Además, advirtió de los efectos negativos del déficit tarifario sobre el sector. "El déficit de tarifa crea inestabilidad regulatoria y tiene un impacto negativo sobre el perfil financiero del sector", por lo que "Fitch vería positivamente cambios legislativos que permitan una rápida recuperación del actual desajuste mediante su titulización", afirmó.
Sobre la decisión acerca de Iberdrola, explicó que "la preocupación de Fitch se refiere a que podría llevar más tiempo del inicialmente previsto que los ratios de Iberdrola regresen a niveles más en consonancia con una calificación 'A' debido a las dificultades del entorno macroeconómico".
Junto a esto, Fitch mantuvo en estable la perspectiva de la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán y redujo la calificación IDR a 'A-' (peor nota dentro de la calidad buena) desde 'A'.
La perspectiva estable responde a la posición de liderazgo de la compañía en el negocio de las energías renovables y a la diversificación de su actividad gracias a las compras realizadas en Reino Unido y Estados Unidos.
La agencia indicó que el 'rating' de deuda senior de Iberdrola se mantiene una categoría por encima de la calificación IDR por sus perspectivas de recuperación "superiores a la media" gracias a su base de activos global e integrada, que incluye redes reguladas.
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