José Enrique Garrigós hizo estas declaraciones hoy en Alicante durante la rueda de prensa en la que presentó la 'Cumbre por la Exportación. Hacia una Empresa Global' que se celebrará en Alicante el próximo 13 de mayo en la OAMI, y que reunirá a expertos para "ofrecer al tejido empresarial las mejores estrategias para el mercado exterior". Asimismo, Garrigós adelantó que en esta Cumbre propondrá "medidas para aumentar la exportación" de la empresas.
Garrigós presentó un informe, realizado por el Gabinete de Estudios y División de Comercio de la Cámara de Comercio de Alicante, titulado 'Comercio Exterior; Diagnóstico y estrategias' sobre la exportación en la provincia de Alicante.
En este documento se refleja la exportación alicantina durante los últimos años ha sufrido "una pérdida de competitividad, que se refleja tanto en una menor cuota de la exportación provincial, como en una pérdida de la competitividad precio, debido tanto al diferencial de inflación respecto a los socios comerciales, como de la continua apreciación del euro que incide de forma negativa en los intercambios comerciales con países no pertenecientes al área del euro".
Garrigós destacó del informe que el sector exterior de la provincia de Alicante presenta "importantes debilidades estructurales", que hacen "ya no se pueda competir en precio", por lo que las empresas deben "potenciar la calidad del producto, la imagen de marca y el diseño".
Estas debilidades estructurales se ponen de manifiesto en la base exportadora reducida con la que cuenta la provincia, compuesta por unas 2.000 empresas exportadoras regulares, en una estructura empresarial compuesta mayoritariamente por pymes, en la especialización en bienes de intensidad tecnológica baja y mediabaja, en la alta concentración de la exportación en productos tradicionales expuestos a la competencia de las nuevas economías emergentes del Sudeste Asiático y Este de Europa, en la elevada concentración de la exportación en los mercados europeos, así como en la escasa presencia de los productos alicantinos en mercados con alto potencial, como China, Japón, Canadá o India.
De esta forma, para recuperar la competitividad, el informe recomienda "adoptar las medidas necesarias para frenar el aumento de los costes e incrementar la productividad", así como potenciar otros factores como "la calidad, la imagen de marca, el diseño, la innovación, la comercialización del producto, la atención al cliente, el servicio post-venta, es decir, ventajas basadas en el capital humano y tecnológico".
El informe presentado por la Cámara de Comercio destaca la "necesidad de llevar a cabo reformas estructurales en numerosos campos para aumentar la productividad", reformas que deben contemplar un avance en la liberalización e introducción de competencia en los mercados, profundizar en la liberalización de sectores regulados --energía, telecomunicaciones, transporte aéreo-- y posibilitar que exista una competencia efectiva en los servicios de interés general, así como mejorar la regulación y preservar la unidad de mercado, factores necesarios para garantizar la capacidad competitiva de la economía.
Estas reformas para aumentar la productividad propuestas en el informe incluyen el incremento de la inversión pública en infraestructuras, especialmente las de transporte, determinantes de la productividad y la competitividad; la atención prioritaria a la educación y formación profesional; el apoyo a la formación de capital tecnológico e innovación; la reforma laboral, la más importante para aumentar la productividad y cambiar el modelo de crecimiento; una amplia y global reforma fiscal, que reduzca el peso de la fiscalidad directa.
Así mismo, las Cámaras proponen reducir en tres puntos los tipos de las cotizaciones sociales a cargo de los empresarios, en el Impuesto de Sociedades eximir de tributación los beneficios reinvertidos y situar los tipos de este tributo en niveles similares a los de los países de nuestro entorno, así como modificar el sistema de liquidación del IVA para las pymes, pasando del principio del devengo al de caja.
Según el informe de la Cámara, las empresas necesitan instrumentos para impulsar y facilitar su proyección internacional, adaptados a sus características y necesidades. Instrumentos como información sobre los mercados internacionales y las oportunidades de negocio en el exterior, formación de profesionales en comercio exterior, programas de promoción comercial en mercados exteriores, apoyo a proyectos empresariales de exportación e inversión en el exterior, apoyo financiero para fomentar la exportación, a través de la venta y cooperación empresarial más allá de las fronteras españolas.
Según la institución cameral, se debería diseñar una oferta de servicios para la promoción exterior que optimice los ya existentes y los adapte a las necesidades actuales del tejido empresarial español.
Asimismo, pide la Cámara "una mejor coordinación" entre los organismos implicados en promoción para "aumentar su eficacia", y alejarse así de su actual "disparidad de criterios".
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