lunes, 23 de mayo de 2011

Los socialistas piden "serenidad" a la dirección y apertura a las voces críticas para la catarsis

VALENCIA.- Los socialistas valencianos le piden a la dirección del partido "serenidad" para afrontar los resultados electorales pero también reclaman la apertura a las voces críticas internas, ya que algunos consideran que el secretario general del PSPV, Jorge Alarte "lleva mucho tiempo aislado".

   Tras las elecciones municipales y autonómicas celebradas este domingo, a los socialistas valencianos les toca hacer parada para analizar y digerir unos resultados que han puesto de manifiesto el retroceso electoral del PSOE en la Comunitat Valenciana, ya que ha descendido al mínimo histórico en porcentaje de votos.
   En general, los miembros del PSPV coinciden en que lo sucedido en la Comunitat forma parte de la "debacle" nacional como consecuencia de las decisiones de un gobierno que ha "fallado" en sus decisiones. "Los ciudadanos han expresado en estas elecciones su descontento con el Gobierno" y a esto se le une que "el PP y Camps han sabido quitarse las responsabilidades de encima".
   Para los socialistas valencianos es momento de abrir un periodo de reflexión e iniciar este camino le corresponde a la dirección del PSPV, pero con dosis de "autocrítica" y con la "cabeza fría".  
   Alarte, como secretario general "debe tomar decisiones" porque el resultado es "muy malo" y "debe pensar qué hacer".
"Si a lo que se limita es a seguir con la gente de la que se ha rodeado" o a mantener la misma línea de trabajo "no sería bueno". "Debe reconstruir el proyecto con todo el mundo", han agregado.
   Aunque se mantienen cautelosos en cuanto a la posibilidad de repetir "errores del pasado" --como fue la dimisión del exsecretario general del PSPV Joan Ignasi Pla, cuyos resultados electorales fueron mejores que los actuales--, algunos estiman que hay que "sentarse a hablar" para poder conseguir un partido "más unido".
   En este sentido, no creen que sea lo mejor para el PSPV "hacerse un 'Harakiri' colectivo" y, aunque "se podría entrar en si debe o no haber dimisiones, eso no es lo importante" ahora mismo.  
   Hay opiniones que apuntan a la necesidad de "abrir" las puertas del socialismo valenciano para que sea "la casa de la izquierda" y, en este punto, han destacado la necesidad de "reestructurar el partido para que la gente se sienta más integrada". El crecimiento de EUPV y de Compromís indica que el voto de la izquierda se ha desplazado hacia otros partidos o hacia la abstención, han señalado.
   Voces particulares del socialismo valenciano como es la del alcalde de Morella, Ximo Puig, que pugnó con Alarte por liderar al PSPV, piden un cambio en la manera de entender la democracia "en vivo y en directo" por un estilo "más profundo" que recoja el sentir de la sociedad. "Todos los días parece que tienen que nacer y morir propuestas". Así, reclama "serenidad" y "reflexión"; "vamos a esperar" a ver cómo actúa la dirección del partido".
   El que fuera secretario general del PSPV Joan Ignasi Pla comparte la idea que de que la derrota del PSPV se enmarca en la situación del socialismo a nivel estatal por las decisiones de un Gobierno que "no han sido coherentes" con su programa. Esto es "más grave" en la Comunitat porque el PSOE no ha podido aprovechar el "desgaste" del PP.
   Así, advierte de que el PSPV "no está bien" y necesita un cambio. En este punto, Pla no tiene claro que Alarte vaya a aguantar la legislatura pero tampoco considera oportuno un proceso de primarias ahora. "Es complicado". En este sentido, ha destacado tras los resultados de 2007 él hizo "partícipe" al Comité Nacional para que decidiera. "No hice lo que quise".
   Desde el punto de vista del exsecretario general Joan Lerma, es momento de plantearse la manera de "corregir los errores" y "contar con el partido" para marcar la línea a seguir en el futuro próximo, que estará influido por el calendario de congresos que el Comité Federal del PSOE dictará el próximo sábado.

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