ALICANTE.- La junta de gobierno local del Ayuntamiento de Alicante ha aprobado el
proyecto de ordenanza reguladora de la Ocupación Temporal de la Vía
Pública mediante actividades y espectáculos de carácter comercial,
recreativo, sociocultural y otros análogos. Este proyecto normativo
plantea reducir el horario de cierre de terrazas de hostelería en una
hora.
La nueva normativa, que aúna las ordenanzas vigentes de
veladores y de venta no sedentaria (mercadillos), inicia así el trámite
para su aprobación plenaria y ha sido presentada en rueda de prensa este
martes por la concejala de Ocupación de Vía Pública, Cristina Cutanda, y
los portavoces adjuntos del equipo de gobierno Ana Poquet y Manuel
Villar.
Entre las novedades introducidas destaca la
consolidación de las terrazas en las bandas de aparcamiento autorizadas,
que se introdujo por primera vez de forma extraordinaria durante la
pandemia, y la reducción del horario de cierre de veladores.
En materia de horarios, el proyecto de ordenanza aborda una nueva
regulación con la reducción en una hora el cierre nocturno en horario
general respecto a los actualmente vigentes, para "avanzar en la
conciliación de la actividad económica y el derecho al descanso de los
vecinos".
De esta forma, se contempla la apertura de 8.00 a
23.59 horas de lunes a viernes, mientras que los fines de semana y
festivos laborales se alarga el horario una hora --de 9.00 a 1.00 del
día posterior--.
Por su parte, el horario de verano se reduce en dos
semanas, al iniciarse el 15 de junio (en lugar del día 1) y se extiende
hasta el 30 de septiembre. En este periodo, el cierre de domingo a
jueves se reduce a la 1.00 de la madrugada del día posterior, y los
viernes, sábados y vísperas de festivos se mantiene a las 2.00 horas del
día posterior.
Interpelada por posibles quejas de los
hosteleros, Cutanda ha defendido que el consistorio tiene que "buscar el
equilibrio entre la actividad empresarial y el descanso vecinal".
La nueva ordenanza contempla también, además de las regulaciones de
la figura ya incluida de las Zona Acústica Saturada (ZAS), las
correspondientes a las nuevas figuras contempladas en la ordenanza de
ruido en trámite como son la Zona de Protección Acústica Especial (ZPAE)
o la Zona de Situación Acústica Especial (ZSAE).
En cuanto a los veladores en las bandas de aparcamiento autorizadas,
se limitan al ancho de la fachada de los establecimientos y deberán
respetar una zona de paso de 1,8 metros en la acera, así como en los
pasillos libres entre mesas.
Además, el lugar ocupado en la vía pública
deberá contar con tarima al nivel de la acera para facilitar la
accesibilidad, así como protección lateral. Como novedad, se permitirá
la instalación de mamparas portátiles con jardineras y cortavientos
extensibles de tela microperforada.
Otra de las novedades que
se incorpora a la norma es la regulación de la proyección de imágenes
sobre la acera, así como la extensión de la posibilidad de colocar
elementos decorativos u ornamentales --hasta ahora limitados a periodos
concretos como pueda ser en Navidad-- durante todo el año.
La
nueva ordenanza refunde otras dos vigentes, relativas a veladores y a
venta no sedentaria, al tiempo que se complementa con la recientemente
aprobada de Fiestas Populares. Además, introduce referencias en materia
de ruido derivado de las actividades y espectáculos que se regulan, en
la línea de la normativa específica que ultiman las concejalías de
Urbanismo y Medio Ambiente.
Igualmente, la normativa adecúa
"de manera exhaustiva" las instalaciones eventuales, portátiles y
desmontables en la vía pública a las regulaciones introducidas por el
Reglamento de Actividades y Espectáculos de la Generalitat.
En materia de veladores, se elimina el trámite preceptivo de
solicitud de informe previo de la Junta de Distrito, que pasa a
realizarse mediante comunicación posterior de las autorizaciones
tramitadas, manteniéndose solo para los planes ordenadores de la
ocupación de espacios públicos. De esta forma, se pretende "agilizar la
concesión de las licencias y evitar las demoras".
Respecto a
la venta en la vía pública, se contempla la posibilidad de ampliación
del tamaño de los puestos en determinados supuestos, cuando se trate de
mercados de abastos. También desaparecen el mercadillo de la Explanada a
partir del 31 de octubre de 2024 y el de San Antón, que pasa a ser
gestionado por la comisión de fiestas del barrio. Por su parte, se
modifica el emplazamiento del mercado de artesanía de la avenida de Niza
en la playa de San Juan.
Una de las medidas incluidas en esta
ordenanza que regula la venta en la vía pública es la reserva del 10
por ciento del empleo a nuevos emprendedores o personas en situación de
exclusión social a petición de la Concejalía. También se contempla la
posibilidad de poner puntos violetas a petición de la Concejalía de
Bienestar Social y Derechos Públicos o de cualquier administración u
organismo público competente en la materia.
Otra de las novedades se encuentra en la tramitación de las
autorizaciones de ocupación de la vía pública en materia de rodajes y
grabaciones, que se centralizan en el Patronato Municipal de Turismo; la
organización de pruebas deportivas, en la Concejalía de Deportes; y la
colocación de elementos decorativos y promocionales (maceteros, árboles
navideños o alfombras) en la de Comercio. Podrán solicitarse durante
todo el año.
También se introduce la regulación de los
permisos de ocupación de la vía pública para realizar mudanzas, que se
gestionarán a través de la Concejalía de Movilidad Urbana.
En
la norma se establece un capítulo de especificidades relativas a
actividades divulgativas, promocionales y de distribución de prensa
gratutita u octavillas; realización de actividades artísticas,
conciertos o actuaciones, espectáculos itinerantes; y atracciones
feriales. También se regula la limpieza y gestión de residuos en todos
los eventos antes y después de la actividad, al igual que el
mantenimiento de las infraestructuras y servicios viarios.
En
materia de Seguridad Ciudadana, se introduce la posibilidad de revocar
la autorización hasta en dos años en supuestos de reincidencia y se
establece un procedimiento específico para la reparación de daños
derivados de las actividades autorizadas, además de actualizarse el
cuadro de infracciones.
El proyecto de la ordenanza se
someterá ahora a un periodo de enmiendas por parte de todos los grupos
políticos, luego llegará a pleno, donde si se aprueba inicialmente
comenzará un plazo de 30 días para alegaciones, tras lo que se aprobaría
definitivamente.
Al respecto, la concejala socialista Trini Amorós ha reprochado al
equipo de gobierno la aprobación inicial de la ordenanza porque "no ha
sido dialogada con los vecinos y vecinas que residen en áreas que están
especialmente afectadas por contaminación acústica".
"Hoy
hemos conocido que la medida estrella de la nueva ordenanza consiste en
reducir una hora el horario de apertura de veladores, algo que se
aplicará a toda la ciudad. Sin embargo, no se pone el foco en las zonas
donde se necesita atajar la contaminación acústica con mayor
rotundidad", ha censurado.
En este sentido, Amorós ha
reclamado al equipo de gobierno que estudie cuáles son las zonas donde
se registra el problema "con mayor gravedad" para avanzar en la
declaración de Zona Acústica Saturada y ha reclamado que se convoque la
comisión del ruido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario