para la OTAN. En 1973, los funcionarios de Morgan se reunieron en secreto en las Bermudas para resucitar ilegalmente la antigua Casa de Morgan, veinte años antes de que se derogara la Ley Glass Steagal.

Morgan y los Rockefeller proporcionaron el respaldo financiero para Merrill Lynch, impulsándolo a los cinco grandes de la banca de inversión de EE. UU. Merrill ahora es parte de Bank of America.

John D. Rockefeller usó su riqueza petrolera para adquirir Equitable Trust, que se había tragado varios grandes bancos y corporaciones en la década de 1920. La Gran Depresión ayudó a consolidar el poder de Rockefeller.

Su Chase Bank se fusionó con el Manhattan Bank de Kuhn Loeb para formar Chase Manhattan, consolidando una relación familiar de larga data. Los Kuhn-Loeb habían financiado, junto con los Rothschild, la búsqueda de Rockefeller para convertirse en el rey del parche petrolero.

El National City Bank de Cleveland proporcionó a John D. el dinero necesario para emprender su monopolización de la industria petrolera estadounidense.

El banco fue identificado en las audiencias del Congreso como uno de los tres bancos propiedad de Rothschild en los EE. UU. durante la década de 1870, cuando Rockefeller se incorporó por primera vez como Standard Oil of Ohio.

Un socio de Rockefeller Standard Oil era Edward Harkness, cuya familia llegó a controlar Chemical Bank. Otro fue James Stillman, cuya familia controlaba Manufacturers Hanover Trust.

Ambos bancos se han fusionado bajo el paraguas de JP Morgan Chase. Dos de las hijas de James Stillman se casaron con dos de los hijos de William Rockefeller. Las dos familias también controlan una gran parte de Citigroup.

En el negocio de seguros, los Rockefeller controlan Metropolitan Life, Equitable Life, Prudential y New York Life. Los bancos Rockefeller controlan el 25% de todos los activos de los 50 bancos comerciales más grandes de EE. UU. y el 30% de todos los activos de las 50 compañías de seguros más grandes.

Las compañías de seguros -la primera en los EE. UU. fue lanzada por masones a través de Woodman’s of America- juegan un papel clave en la baraja de dinero de las drogas de las Bermudas.

Las empresas bajo el control de Rockefeller incluyen Exxon Mobil, Chevron Texaco, BP Amoco, Marathon Oil, Freeport McMoran, Quaker Oats, ASARCO, United, Delta, Northwest, ITT, International Harvester, Xerox, Boeing, Westinghouse, Hewlett-Packard, Honeywell, International Paper , Pfizer, Motorola, Monsanto, Union Carbide y General Foods.

La Fundación Rockefeller tiene estrechos vínculos financieros con las fundaciones Ford y Carnegie. Otros esfuerzos filantrópicos familiares incluyen Rockefeller Brothers Fund, Rockefeller Institute for Medical Research, General Education Board, Rockefeller University y University of Chicago, que produce un flujo constante de economistas de extrema derecha como apologistas del capital internacional, incluido Milton Friedman.

La familia es propietaria del 30 Rockefeller Plaza, donde se enciende el árbol de Navidad nacional todos los años, y del Rockefeller Center. David Rockefeller jugó un papel decisivo en la construcción de las torres del World Trade Center.

La casa principal de la familia Rockefeller es un enorme complejo en el norte del estado de Nueva York conocido como Pocantico Hills. También son dueños de un dúplex de 32 habitaciones en la Quinta Avenida en Manhattan, una mansión en Washington, DC, Monte Sacro Ranch en Venezuela, plantaciones de café en Ecuador, varias fincas en Brasil, una propiedad en Seal Harbor, Maine y resorts en el Caribe, Hawái. y Puerto Rico.

Las familias Dulles y Rockefeller son primas. Allen Dulles creó la CIA, ayudó a los nazis, encubrió el golpe de Kennedy desde su puesto en la Comisión Warren y llegó a un acuerdo con la Hermandad Musulmana para crear asesinos controlados mentalmente.

El hermano John Foster Dulles presidió los fideicomisos falsos de Goldman Sachs antes de la caída de la bolsa de valores de 1929 y ayudó a su hermano a derrocar gobiernos en Irán y Guatemala. Ambos eran miembros de Skull & Bones, Council on Foreign Relations (CFR) y masones de grado 33.

