ALICANTE.- El ex líder del PP valenciano, y portavoz popular en el Congreso, Eduardo Zaplana, ha sido durante los últimos años protagonista de la cena de verano convocada por el PP de la provincia de Alicante.
La cita era interpretada tradicionalmente como una cierta demostración de fuerza hacia la ejecutiva regional. De hecho, los dirigentes populares afines a Zaplana no se perdían esa cena, y en cambio ponían bastantes más dificultades a la hora de acudir a la convocada por la ejecutiva regional.
Hace más o menos un año, el 22 de julio de 2006, se produjo esa misma instantánea. Con el parque de Benidorm Terra Mítica por escenario, el portavoz popular reunió a unas 3.000 personas –según afirman las crónicas– junto al presidente provincial, José Joaquín Ripoll, y otros dirigentes populares afines a sus tesis.
Las circunstancias que atravesaba el PP en ese momento eran muy distintas a las actuales. Entre otras razones, porque el partido se encaraba al casi siempre traumático proceso de elaboración de las candidaturas electorales. Zaplana no dejó pasar la oportunidad de enviar un mensaje a la ejecutiva regional y subrayó la conveniencia de contar con todos a la hora de hacer las listas.
¿Qué ha cambiado desde entonces? Mucho. Entre otras cosas, porque se han producido unas elecciones municipales y autonómicas que han terminado por barrer cualquier intento de pulso a Francisco Camps. Batir los récords de número de votos y de porcentaje de apoyos constituye el mejor antídoto para ese tipo de movimientos orgánicos. De hecho, el partido vuelve a estar en vísperas de otra cita electoral –la de las generales que previsiblemente se celebrarán en marzo– y por lo tanto, se ve obligado a afrontar un nuevo proceso de elaboración de listas. Pero con un matiz significativo: el principal interesado ahora es el propio Zaplana, y todo apunta a que no formará parte de las candidaturas del PP valenciano.
De modo que este año, Zaplana no acudirá a la tradicional cena de verano de la ejecutiva provincial de Alicante –quizá lo haga a algunas otras, pero no a esa– porque no se ha convocado. De hecho, lo habitual es convocar ese tipo de cenas el mes de julio, para aprovechar que la mayoría de cuadros del partido aún no se han marchado de vacaciones.
De esta forma, la única cena de verano convocada, al menos por ahora, en el PP, es la que también de forma tradicional organiza la ejecutiva regional, y que este año se producirá el 31 de agosto en Elda. A la cita tiene previsto acudir, además del presidente del PP valenciano, Francisco Camps, el coordinador nacional del programa electoral, Juan Costa. Fuentes de la dirección provincial del partido señalaron ayer que responsables de esa ejecutiva también acudirán a esa cena, que debe marcar el arranque del curso político y, debido a la próxima convocatoria electoral, también el de la campaña electoral para las generales.
La no convocatoria de cenas paralelas en la provincia de Alicante refleja hasta qué punto los resultados del 27-M se han convertido en el mejor antídoto para resolver las discrepancias existentes en el seno del PP valenciano desde el arranque de la pasada legislatura.
www.lasprovincias.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario