El diagnóstico lo ha clavado en su charla con “Viviana con vos” el clarividente Miguel Bosé, una referencia en esta crisis mundial de mentiras, “la narrativa se ha terminado” y Omicron tiene una “tasa de mortalidad de cero”.
Los propios autores intelectuales se baten en retirada: Bill Gates ya dice que esto se termina en 2022 y su mayordomo Tedros Adhanom saca la bola de cristal y apunta que en 2022 pasará la fase aguda.
Omicron, en efecto, no ha dado de sí lo esperado: se transmite con rapidez pero es exageradamente benigna. Incluso Israel enloquecido estudia parar la timo vacunación y dejar contagiarse a la población lo que hará al virus inofensivo, porque desde el minuto 0 Geert Vandem Bosche dijo que nunca se debía pinchar masivamente en plena pandemia o plandemia.
Ya pueden dejar de hacer el ridículo las “autoridades sanitarias” empeñadas en un tercer pìnchazo que, como dice la sabia Paz Padilla, “no sirven para nada” y cada vez más gente lo sabe y a millones dice que ni de coña se dejará engañar de nuevo. Hay que difundir la buena nueva: el timo agoniza, ha perdido fuerza, no tiene credibilidad, como no la tienen las televisiones, y abren grietas en el discurso oficial, en El Independiente. en La Razón y hasta en el inmundo publican que “Ómicron, la vacuna de los no vacunados que podría poner fin a la pandemia” y resumen que “los expertos creen que la rápida expansión de esta nueva variante podría ser el comienzo de la normalización”.
Esto no significa que se pueda cantar victoria pero el fracaso está a la vista. Seguirán con sus presiones, con sus restricciones, con sus medidas totalitarias de psicópatas, proponiendo la timo vacunación obligatoria, que será un fracaso sin paliativos en Austria, donde la resistencia es muy fuerte, como en el resto del mundo, como en África, como en España, donde la movilización es creciente, entusiasta y abrumadora, donde el día 2 será espectacular en Madrid, donde Valencia se ha portado, y Barcelona, y las tres capitales vascas y se ha empezado a organizar en Valladolid; donde la resistencia ha dado el do de pecho y soportando silencios del sistema lo ha hecho maravillosamente bien, sin apenas medios, para la movilización, que ha sido y está siendo masiva. No contaban los globalistas con esta resistencia para sus planes diabólicos, sin pies ni cabeza.
Que no desfallezca nadie, que no decaiga en el fragor tremendo del combate cotidiano, porque ya se ha vencido, la mentira es evidente y ubicua, y las “autoridades sanitarias” y los “expertos” y los “políticos” y las “prostitutas periodistas” están completamente desacreditados. No vamos a adelantar los tiempos, pero la narrativa ha llegado al fin, pierde fuerza por momentos, se desvanece y los gobiernos siguen, desgastados, por consigna y llegan hasta el nivel marrullero de hundir bares, restaurantes y discotecas con tal de utilizarlos para ver si cazan a algún no timo vacunado.
Pero si ya se han visto obligados a decir en el discurso oficial de propaganda que las inyecciones del veneno de muerte no evitan la transmisión ni el contagio, no evitan nada, infectan, “no sirven para nada”, como ha dicho en su media lengua Paz Padilla.
Los padres harían bien en proteger a sus hijos. Porque el problema son las timo vacunas y el daño provocado en los cuerpos, en forma de repentinitis, muertes súbitas crecientes, el fútbol convertido en deporte de altísimo riesgo y efectos a medio y largo plazo en forma de crueles enfermedades autoinmunes y esterilizaciones masivas.
Volviendo al maestro Miguel Bosé: han probado ya la manipulación, han roto los límites del holocausto y atacarán con otras cuestiones. El “calentamiento global” asoma. Han invertido mucho, un directivo de la CNN se ha ufanado y ha sido grabado con cámara oculta de que tienen preparado el arsenal manipulador, han creado a la patética Greta Thunberg, que es la primera que sale cuando pones Greta en Google, esa niñata mal criada por encima de la otrora divina Greta Garbo.
Pero ahora estamos mejor pertrechados para el combate, más inmunes a la manipulación, más llenos de fortaleza y de ira, más refractarios a la censura. La resistencia lo ha hecho y lo hace muy bien y el futuro lo bordará.
Sólo me queda felicitaros y recordar la celebrada frase de Abraham Lincoln, que el gran abogado José Luis Mazón Costa considera tan inexorable como la ley de la gravedad: “Se puede engañar a todo el pueblo durante un cierto tiempo, y a parte del pueblo todo el tiempo, pero no se puede engañar a todo el pueblo todo el tiempo”.
Aquí han engañado a parte del pueblo todo el tiempo, pero ya está bien de mentiras, de expertos a sueldo de Pfizer, de caciques sacando pecho, de médicos jugando a ser celebridades, ya está bien porque no han conseguido, ni conseguirán engañar a todo el pueblo todo el tiempo.
Con emoción, felicito a todos los purasangres, a toda la resistencia. ¡Enhorabuena! Sois los mejores!
(*) Periodista
ramblalibre.com/2022/01/01/carta-del-editor-la-narrativa-ha-terminado/
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