Los Rockefeller jugaron un papel decisivo en la formación del Club de Roma orientado a la despoblación en su propiedad familiar en Bellagio, Italia.

Su propiedad de Pocantico Hills dio origen a la Comisión Trilateral. La familia es uno de los principales financiadores del movimiento eugenésico que engendró a Hitler, la clonación humana y la actual obsesión por el ADN en los círculos científicos estadounidenses.

John Rockefeller Jr. dirigió el Consejo de Población hasta su muerte. Su hijo homónimo es un senador de West Virginia. El hermano Winthrop Rockefeller fue vicegobernador de Arkansas y sigue siendo el hombre más poderoso de ese estado.

En una entrevista de octubre de 1975 con la revista Playboy, el vicepresidente Nelson Rockefeller, quien también fue gobernador de Nueva York, articuló la cosmovisión condescendiente de su familia:

“Soy un gran creyente en la planificación económica, social, política, militar, planificación mundial total”.

Pero de todos los hermanos Rockefeller, es el fundador de la Comisión Trilateral (TC) y presidente de Chase Manhattan, David, quien ha encabezado la agenda fascista de la familia a escala mundial. Defendió al Sha de Irán, al régimen del apartheid sudafricano y a la junta chilena de Pinochet.

Fue el mayor financiador del CFR, el TC y (durante la Guerra de Vietnam) el Comité para una Paz Efectiva y Duradera en Asia, una bonanza de contratos para aquellos que se ganaban la vida con el conflicto.

Nixon le pidió que fuera secretario del Tesoro, pero Rockefeller rechazó el puesto, sabiendo que su poder era mucho mayor al frente de la Caza. El autor Gary Allen escribe en The Rockefeller File que en 1973:

“David Rockefeller se reunió con veintisiete jefes de estado, incluidos los gobernantes de Rusia y la China Roja”.

Después del golpe de Nugan Hand Bank/CIA de 1975 contra el primer ministro australiano Gough Whitlam, su sucesor designado por la corona británica, Malcolm Fraser, viajó rápidamente a los EE. UU., donde se reunió con el presidente Gerald Ford después de consultar con David Rockefeller.

Los masones y la Casa de Rothschild

En 1789, Alexander Hamilton se convirtió en el primer Secretario del Tesoro de los Estados Unidos. Hamilton fue uno de los muchos padres fundadores que eran masones. Tenía estrechas relaciones con la familia Rothschild, propietaria del Banco de Inglaterra y líder del movimiento masón europeo.

George Washington, Benjamin Franklin, John Jay, Ethan Allen, Samuel Adams, Patrick Henry, John Brown y Roger Sherman eran todos masones.

Andres Hamilton

Roger Livingston ayudó a Sherman y Franklin a redactar la Declaración de Independencia. Prestó juramento a George Washington mientras era Gran Maestre de la Gran Logia de Francmasones de Nueva York.

Washington mismo fue Gran Maestre de la Logia de Virginia. De los Oficiales Generales del Ejército Revolucionario, treinta y tres eran masones. Esto fue muy simbólico ya que los masones de grado 33 se iluminaron.

Los padres fundadores populistas encabezados por John Adams, Thomas Jefferson, James Madison y Thomas Paine, ninguno de los cuales era masón, querían romper completamente los lazos con la Corona británica, pero fueron anulados por la facción masónica liderada por Washington, Hamilton y el Gran Maestre de los Estados Unidos. St. Andrews Lodge en Boston General Joseph Warren, que quería “desafiar al Parlamento pero permanecer leal a la Corona”.

St. Andrews Lodge fue el centro de la masonería del Nuevo Mundo y comenzó a emitir los grados de los Caballeros Templarios en 1769.

General José Warren

Todas las logias masónicas de EE. UU. están garantizadas hasta el día de hoy por la Corona británica, a la que sirven como una red global de inteligencia y subversión contrarrevolucionaria. Su iniciativa más reciente es el Programa Masónico de Identificación de Niños (CHIP).

Según Wikipedia, los programas CHIP brindan a los padres la oportunidad de crear un kit de materiales de identificación para sus hijos, sin cargo. El kit contiene una tarjeta de huellas dactilares, una descripción física, un video, disco de computadora o DVD del niño, una huella dental y una muestra de ADN.

