En una entrevista con la Agència Catalana de Notícies (ACN), Vilagrà ha argumentado que sería "muy peligroso" aplicar "prohibiciones" en según qué espacios en función de si se está vacunado o no. El Govern descarta así la vía lanzada por el presidente francés, Emmanuel Macron, que esta semana se mostró a favor de "joder" a los no vacunados y complicarles lo máximo posible cualquier actividad.
Cataluña acordó hace semanas requerir el pasaporte COVID para entrar en bares y restaurantes, si bien el control de la medida recae en los propios establecimientos y no se cumple a rajatabla.
El propio Govern, en su último informe enviado al Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) para pedir una prórroga del toque de queda, admitió que el certificado digital "no ha sido lo suficientemente efectivo para estabilizar la curva de contagios".
Vilagrà ha defendido que ya se hace "discriminación" en bares y restaurantes entre quienes tienen la pauta de vacunación completa y quienes no porque se trata de espacios en que "no se va con mascarilla y hay un cierto relajamiento social".
La consellera ha descartado ampliar el uso del certificado a otros ámbitos como la cultura y el lugar de trabajo, como sí ocurre en otros países europeos.
Para Vilagrà, "otros espacios escolares o de derechos fundamentales" no se pueden "limitar" a la gente que haya decidido no vacunarse. "Sería excesivo y se estaría tocando un aspecto medular de los derechos fundamentales", ha argumentado, al tiempo que ha defendido que el Govern ya incentiva la vacunación "desde un punto de vista social".
Sobre el toque de queda nocturno, Vilagrà ha subrayado que el ejecutivo es "consciente" de que se han "afectado" derechos fundamentales al detener la interacción social a partir de la una de la madrugada, y ha avanzado que el Govern "retirará" la medida "cuando la situación mejore".
No hay comentarios:
Publicar un comentario