ALICANTE.- Una exempleada del despacho G&M, propiedad de Javier Gutiérrez, uno de los imputados en la pieza separada del caso Brugal, relativa al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), ha asegurado que durante el tiempo que ella trabajó como abogada urbanista en este despacho "nunca" vio en la empresa a José Luis Castedo, quien "no estuvo trabajando con Gutiérrez ni colaboraba" con él, al tiempo que ha indicado que tampoco se llevaron asuntos relacionados con el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).
La abogada, quien ha rechazado hablar con los medios de comunicación, ha entrado a declarar en torno a las 12.00 horas. Ha sido la segunda de los testigos y también la última, ya que tras la declaración, el letrado que había pedido su comparecencia ha renunciado a la declaración de la última testigo, una mujer que trabajó en la recepción de G&M.
Así, el abogado de Enrique Ortiz, Francisco Ruiz Marco, y José Sánchez Alarcos, letrado de los socios de Salvetti, José Luis Castedo --hermano de la alcaldesa de Alicante-- y Javier Gutiérrez --exconcejal socialista--, han indicado que la testigo ha rechazado la relación laboral entre Gutiérrez y José Luis Castedo durante el tiempo que ella trabajó en este despacho.
En este sentido, según han señalado, la abogada "ha dicho que en el tiempo que ella trabajó en el despachos de Gutiérrez no tuvo relación con José Luis Castedo, que en ese despacho todo el tiempo que ella trabajó no se llevaron asuntos relacionados con el PGOU, ni personlamente ni por otros miembros del despacho".
Según los abogados, el testimonio ha reflejado que José Luis Castedo "no estuvo trabajando con Gutiérrez ni colaboraba con su despacho mientras era técnico de la Conselleria de Infraestructuras", tal y como reflejaba el informe policial, que aportaba correos electrónicos presuntamente entre Gutiérrez y Castedo, antes de que fueran socios formalmente en Salvetti.
La extrabajadora de G&M, estuvo trabajando desde 2006 hasta febrero de 2008 como abogada de asuntos urbanísticos, ha asegurado además que no vio "nunca en el despacho ni al señor Ortiz, ni a Sonia Castedo, ni a Díaz Alperi".
Además, según fuentes judiciales, la testigo ha rechazado haber recibido presiones antes de su declaración. A este respecto, preguntados por los medios de comunicación, Ruiz Marco y Sánchez Alarcos han explicado que la que fuera empleada de Gutiérrez, recibió una llamada de éste, avisándola de que iba a ser llamada a declarar. Además, ha indicado que un concejal socialista del Ayuntamiento de Alicante también se le avisó de que iba a ser llamada a declarar.
Por otro lado, este miércoles también ha declarado el empresario y constructor, Luis Miguel Sirvent, en calidad de testigo. Sirvent, según fuentes cercanas a la investigación, ha reconocido las conversaciones con el empresario, Enrique Ortiz, aunque éstas se produjeron después de que el plan general saliera a exposición pública.
Igualmente, le han preguntado sobre la fundación de la sociedad Deproinmed y sus intereses en diversos suelos de la ciudad.
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