PARÍS.- Dos años después de las 'revueltas de la hambruna' que habían sacudido a varios países en vías de desarrollo, el nuevo alza de los precios de los alimentos hace temer tensiones en las naciones pobres, como acaba de ocurrir en Argelia.
"La situación es extremadamente tensa y puede degenerar rápidamente", confió el responsable para Alimentación y Agricultura de Oxfam Francia, Jean-Denis Crola.
Los precios de los alimentos no han dejado de aumentar en los últimos seis meses.
El índice que mide las evoluciones de precio de una canasta de cereales, oleaginosos, productos lácteos, carne y azúcar se encuentra en su nivel más alto desde su creación en 1990, advirtió el miércoles la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Ese índice se estableció en 214,7 puntos en diciembre, por encima de los 213,5 puntos alcanzados en junio de 2008, año de la disparada de los precios alimentarios que habían desencadenado manifestaciones mortíferas contra el hambre y la inflación en una treintena de países del mundo, principalmente en África y Haití.
Esta alza es "muy preocupante porque afecta a millones de personas, sobre todo cuando concierne productos básicos como los cereales", declaró el viernes a AFP un economista de la FAO, Abdolreza Abbassian. El maíz, el trigo, el azúcar y la colza son los más afectados.
Para Abbassian, "la situación de los cereales no es tan crítica como en 2007/2008", pero no se pueden descartar "consecuencias más graves" en los próximos meses, en función del clima.
El clima caprichoso en muchos países productores, que afecta las cosechas, alimenta esta disparada de los precios.
Las inundaciones en Australia "degradaron seriamente la calidad de los cereales", explica la compañía especializada Agritel, que espera una explosión de los precios de trigo este año.
En Rusia, gran productor, los incendios del veranos pasado llevaron a las autoridades a decretar un embargo de sus exportaciones.
"Nos orientamos en este inicio del año 2011 hacia una continuación del alza de los precios de las materias primas agrícolas, alza alimentada también por la demanda china que no se debilita y por los temores de sequía que se perfilan ahora en Argentina", señaló Agritel.
Para las ONG, que lamentan la volatilidad de los precios, la disparada actual se acerca a la de la crisis de 2008.
"Las revueltas de 2008 pueden reproducirse porque a nivel local, los importadores aumentaron sus precios demasiado rápido (y) los alimentos constituyen la mayor parte del presupuesto de los pobres" afirma Crola.
Desde el 5 de enero, manifestaciones, a veces violentas, contras las alzas de precios de hasta 30% de ciertos productos de primera necesidad sacuden a Argelia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario