ALICANTE.- SabadellCAM destina ya el 40% del personal de sus
servicios centrales (311 trabajadores) a la unidad de gestión de
activos, una especie de 'banco malo' cuya denominación no gusta a su
presidente Josep Oliu pero que se dedica a sanear los activos
problemáticos, especialmente los procedentes del sector del ladrillo,
pero no únicamente.
Esta unidad, que está dirigida por Miquel Montes, el
propio director general de Sabadell, que se comercializa con la marca
SabadellCAM en la Comunitat Valenciana, Murcia y Baleares, fue anunciada
el pasado mes de julio, mucho antes de que el Gobierno, en el proceso
de reestructuración del sector financiero, obligara a los bancos
nacionalizados a ceder parte de su stock inmobiliario al banco malo,
denominado Sareb.
Los servicios centrales del SabadellCAM emplean a 800
personas después de que el nuevo propietario, tras la integración
definitiva consolidada el pasado 10 de diciembre, decidiera mantener
abiertas las oficinas de Óscar Esplá, San Fernando y Aguamarga. Este
último edificio ha sido conocido siempre como el búnker informático de
la extinta CAM. La unidad de activos de Alicante es la más importante
del nuevo grupo tras la de Barcelona y resultad de la fusión de las
capacidades de gestión inmobiliaria de Banco CAM, que tenía una filial
especializada (Mediterranean), que se integró también la filial
inmobiliaria de Banc Sabadell (Solvia).
Además, en Alicante también se ha creado un centro de
servicios con 288 trabajadores para los servicios operativos para la
totalidad del grupo en Alicante, con oficina institucional, comercios y
fraude de medios de pago, administración depositaría, control contable y
titulizaciones, bastanteos de escrituras de poderes, administración de
préstamos contenciosos, de prestamos particulares y de un centro de
atención multicanal.
Además, Sabadell ha decidido ya una unidad de
riesgo y banca de seguros con 100 personas y otra de tecnología e
innovación, integrada por otros 80 empleados. El área de gestión de
activos se convierte en la más relevante de todas. Así, Sabadell separa
su actividad financiera ordinaria de la gestión de inmuebles adjudicados
y problemáticos.
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