El Primer Congreso Continental se reunió en Filadelfia en 1774 bajo la presidencia de Peyton Randolph, quien sucedió a Washington como Gran Maestre de la Logia de Virginia. El Segundo Congreso Continental se reunió en 1775 bajo la presidencia del masón John Hancock.

El hermano de Peyton, William, lo sucedió como Gran Maestro de Virginia Lodge y se convirtió en el principal defensor de la centralización y el federalismo en la Primera Convención Constitucional en 1787. El federalismo en el corazón de la Constitución de los EE. UU. es idéntico al federalismo establecido en las Constituciones de Mason de Anderson de 1723.

William Randolph se convirtió en el primer Fiscal General y Secretario de Estado de la nación bajo George Washington. Su familia regresó a Inglaterra fiel a la Corona. John Marshall, el primer juez de la Corte Suprema de la nación, también era masón.

Cuando Benjamin Franklin viajó a Francia para buscar ayuda financiera para los revolucionarios estadounidenses, sus reuniones se llevaron a cabo en los bancos Rothschild.

Negoció la venta de armas a través del alemán Mason Baron von Steuben. Sus Comités de Correspondencia operaban a través de los canales masónicos y eran paralelos a una red de espionaje británica. En 1776, Franklin se convirtió de facto en embajador en Francia.

En 1779 se convirtió en Gran Maestre de la Logia francesa Neuf Soeurs (Nueve Hermanas), a la que pertenecían John Paul Jones y Voltaire. Franklin también fue miembro de la Royal Lodge of Commanders of the Temple West of Carcasonne, más reservada, cuyos miembros incluían a Frederick Prince of Whales.

Mientras Franklin predicaba la templanza en los Estados Unidos, retozaba salvajemente con sus hermanos de Logia en Europa. Franklin se desempeñó como Director General de Correos desde la década de 1750 hasta 1775, un papel tradicionalmente relegado a los espías británicos.

Con la financiación de Rothschild, Alexander Hamilton fundó dos bancos de Nueva York, incluido el Bank of New York. Murió en un tiroteo con Aaron Burr, quien fundó Bank of Manhattan con financiamiento de Kuhn Loeb.

Hamilton ejemplificó el desprecio que las Ocho Familias tienen hacia la gente común, al afirmar una vez:

“Todas las comunidades se dividen en pocos y muchos. Los primeros son los ricos y bien nacidos, los otros la masa del pueblo… El pueblo es turbulento y cambiante; rara vez juzgan y determinan lo correcto. Dar, por lo tanto, a la primera clase una parte distinta y permanente del gobierno. Comprobarán la inestabilidad del segundo.

Hamilton fue solo el primero de una serie de compinches de las Ocho Familias en ocupar el puesto clave de Secretario del Tesoro.

Recientemente, el secretario del Tesoro de Kennedy, Douglas Dillon, vino de Dillon Read (ahora parte de UBS Warburg). Los secretarios del Tesoro de Nixon, David Kennedy y William Simon, provenían de Continental Illinois Bank (ahora parte de Bank of America) y Salomon Brothers (ahora parte de Citigroup), respectivamente.

El secretario del Tesoro de Carter, Michael Blumenthal, vino de Goldman Sachs, el secretario del Tesoro de Reagan, Donald Regan, vino de Merrill Lynch (ahora parte del Bank of America), el secretario del Tesoro de Bush padre, Nicholas Brady, vino de Dillon Read (UBS Warburg) y el secretario del Tesoro de Clinton, Robert Rubin. y el secretario del Tesoro de Bush Jr., Henry Paulson, provenía de Goldman Sachs.

El secretario del Tesoro de Obama, Tim Geithner, trabajó en Kissinger Associates y la Reserva Federal de Nueva York.

Thomas Jefferson argumentó que Estados Unidos necesitaba un banco central de propiedad pública para que los monarcas y aristócratas europeos no pudieran usar la impresión de dinero para controlar los asuntos de la nueva nación.

Jefferson exaltó:

“Un país que espera permanecer ignorante y libre… espera lo que nunca ha sido y lo que nunca será. Apenas hay un rey entre cien que no seguiría, si pudiera, el ejemplo de Faraón: obtener primero todo el dinero del pueblo, luego todas sus tierras y luego convertirlos a ellos y a sus hijos en sirvientes para siempre… Los establecimientos bancarios son más peligrosos que permanecer en pie ejércitos. Ya han levantado una aristocracia del dinero.

