Un año más y casi acabadas las obras, la avenida de Denia se cortará al tráfico y se habilitará una calzada para el tránsito peatonal hasta el caserío. Los peregrinos tendrán que circular por los pasos inferiores que se han construido poco antes de Jesuitas y en el barranco de Orgegia.
Con una frecuencia de cinco minutos, los autobuses urbanos saldrán en marcha hacia la pedanía a partir de las 8 y hasta las 20 horas en la plaza del Mar.
El Ayuntamiento de Alicante no ha escatimado tampoco en medios. Poco antes de la salida hará entrega a los peregrinos de 15.000 cañas de romero para acompañar durante el itinerario; también repartirá en la paraeta (a la altura de Vistahermosa) 1.800 kilos de rollitos de anís y 1.500 litros de mistela.
Con el fin de que todo esté a punto para hoy jueves, el Consistorio ha empleado a 150 operarios para limpiar el caserío y los alrededores. Además, instaló 170 contenedores para residuos y 80 aseos químicos distribuidos por todo el recorrido y que permanecerán hasta el próximo domingo.
La seguridad también se ha reforzado con la colocación de 4.200 metros de vallas de hasta dos metros de altura por los alrededores del barranco del Juncaret próximos a la pedanía.
También se restauraron las cruces de piedra para el Vía Crucis, que estaban instaladas en la avenida de Denia, y que hoy ya estarán colocadas para la romería.
La comitiva de autoridades tiene prevista su llegada al monasterio a las 10 horas, momento en el que tendrá lugar la apertura del camarín para trasladar la reliquia de la Santa Faz al altar; a continuación se oficiará una misa por parte el obispo de Diócesis Orihuela-Alicante, monseñor Rafael Palmero.
Luego, «a título particular» los miembros del equipo de gobierno municipal se reunirán para almorzar, aunque se ha suprimido el almuerzo oficial por motivo de la crisis.
El pasado año cerca de 300 personas se reunieron en San Rafael.
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