Andy Cartagena arrebató antes sus paisanos, cortó dos orejas y el palco le negó otras dos.
Leonardo Hernández también demostró su buen momento y salió a hombros junto al alicantino.
Se lidiaron seis toros de José Murube, despuntados para rejones y de buen juego en líneas generales.
Rui Fernandes, ovación tras aviso y oreja.
Andy Cartagena, oreja con fuerte petición de la segunda en ambos.
Dio dos vueltas al ruedo en su segundo.
Leonardo Hernández, oreja y oreja.
Tres cuartos de plaza.
La Feria de Hogueras se cerraba con un festejo de rejones en el que todo el mundo se fue satisfecho de la plaza. Los caballeros, que triunfaron, el ganadero, que lidió una gran corrida y hasta el empresario, que vio como la plaza se llenaba en tres cuartas partes de su aforo tras un ciclo en el que la asistencia de público ha bajado sensiblemente.
Rui Fernandes echó todo a perder con el rejón de muerte y el descabello ante su primero pero pudo resarcirse ante el cuarto, ante el que clavó banderillas y farpas con vistosidad para acabar cortando una oreja.
Andy Cartagena firmó una tarde muy completa, de mucha calidad, antes sus paisanos. En sus dos toros lo bordó combinando espectacularidad con pureza, brillando a lomos de caballos como Pericalvo, Bisbal y Maravilla.
A ambos los mató arriba y con gran eficacia.
Inexplicablemente, el palco le negó la segunda oreja de cada una de sus actuaciones, que fue pedida con mucha fuerza por un público que le obligó a dar dos aclamadísimas vueltas al ruedo.
Con Andy se llevaron en volandas a Leonardo Hernández, que ya es una firme realidad del toreo a caballo.
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