Jefferson observó cómo se desarrollaba la conspiración de la banca europea para controlar los Estados Unidos, sopesando:

“Actos individuales de tiranía pueden atribuirse a la opinión accidental del día, pero una serie de opresiones iniciadas en un período distinguido, inalterable a través de cada cambio de ministros, prueba demasiado claramente un plan deliberado y sistemático para reducirnos a la esclavitud”.

Pero los argumentos de Hamilton, patrocinado por Rothschild, a favor de un banco central privado de EE. UU. triunfaron. En 1791 se fundó el Banco de los Estados Unidos (BUS), con los Rothschild como principales propietarios. El estatuto del banco expiraría en 1811.

La opinión pública se pronunció a favor de revocar el estatuto y reemplazarlo con un banco central público jeffersoniano. El debate se pospuso cuando los banqueros europeos sumergieron a la nación en la Guerra de 1812. En medio de un clima de miedo y dificultades económicas, el banco de Hamilton renovó sus estatutos en 1816.

Old Hickory, el honesto Abe y Camelot

En 1828, Andrew Jackson se presentó a la presidencia de los Estados Unidos. A lo largo de su campaña arremetió contra los banqueros internacionales que controlaban el BUS. Jackson despotricó: “Eres una guarida de víboras. Tengo la intención de exponerte y por Dios Eterno te desterraré.

Si la gente entendiera las graves injusticias de nuestro sistema monetario y bancario, habría una revolución antes de la mañana”.

Jackson ganó las elecciones y revocó los estatutos del banco declarando:

“La Ley parece basarse en una idea errónea de que los actuales accionistas tienen un derecho prescriptivo no solo al favor, sino también a la generosidad del gobierno… para beneficio de ellos, esta Ley excluye a todo el pueblo estadounidense de la competencia en la compra de este monopolio.

“Constituyan un orden privilegiado los actuales accionistas y los que hereden sus derechos como sucesores, revestidos ambos de gran poder político y gozando de inmensas ventajas pecuniarias por su vinculación con el gobierno.

“Si su influencia se concentra bajo la operación de una Ley como esta, en manos de un directorio autoelegido cuyos intereses se identifican con los de los accionistas extranjeros, ¿no habrá motivo para temblar por la independencia de nuestro país en guerra… controlar nuestra moneda, recibir nuestros dineros públicos y mantener la independencia de miles de nuestros ciudadanos, sería más formidable y peligrosa que el poderío naval y militar del enemigo.

“Es de lamentar que los ricos y poderosos con demasiada frecuencia tuercen los actos de gobierno con fines egoístas… para hacer que los ricos sean más ricos y poderosos. Muchos de nuestros ricos no se han contentado con la misma protección y los mismos beneficios, sino que nos han suplicado que los enriquezcamos mediante leyes del Congreso. He cumplido con mi deber para con este país”.

Prevaleció el populismo y Jackson fue reelegido. En 1835 fue objeto de un intento de asesinato. El pistolero fue Richard Lawrence, quien confesó que estaba “en contacto con los poderes de Europa.

Aún así, en 1836 Jackson se negó a renovar la carta BUS. Bajo su mando, la deuda nacional de EE. UU. llegó a cero por primera y última vez en la historia de nuestra nación.

Esto enfureció a los banqueros internacionales, cuyo principal ingreso se deriva de los pagos de intereses sobre la deuda. El presidente de BUS, Nicholas Biddle, cortó los fondos para el gobierno de EE. UU. en 1842, lo que sumió a EE. UU. en una depresión. Biddle era un agente de Jacob Rothschild, con sede en París.

La Guerra Mexicana se desató simultáneamente en Jackson.

Unos años más tarde se desató la Guerra Civil, con los banqueros de Londres apoyando a la Unión y los banqueros franceses apoyando al Sur. La familia Lehman hizo una fortuna contrabandeando armas hacia el sur y algodón hacia el norte.

En 1861, Estados Unidos tenía una deuda de 100 millones de dólares. El nuevo presidente Abraham Lincoln desairó a los eurobanqueros nuevamente, emitiendo Lincoln Greenbacks para pagar las cuentas del Ejército de la Unión.

