Alarte hizo estas declaraciones en una rueda de prensa que ofreció para presentar el informe elaborado por el PSPV 'La sanidad que nos esconden', en el que se analiza la situación de la sanidad valenciana, de la que también lamentó la "escasez de recursos".
En cuanto al presupuesto comprometido, el informe recoge que las anualidades futuras derivadas de los contratos de gestión integral de diversos departamentos de salud y la construcción del nuevo hospital La Fe suponen 639,9 millones en 2008; 469,8 en 2009; 328,5 en 2010; 276,1 en 2011; y 2.225,5 en años posteriores.
A estas cantidades, se suman los contratos de concesiones para la asistencia sanitaria del área de salud de Manieses, por 1.055,1 millones y de Elx-Crevillent por 974,8; además de las obligaciones no reconocidas del decreto de 20 de abril de 2007 (847,4 millones) y del 13 de junio de 2008 a pagar hasta 2015 (992,8 millones).
Alarte también criticó que el gasto farmacéutico "ha estallado" y "pone en evidencia la mala gestión" del Gobierno autonómico, puesto que supone el 28 por ciento del presupuesto sanitario de 2008 (siete puntos por encima que la media estatal). Esta cifra supone 319 euros al año por ciudadano, mientras que la media nacional es de 270 euros.
Además, resaltó que durante los años de gobierno de Francisco Camps, se ha dedicado a sanidad un 13,5 por ciento menos que la media del resto de autonomías (en términos absolutos son 4.274 millones menos en siete años) y se ha invertido 223 millones de euros menos de lo presupuestado en infraestructuras y tecnología.
Por ello, acusó al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, de "mentir y no tener entre sus prioridades la sanidad como un derecho básico y esencial".
En esta línea, lamentó que la ratio médico por habitante en la Comunitat Valenciana es de un facultativo por cada 1.903 habitantes, (sólo por delante de Baleares --2.112-- y Canarias --1.969--), mientras que en Galicia hay un médico por cada 1.465 habitantes; en Castilla y León uno por cada 1.476 y en Madrid uno por cada 1.701; por lo que consideró a Camps "el responsable de tener el peor dato de entre los peores de todas las comunidades gobernadas por el PP".
Igualmente, Alarte apuntó que "el número de camas del sistema sanitario público por 1.000 habitantes ha bajado de 2,20 en 1.997 a 1,88 en 2007 y apuntó que la Comunitat Valenciana, en 10 años, sólo se han construido 50 centros de Salud, que han pasado de 202 a 252 y en la provincia de Castellón ninguno.
Respecto a la situación de servicios de salud mental, afirmó que el "panorama en la Comunitat no podría ser más desalentador, puesto que son necesarias más de 16.000 plazas en centros de día, viviendas tuteladas y residenciales mixtas para este colectivo, y sólo se ofertan 2.200, que implica que haya "10 años de espera".
Por otro lado, criticó que la sanidad valenciana "va camino de la privatización total", con cinco departamentos que atienden a más de 872.000 personas con este sistema, un modelo que no comparte el PSPV por considerar que "no es más eficiente y no sirve para mejorar el derecho a una sanidad pública de calidad". Así, defendió "mayor control ciudadano y transparencia en la gestión de las actuales concesiones administrativas".