ALICANTE.- Una mujer desempleada y sin ingresos, al igual
que su marido, y madre de tres hijas menores, ha solicitado este lunes
en una entidad bancaria de Alicante, con la que mantiene una
deuda de unos 80.000 euros, que se le conceda una dación en pago y un
alquiler social para evitar el desahucio de su vivienda, previsto para
el próximo 7 de febrero de 2013, después de que se aplazara el pasado
octubre.
Así, la afectada, que ha contado con el apoyo de representantes de Stop Desahucios,
ha presentado en la sucursal --frente a la que la plataforma mantiene
una acampada de protesta desde hace 53 días-- una Ayuda de Emergencia y
la solicitud de renta de Ciudadanía Básica.
En declaraciones a los periodistas, ha indicado que ni ella ni su
esposo tienen trabajo desde 2008 y que, actualmente, están sin ingresos,
por lo que ha subrayado que quiere el alquiler social por sus hijas. "Si por mí fuera, mi marido y yo dormiríamos en la calle, no me importa, pero hay tres menores en medio", ha subrayado.
Al ser preguntada sobre cuál es su estado de ánimo por la situación que atraviesa, ha manifestado que "antes estaba fatal", si bien ahora, con el apoyo de la plataforma solidaria y con "toda la gente" que le respalda y le ayuda, se ha animado "mucho" y está "bien".
Posteriormente, y tras entregar la referida documentación al
director de la oficina, ha indicado que queda a la espera de la
respuesta, de la que ha agregado que "viene de arriba".
"Espero
que sea buena. Vamos a pasar lo que queda de fiestas con mis hijas en
casa. Creo que voy a tener suerte, estoy esperanzada y animada con la
ayuda de la plataforma, que es mi familia", ha enfatizado.
Por su parte, el representante de Stop Desahucios que ha
acompañado en el interior de la sucursal a la afectada, José María
Copete, ha explicado a los medios de comunicación, también a su salida,
que han entregado "lo que hemos podido".
En este sentido, ha expuesto que en anteriores vistas, la entidad comunicó que "condonaba toda la deuda", si bien la plataforma trasladó que esa medida "no era suficiente" al no tener la familia ingresos, por lo que pidieron un alquiler social "para no quedar en la calle".
"Nos pidieron algo que probase o avalase que iban a pagar, entonces
hemos dado una Ayuda de Emergencia y la solicitud de renta de ciudadanía
básica", ha añadido.
Copete ha resaltado que la "diferencia" entre las negociaciones
que los afectados mantienen con las entidades por sí solos a ir
acompañados por asesores de colectivos sociales "es abismal, inmensa".
"Esperemos que sean lo suficientemente inteligentes para aceptar esto
--la petición--, pueden hacerlo, condonar la deuda y conceder el
alquiler social", ha incidido.
En relación a la respuesta que han obtenido ante su solicitud, ha
indicado que el director de la oficina en la que han realizado el
trámite ha señalado que tiene "línea directa con la persona que decide estas cosas" y ha apuntado "que responderá a la mayor brevedad".
Por otra parte, un portavoz de Stop Desahucios ha recalcado que el colectivo continúa con sus reivindicaciones durante estas fiestas navideñas, ya que ha resaltado que "por mucho que sea Navidad hay gente que se sigue quedando en la calle, que ha sido desahuciada, y hay quien no tiene vivienda".
En este sentido, ha anticipado que para la noche de fin de año
seguirán con la acampada que mantienen desde hace casi dos meses en las
puertas de la oficina bancaria, si bien ha puntualizado que el motivo de
la plataforma "es otro", ya que van "consiguiendo cosas", por lo que ha agregado que "celebrarán un poco los logros"
Al respecto, ha indicado que además de los 18 lanzamientos que han
paralizado en la comarca de L'Alacantí en 2012, han constatado que "ya
no tenemos que llegar a la puerta de la vivienda para detener allí el
desahucio, sino que a través de movilización y negociación con las
entidades estamos consiguiendo que el mismo banco detenga" el proceso.
Ante la continuación de la acampada en la sucursal, ha señalado
que decidirán en asamblea hasta cuando se prolonga, aunque ha matizado
que si la entidad "accede a negociar" los dos casos que reclama el colectivo "seguramente" modificarían "la forma de protestar", del mismo modo que "si se cierra en banda" la intensificaran.
Por último, sobre la relación que mantienen los concentrados con
los empleados de la sucursal y con los vecinos después de cerca de dos
meses de acampada, ha enfatizado que no han tenido "ningún problema".
"La gente pregunta, habla con nosotros. No es una mala relación, es
algo nuevo, habrá a quien le guste más o menos, pero no hemos tenido
problemas. Hemos tenido solidaridad, apoyo y ánimos, y eso nos da una
fuera tremenda", ha afirmado.