El Times de Londres controlado por Rothschild escribió:

“Si esa política maliciosa, que tuvo su origen en la República de América del Norte, se endurece hasta convertirse en un elemento fijo, entonces ese Gobierno proporcionará su propio dinero sin costo alguno. Pagará sus deudas y quedará sin deudas. Tendrá todo el dinero necesario para llevar a cabo su comercio. Llegará a ser próspero sin precedentes en la historia de los gobiernos civilizados del mundo. Los cerebros y la riqueza de todos los países irán a América del Norte. Ese gobierno debe ser destruido, o destruirá todas las monarquías del mundo”.

La circular de peligro escrita por eurobanqueros fue expuesta y distribuida por todo el país por populistas enojados.

Declaró:

“La gran deuda que verán los capitalistas proviene de la guerra y debe usarse para controlar la válvula del dinero. Para lograr esto, los bonos del gobierno deben usarse como base bancaria. Ahora estamos esperando que el Secretario del Tesoro, Salmon Chase, haga esa recomendación. No permitirá que los billetes verdes circulen como dinero, ya que no podemos controlar eso. Controlamos los bonos ya través de ellos las emisiones bancarias”.

La Ley Bancaria Nacional de 1863 restableció un banco central privado de EE. UU. y se emitieron los bonos de guerra de Chase. Lincoln fue reelegido al año siguiente y prometió derogar la ley después de prestar juramento en enero de 1865.

Antes de que pudiera actuar, fue asesinado en el Teatro Ford por John Wilkes Booth. Booth tenía conexiones importantes con los banqueros internacionales. Su nieta escribió This One Mad Act, que detalla el contacto de Booth con “misteriosos europeos” justo antes del asesinato de Lincoln.

Después del golpe de Lincoln, Booth fue llevado por miembros de una sociedad secreta conocida como Caballeros del Círculo Dorado (KGC). KGC tenía estrechos vínculos con la Sociedad Francesa de las Estaciones, que produjo a Karl Marx.

KGC había fomentado gran parte de la tensión que causó la Guerra Civil y el presidente Lincoln había apuntado específicamente al grupo.

Booth era miembro de KGC y estaba conectado a través del Secretario de Estado Confederado Judah Benjamin con la Casa de Rothschild. Benjamin huyó a Inglaterra después de la Guerra Civil.

Casi un siglo después de que Lincoln fuera asesinado por emitir billetes verdes, el presidente John F. Kennedy se encontró en el punto de mira de las Ocho Familias. Kennedy había anunciado medidas enérgicas contra los paraísos fiscales extraterritoriales y propuesto aumentos en las tasas impositivas para las grandes empresas petroleras y mineras.

Apoyó la eliminación de las lagunas fiscales que benefician a los superricos. Sus políticas económicas fueron atacadas públicamente por la revista Fortune, el Wall Street Journal y tanto David como Nelson Rockefeller.

Incluso el propio secretario del Tesoro de Kennedy, Douglas Dillon, que provenía del banco de inversión Dillon Read controlado por UBS Warburg, expresó su oposición a las propuestas de JFK.

El destino de Kennedy se selló en junio de 1963 cuando autorizó la emisión de más de $ 4 mil millones en notas de los Estados Unidos por parte de su Departamento del Tesoro en un intento de eludir la usura de alta tasa de interés de la multitud de banqueros privados internacionales de la Reserva Federal.

La esposa de Lee Harvey Oswald, quien fue convenientemente asesinado a tiros por Jack Ruby antes de que le dispararan al propio Ruby, le dijo al autor AJ Weberman en 1994:

“La respuesta al asesinato de Kennedy está en el Banco de la Reserva Federal. No subestimes eso. Está mal culpar a Angleton y a la CIA per se solamente. Esto es sólo un dedo en la misma mano. Las personas que suministran el dinero están por encima de la CIA”.

Impulsado por la escalada inmediata de la guerra de Vietnam por parte del presidente entrante Lyndon Johnson, Estados Unidos se hundió aún más en la deuda. Sus ciudadanos fueron aterrorizados hasta el silencio. Si pudieron matar al presidente, podrían matar a cualquiera.

La casa de Rothschild

La Casa holandesa de Orange fundó el Banco de Amsterdam en 1609 como el primer banco central del mundo. El príncipe Guillermo de Orange se casó con un miembro de la casa inglesa de Windsor y tomó como esposa a la hija del rey Jaime II, María.

