Este estudio sobre comercio exterior de la Cámara hace un análisis de los datos recogidos durante los últimos 20 años y detecta las debilidades estructurales del modelo alicantino y servirá como base para la 'Cumbre por la Exportación. Hacia la Empresa Global', que se celebrará en Alicante el próximo 13 de mayo.
La especialización de las empresas exportadoras de la provincia en bienes de intensidad tecnológica baja y media-baja se describe como una "debilidad estructural" en el estudio de la Cámara.
En este sentido, advierte que, aunque tradicionalmente las exportaciones alicantinas ofrecían en el exterior ventajas competitivas vía precios, en la actualidad otros países manufactureros producen a costes más bajos, como las economías emergentes del Sudeste Asiático y el este de Europa.
Así, en el conjunto de exportaciones españolas, las producciones de contenido tecnológico bajo son el 19,7 por ciento y las de contenido medio-bajo, el 22,8 por ciento.
El saldo de la balanza comercial de España es negativo, mientras que el de Alicante es positivo, --de modo que las exportaciones superan a las importaciones--, según recordaron las mismas fuentes.
No obstante, en 2009 la exportación descendió un 7,7 por ciento respecto al año anterior, y en los últimos años el diferencial entre los pesos relativos de exportaciones e importaciones se "ha reducido significativamente", por lo que el superávit comercial se ha visto mermado.
Otra debilidad estructural importante del modelo exportador de la provincia es "su reducida base exportadora", apenas compuesta por 2.000 empresas --el 99 por ciento de ella pymes--, lo que supone un 1,5 por ciento del total.
Además, la producción que se exporta se concentra en productos tradicionales, también expuestos a la competencia de economías emergentes, con el calzado que representa el 24 por ciento de las ventas exteriores de las empresas alicantinas.
Por su parte, los productos hortofrutícolas, el 12,8 por ciento; el porcentaje de participación de la industria del textil-confección es del 7,6 por ciento, y el de los productos de la industria agroalimentaria, del 4,5 por ciento.
El estudio, también señala como debilidades la elevada concentración de la exportación en los mercados europeos y la escasa presencia de productos alicantinos en mercados con alto potencial como China, Japón, Canadá, India u otros. La UE-27 concentra el 66,5 por ciento de las exportaciones, y la zona euro el 55,8 por ciento.
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