VALENCIA.- El secretario general de la Asociación de Promotores, Benjamín Muñoz, ha pedido al Consell, tras conseguir la mayoría absoluta el PP, “una revisión” de toda la legislación urbanística y que “flexibilice esa legislación”.Muñoz reclamó al Consell, además, la redacción de los planes de acción territorial de forma que los planes generales de los municipios tengan una continuidad unos con otros. Afirmó que el sector inmobiliario español se normalizará en dos o tres años, aunque seguirá moviéndose en cifras “muy positivas”.
Muñoz manifestó que con los niveles de creación de hogares en España, con la pirámide demográfica española y con la inmigración, la demanda solvente de vivienda se situará en torno a las 400.000 viviendas al año, una cifra que, según dijo, “está muy bien”.
Los promotores recibirán asesoramiento para fomentar la construcción de viviendas que cumplan los criterios medioambientales y de sostenibilidad. Así se recoge en el convenido firmado entre la Asociación de Promotores y Agentes Urbanizadores y la Asociación para los Entornos Saludables (AENS), dentro del congreso “Promoviendo entornos saludables y respetuosos con el medio ambiente”.
Las 700 empresas que integran la asociación contarán con la ayuda de expertos y profesionales, a quienes podrán realizar consultas. Benjamín Muñoz valoró el acuerdo y destacó que a pesar de que se les ha acusado de ser unos “depredadores del territorio” y de “no respetar a la sociedad”, los promotores valencianos han sido los primeros en preocuparse por esta cuestión.
Sin embargo, indicó que las nuevas técnicas pueden provocar un aumento el coste de construcción en torno a un 5%, por lo que consideró necesario buscar entre todos los afectados “un equilibrio” para que ese incremento no repercuta en el precio de la vivienda.
Al respecto, el arquitecto y miembro de la Asociación para los Entornos Saludables, Francisco Rubio, destacó que en la actualidad se está produciendo una traslación de los valores medioambientales a la edificación, lo que provoca la aparición de una nueva forma de hacer las cosas.
Indicó que este concepto no debe suponer añadir costes al proceso de construcción, sino buscar un equilibrio entre los mismos, aunque manifestó que actualmente se trata de tecnologías nuevas que no están abaratadas al cien por cien.
El director general de Vivienda, Bernabé Bueno, resaltó la aprobación del decreto del diseño, que sustituirá a las normas de habitabilidad existentes en la actualidad, y del decreto de rehabilitación energética, cuyo objetivo es incentivar la aplicación de medidas urbanas que permitan reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera.
El Consell también tiene previsto elaborar un decreto de evaluación medioambiental, que servirá para que los responsables del diseño sepan si éste cumple los parámetros establecidos.- (EFE)
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