La Hermandad de la Orden de Orange, que recientemente fomentó la violencia protestante en Irlanda del Norte, colocó a Guillermo III en el trono inglés, donde gobernó Holanda y Gran Bretaña. En 1694, Guillermo III se asoció con la aristocracia del Reino Unido para lanzar el Banco de Inglaterra privado.

La Vieja Dama de Threadneedle Street, como se conoce al Banco de Inglaterra, está rodeada por muros de treinta pies. Tres pisos debajo de él se almacena el tercer stock más grande de lingotes de oro en el mundo.

Los Rothschild y sus socios endogámicos de las Ocho Familias gradualmente llegaron a controlar el Banco de Inglaterra. La “fijación” diaria de oro de Londres se produjo en el NM Rothschild Bank hasta 2004.

Como dijo el vicegobernador del Banco de Inglaterra, George Blunden:

“El miedo es lo que hace que los poderes del banco sean tan aceptables. El banco puede ejercer su influencia cuando las personas dependen de nosotros y temen perder sus privilegios o cuando tienen miedo”.

Mayer Amschel Rothschild vendió al gobierno británico mercenarios alemanes de Hesse para luchar contra los revolucionarios estadounidenses, desviando las ganancias a su hermano Nathan en Londres, donde se estableció NM (Nathan and Mayer) Rothschild & Sons.

Mayer fue un estudiante serio de Cabala y lanzó su fortuna con dinero malversado de William IX, administrador real de la región de Hesse-Kassel y un masón prominente.

Los Barings controlados por Rothschild financiaron el opio chino y el comercio de esclavos africanos. Financió la compra de Luisiana.

Cuando varios Estados no pagaron sus préstamos, Barings sobornó a Daniel Webster para que pronunciara discursos en los que destacaba las virtudes de la devolución de los préstamos.

Los Estados se mantuvieron firmes, por lo que la Casa Rothschild cortó el grifo del dinero en 1842, hundiendo a los EE. UU. en una profunda depresión. A menudo se decía que la riqueza de los Rothschild dependía de la bancarrota de las naciones.

Mayer Amschel Rothschild dijo una vez:

“No me importa quién controla los asuntos políticos de una nación, siempre y cuando yo controle su moneda”.

La guerra tampoco dañó la fortuna familiar. La Casa de Rothschild financió la Guerra de Prusia, la Guerra de Crimea y el intento británico de apoderarse del Canal de Suez de manos de los franceses.

Nathan Rothschild hizo una gran apuesta financiera por Napoleón en la batalla de Waterloo, al tiempo que financiaba la campaña peninsular del duque de Wellington contra Napoleón. Tanto la Guerra Mexicana como la Guerra Civil fueron minas de oro para la familia.

Nathan Rothschild

Una biografía de la familia Rothschild menciona una reunión en Londres en la que un “Sindicato Bancario Internacional” decidió enfrentar al Norte de Estados Unidos contra el Sur como parte de una estrategia de “divide y vencerás”.

El canciller alemán Otto von Bismarck dijo una vez:

“La división de los Estados Unidos en federaciones de igual fuerza se decidió mucho antes de la Guerra Civil. Estos banqueros tenían miedo de que los Estados Unidos… alteraran su dominio financiero sobre el mundo. La voz de los Rothschild prevaleció”.

El biógrafo de Rothschild, Derek Wilson, dice que la familia era el banquero europeo oficial del gobierno de los Estados Unidos y fuertes partidarios del Banco de los Estados Unidos.

El biógrafo de la familia, Niall Ferguson, señala una “brecha sustancial e inexplicable” en la correspondencia privada de Rothschild entre 1854 y 1860. Él dice que todas las copias de las cartas enviadas escritas por los Rothschild de Londres durante este período de la Guerra Civil “fueron destruidas por orden de los socios sucesivos”.

Las tropas francesas y británicas, en el apogeo de la Guerra Civil, habían rodeado los EE. UU. Los británicos enviaron 11.000 soldados al Canadá controlado por la Corona, lo que dio refugio a los agentes confederados.

Napoleón III de Francia instaló al archiduque Maximiliano, miembro de la familia austriaca de los Habsburgo, como su emperador títere en México, donde las tropas francesas se concentraron en la frontera con Texas.

Solo un despliegue de última hora de dos flotas de buques de guerra rusos por parte del aliado de los EE. UU., el zar Alejandro II en 1863, salvó a los Estados Unidos de la recolonización.

