martes, 11 de diciembre de 2007

Discrepancias en el PSOE ponen en riesgo la salida a Bolsa de la CAM

ALICANTE.- Los recelos de una parte del socialismo alicantino a aprobar en los mismos términos en que lo hizo el Consejo de Administración de la CAM la emisión por la Caja de cuotas participativas pueden poner en serio riesgo el quórum necesario para que la medida salga adelante, según revela el periódico "Información".

La entidad financiera ha convocado para el viernes a su máximo órgano de gobierno, la Asamblea general, para refrendar el acuerdo tomado el 20 de noviembre por el Consejo de la caja. Para salir airosa de la votación, la CAM precisa de, al menos, dos tercios de los votos de los asistentes. El pertinente cambio de los estatutos de la institución precisa, por tanto, más votos de los que supondría una mayoría simple.

Tras varias semanas de conversaciones entre la dirección de la CAM y los vocales socialistas, el Consejo logró aprobar el 20 de noviembre las cuotas participativas, acciones de la Caja que cotizan en Bolsa pero que impiden a sus suscriptores tener voto en consejos y asambleas.

Salvo el voto contrario de los dos representantes sindicales, el resto de vocales y cargos de representación del Consejo votaron a favor. Las condiciones expuestas por los socialistas para decantar su voto afirmativo se acataron verbalmente, aunque no todas se han plasmado por escrito.

Es en estas últimas donde han nacido las discrepancias entre miembros del mismo partido con representación en la asamblea. Una de ellas, la de mayor calado, atiende a la posibilidad de que los grupos que suscriban participaciones de la Caja puedan posteriormente agruparse en un único sindicato. De producirse esto último, el sindicato de cuotapartícipes tampoco tendría voto, pero sí una influencia notable en las decisiones de Caja Mediterráneo.

Si asistieran todos los consejeros generales a la Asamblea del viernes, estos sumarían 177. Serían precisos por lo menos 118 votos a favor. Los sindicatos, que suman 24 representantes, ya han anunciado su voto en contra. El resto de compromisarios está repartido del modo siguiente: corporaciones municipales (43), impositores (64), entidades fundadoras (dos), Cortes Valencianas (44).

Consejeros del PSPV, miembros de la asamblea pero no del Consejo de Administración, consideran que el hecho de que el presidente de la CAM no se haya comprometido por escrito a rechazar la creación de un sindicato de cuotapartícipes deja la puerta abierta a la privatización de la caja.

Al término de la reunión del consejo en que se aprobaron las cuotas, el comunicado oficial de la institución no hacía referencia a este aspecto. Fuentes socialistas dijeron ese día que aunque no se plasmó negro sobre blanco, el «espíritu» de todos los consejeros coincidía en oponerse a dejar flecos que propiciaran una futura privatización.

El acuerdo sí especificaba que la emisión de cuotas participativas se realizará una sola vez, dejaba constancia explícita de amortización en caso de modificación del estatus jurídico que confiera derechos políticos, y establecía la restricción, «en principio», de la posibilidad de adquirir cuotas a los miembros del Consejo).

La creación de un sindicato de cuotapartícipes deberá aprobarse previo acuerdo del Consejo de Administración, donde los socialistas - los únicos que reclamaron negociar - están en minoría frente a la postura oficial de Caja Mediterráneo.- (EPI)

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡No a la privatización de las cajas!