La localidad lleva meses con datos optimistas tanto en este registro como con la demanda de empleo, aunque ambos no entran al detalle de las condiciones de trabajo de la población local.
Benidorm registró en el mes de febrero 28.012 personas dadas de alta en la Seguridad Social, esto es, 1.857 más en un mes. Una cifra parecida a la que se publicó para febrero del año pasado, cuando eran 26.161 afiliados, incrementándose de un año a otro en un 7,08%.
El régimen general es el que más crece, pasando de 21.108 a 22.826 -en comparación a hace un año-. En esta base entran trabajadores por cuenta ajena de la industria y los servicios, de sociedades mercantiles capitalistas, socios trabajadores de las sociedades laborales, conductores, etc.
Por su parte, los autónomos también son más, 4.933 en total, es decir, 150 más que en 2023. Todo ello en un mes de los más flojos a nivel turístico, que es la principal actividad económica de la ciudad. Y a la espera de conocer los datos de marzo, cuando tendrá lugar la Semana Santa, periodo vacacional que tira de la ocupación hotelera y de las visitas de proximidad a la localidad.
De la mano van los indicadores de desempleo, donde cada vez hay menos demandantes. Aunque en este caso es una incógnita el motivo mayoritario por el que dejan de buscar trabajo, ya bien sea por haber encontrado empleo o por otros motivos como haber desistido, cambio de municipio, etc.
Con todo, el total de demandantes se sitúa en 3.755 personas, por debajo de los 3.903 de hace un mes y los 4.556 registrados en febrero de 2023.
El sector servicios sigue siendo el más solicitado con 3.337 personas, esto es el 88,87% del total. Siguiendo con la comparación de hace un mes y hace un año, para el primero son 144 menos y 746 para el segundo.
En cuanto al perfil, la mujer sigue siendo la que más paro tiene, unas 800 más que hombres. Los que superan los 44 años son lo más numerosos: 2.387 del total. Y la nacionalidad, 2.806 son españoles frente a los 949 extranjeros.
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