Ese mismo año, el Chicago Tribune criticó:

“Belmont (August Belmont era un agente de los Rothschild de EE. UU. y tenía una carrera de caballos de la Triple Corona nombrada en su honor) y los Rothschild… que han estado comprando bonos de guerra confederados”.

Salmon Rothschild dijo de un presidente Lincoln fallecido:

“Rechaza todas las formas de compromiso. Tiene la apariencia de un campesino y solo puede contar historias de bar”.

Baron Jacob Rothschild fue igualmente halagador hacia la ciudadanía estadounidense.

Una vez le comentó al ministro de Estados Unidos en Bélgica, Henry Sanford, sobre los más de medio millón de estadounidenses que murieron durante la Guerra Civil:

“Cuando tu paciente está desesperadamente enfermo, intentas medidas desesperadas, incluso la sangría”.

Salmon y Jacob simplemente estaban llevando adelante una tradición familiar.

Unas generaciones antes, Mayer Amschel Rothschild se jactó de su estrategia de inversión: “Cuando las calles de París están llenas de sangre, compro”.

Los hijos de Mayer Rothschild eran conocidos como los Cinco de Frankfurt. El mayor, Amschel, dirigía el Banco de Fráncfort de la familia con su padre, mientras que Nathan dirigía las operaciones de Londres.

El hijo menor, Jacob, abrió una tienda en París, mientras que Salomon dirigía la sucursal de Viena y Karl se iba a Nápoles. El autor Frederick Morton estima que en 1850 los Rothschild tenían un valor de más de $ 10 mil millones. Algunos investigadores creen que su fortuna supera hoy los 100 billones de dólares.

Los Warburg, Kuhn Loeb, Goldman Sachs, Schiff y Rothschild se han casado en una gran familia feliz de banqueros. La familia Warburg, que controla Deutsche Bank y BNP, se unió a los Rothschild en 1814 en Hamburgo, mientras que la potencia de Kuhn Loeb, Jacob Schiff, compartió alojamiento con los Rothschild en 1785.

Schiff emigró a Estados Unidos en 1865. Unió fuerzas con Abraham Kuhn y se casó con la hija de Solomon Loeb. Loeb y Kuhn se casaron con las hermanas del otro y se consumó la dinastía Kuhn Loeb. Félix Warburg se casó con la hija de Jacob Schiff.

Dos hijas de Goldman se casaron con dos hijos de la familia Sachs, creando Goldman Sachs. En 1806, Nathan Rothschild se casó con la hija mayor de Levi Barent Cohen, un destacado financiero de Londres.

Por lo tanto, el súper toro de Merrill Lynch, Abby Joseph Cohen, y el secretario de Defensa de Clinton, William Cohen, probablemente descienden de los Rothschild.

Hoy en día, los Rothschild controlan un extenso imperio financiero, que incluye participaciones mayoritarias en la mayoría de los bancos centrales del mundo. El clan Edmond de Rothschild posee Banque Privee SA en Lugano, Suiza y Rothschild Bank AG de Zurich.

La familia de Jacob Lord Rothschild es propietaria de la poderosa Rothschild Italia en Milán.

Son miembros fundadores del exclusivo Club of the Isles de $10 billones, que controla los gigantes corporativos Royal Dutch Shell, Imperial Chemical Industries, Lloyds of London, Unilever, Barclays, Lonrho, Rio Tinto Zinc, BHP Billiton y Anglo American DeBeers.

Domina el suministro mundial de petróleo, oro, diamantes y muchas otras materias primas vitales.

El Club de las Islas proporciona capital para el Quantum Fund NV de George Soros, que obtuvo ganancias financieras sustanciales en 1998-1999 tras el colapso de las monedas de Tailandia, Indonesia y Rusia. Soros era uno de los principales accionistas de Harken Energy de George W. Bush.

El Club de las Islas está dirigido por los Rothschild e incluye a la reina Isabel II y otros aristócratas y nobles europeos adinerados.

Quizás el depósito más grande de la riqueza de Rothschild hoy en día es Rothschilds Continuation Holdings AG, una sociedad de cartera bancaria secreta con sede en Suiza. A fines de la década de 1990, los descendientes del imperio global Rothschild eran los barones Guy y Elie de Rothschild en Francia y Lord Jacob y Sir Evelyn Rothschild en Gran Bretaña.