Pero la CAM tiene otro frente interno abierto. En el Consejo de Administración hay un fuerte malestar con su presidente, Modesto Crespo, al que se considera el único beneficiado en la negociación de las condiciones del SIP, recuerda hoy 'El País'.
La CAM pactó una participación en el SIP del 40%, la misma que Cajastur, mientras que Caja Extremadura supondrá el 11% y el 9% restante Caja Cantabria. Unos porcentajes que se reflejarán en los nombramientos de los 12 miembros del futuro Consejo de Administración. El presidente de la nueva entidad sería Modesto Crespo y el consejero delegado Manuel Menéndez.
El acuerdo incluyó que Menéndez y Crespo ocuparan sus puestos seis años prorrogables a otros tantos, salvo que el Consejo decida lo contrario por unanimidad. Esta condición, con el equilibrio de poderes previsto, blinda en la práctica la presidencia de Crespo en la que será la tercera caja de ahorros española y la quinta entidad financiera.
Pero además, el acuerdo también prevé que Menéndez tenga la potestad de nombrar al equipo directivo de la nueva entidad hasta el segundo nivel, lo que incluye al actual director general de la CAM, Roberto López, que en el proceso negociador se ha perfilado como uno de los dos futuros directores generales.
Modesto Crespo fue designado para la presidencia de la CAM en junio del año pasado y cuenta con el respaldo del presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, del PP, cuya ausencia en todo el proceso de fusiones vivido por las cajas de ahorros ha recibido numerosas críticas.
El próximo lunes, previsiblemente, se celebrará la reunión de Consejo de Administración de la CAM que debe fijar la postura definitiva de la caja sobre el SIP, según aseguraban ayer fuentes financieras.
Las mismas fuentes advierten de que aunque en este foro pueda expresarse el malestar existente con Crespo, será en la asamblea general prevista para el próximo mes de septiembre cuando las discrepancias con su gestión se materializarán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario