MADRID.- El ex diputado socialista Joaquín Leguina arremetió en su 'blog' contra la política hidráulica impulsada por el Gobierno socialista, que considera un "despropósito", y acusa a su presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, de "saquear" el Estado y de iniciar un viaje "disparatado" hacia "la rebatiña demagógica".
En un comentario de su página personal de Internet, Leguina critica que el Ejecutivo socialista haya propiciado que se pase de "el agua es de todos" a "el agua es mía y me la quedo yo", una consigna, ironiza, "mucho más adelantada y progresista". A su juicio, este viaje "disparatado" hacia "la rebatiña demagógica" ha convertido el agua "en bandera para crear banderías" bajo "la mirada irresponsable" de unos gobernantes a quienes el Estado "parece importarles una higa".
El ex dirigente socialista se lamenta de que, tras dos planes hidrográficos nacionales -uno impulsado por el PSOE y otro por el PP-, Zapatero llegue con su "España plural" y, "sin más trámite", decrete que los trasvases son "reaccionarios" y, "lo que es más disparatado", las desaladoras "progresistas" y que las cuencas pueden transferirse".
"El nuevo Estatuto de Andalucía expropió al resto de los españoles la cuenca del Guadalquivir; el Ebro se lo quedó Aragón y, ahora, Castilla-La Mancha, a través también de su Estatuto, pretende decretar motu propio el final del trasvase Tajo-Segura", lamenta.
Leguina cree que hace algunos años hubiera sido "inconcebible" que un Gobierno de España, "y más si era de izquierdas", hubiera propiciado "un desmantelamiento del Estado" como el que, a su juicio, se está asistiendo con Zapatero a propósito del agua.
"Lo diré claro: una izquierda, tan nueva como la actualmente reinante, que propicia o permite tales saqueos del Estado, será nueva, pero no es de izquierdas ni por el forro", concluye.
En un comentario de su página personal de Internet, Leguina critica que el Ejecutivo socialista haya propiciado que se pase de "el agua es de todos" a "el agua es mía y me la quedo yo", una consigna, ironiza, "mucho más adelantada y progresista". A su juicio, este viaje "disparatado" hacia "la rebatiña demagógica" ha convertido el agua "en bandera para crear banderías" bajo "la mirada irresponsable" de unos gobernantes a quienes el Estado "parece importarles una higa".
El ex dirigente socialista se lamenta de que, tras dos planes hidrográficos nacionales -uno impulsado por el PSOE y otro por el PP-, Zapatero llegue con su "España plural" y, "sin más trámite", decrete que los trasvases son "reaccionarios" y, "lo que es más disparatado", las desaladoras "progresistas" y que las cuencas pueden transferirse".
"El nuevo Estatuto de Andalucía expropió al resto de los españoles la cuenca del Guadalquivir; el Ebro se lo quedó Aragón y, ahora, Castilla-La Mancha, a través también de su Estatuto, pretende decretar motu propio el final del trasvase Tajo-Segura", lamenta.
Leguina cree que hace algunos años hubiera sido "inconcebible" que un Gobierno de España, "y más si era de izquierdas", hubiera propiciado "un desmantelamiento del Estado" como el que, a su juicio, se está asistiendo con Zapatero a propósito del agua.
"Lo diré claro: una izquierda, tan nueva como la actualmente reinante, que propicia o permite tales saqueos del Estado, será nueva, pero no es de izquierdas ni por el forro", concluye.
No hay comentarios:
Publicar un comentario