En el transcurso de su comparecencia hoy ante el titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Alicante, la psicóloga explicó que no vio ni examinó a los pequeños para realizar el informe del caso, sino que recogió en este documento los testimonios de los padres.
Este informe, que se realizó conforme al protocolo previsto para este tipo de situaciones, fue el que los padres de los menores aportaron ante la Guardia Civil para presentar la denuncia contra los monitores del servicio de comedor, como presuntos autores de los abusos.
La Guardia Civil abrió una investigación el pasado mes de noviembre tras recibir una primera denuncia de una de las madres del centro que observó una mancha "sospechosa" en la ropa interior de su hija, quien en un primer momento negó haber sido víctima de ningún abuso.
No obstante, ante la insistencia de su familia, la menor explicó que "otros niños, delante de una persona mayor, le habían realizado tocamientos", recordaron fuentes cercanas al caso. Tras esta primera familia, otras siete más de escolares del centro presentaron también denuncias por los mismos hechos.
Las fuerzas de seguridad realizaron diversas indagaciones, y detuvieron a cuatro de los cuidadores del servicio de comedor --todos ellos varones con edades comprendidas entre los 20 y los 30 años, como presuntos autores de abusos a menores--, quienes posteriormente quedaron en libertad, imputados en la causa.
Durante la jornada de hoy, las partes personadas en el caso tuvieron conocimiento de que la exploración, practicada por otro psicólogo de la Guardia Civil a esta primera niña, revelaba que la pequeña decía que había recibido tocamientos de una persona, cuyo nombre no responde al de ninguno de los acusados.
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