Desde hace poco más de una semana, la variante Omicron es el nuevo Enemigo Público Global No. 1, causando una feroz ráfaga de pánico en los gobiernos y los medios de comunicación.
Varias pistas nos llevan a pensar que esta variante de Omicron debería, en lugar de preocuparnos, hacernos felices .
No es provocación; es observación y lógica.
Este es el por qué.
¿No te sorprende la reacción de los laboratorios?
Tan pronto como se identificó la variante Omicron, el gigante farmacéutico Pfizer dijo que estaba trabajando en una nueva versión de su vacuna que le permitiría apuntar a un objetivo más específico [1].
La increíble velocidad de este anuncio, sujeto a "evaluación de la eficacia de su vacuna actual", ¿no les sorprende?
Por mi parte, lo encuentro muy elocuente, en varios sentidos.
La primera es que obviamente es una admisión apenas disfrazada de que Omicron escapa a la inmunidad adquirida con las vacunas anti-Covid .
Un "escape inmune" que el jefe de Moderna, productor de una de estas vacunas, tuvo la honestidad de reconocer de manera más explícita [2]:
Esta es la lógica misma:
primero porque sabemos que las vacunas actuales, que se dirigieron a la cepa original de SARS-CoV-2, ya son menos efectivas contra la variante delta (la que actualmente circula principalmente en Europa, pero no por mucho tiempo, vuelvo), y por lo tanto el riesgo de ser "abandonado" frente a Omicron, que incluye una gran cantidad de mutaciones sin precedentes; en segundo lugar, porque en Sudáfrica, una de cada dos personas infectadas con Omicron está vacunada ... ¡ mientras que menos de uno de cada cuatro ciudadanos del país está vacunado ! Todo indica que los vacunados están más expuestos a su contaminación .
También podemos ver en estos anuncios muy rápidos de estos laboratorios un deseo de tranquilizar al mundo: ¡sí, responderán caballerescamente presentes para salvarnos a todos! ...
Obviamente eres libre de creerlo… y también libre de verlo, por el contrario, un posicionamiento agresivo en el potencial "mercado" futuro de las dosis de vacunas anti-Omicron.
Pero por mi parte, creo que esta celeridad, esta prisa, incluso, esconde una preocupación por parte de estos laboratorios , que debería ser un signo de esperanza para nosotros .
¿Dónde están los pacientes de Omicron?
Desde que Omicron hizo su sensacional debut en el escenario mundial, los periódicos han titulado complacientemente: su extremo contagio; los primeros casos identificados en Europa;
el pánico que está creando en todas partes: las vacaciones de Navidad están en peligro, las estaciones de esquí al borde de la quiebra, los Juegos Olímpicos de Invierno ...
Si bien.
Pero, ¿ ha oído hablar de los pacientes con variantes de Omicron?
¿De las hospitalizaciones que ha causado?
¿De las muertes que ha causado?
No . Es muy simple: ¡no hay ninguno!
El pánico que genera Omicron se debe, por tanto, a una variante hipercontagiosa, hiperimpredecible, que se escapa diabólicamente de las vacunas… y que no causa víctimas graves .
Esto confirma lo que les escribí anteriormente: Omicron está siguiendo el “camino real” evolutivo de un virus que quiere que sea cada vez más contagioso y cada vez menos peligroso .
Y eso… los laboratorios lo entendieron.
La carrera contra el tiempo no es lo que crees que es
Omicron ya está identificado en Europa. QUIÉN teme que se propague como la pólvora.
¡Pero es muy bueno! ¡¡Déjalo esparcir !!
Porque esta variante, como la Delta anterior, irá convirtiendo gradualmente a las otras cepas en minoría ; ahora que es mejor
¿Una variante Delta dominante que sigue provocando hospitalizaciones graves? ...
… ¿O una variante Omicron dominante (después de haber “suplantado” a Delta) que solo causa hospitalizaciones raras ?
Estoy hablando, por supuesto, sujeto a la confirmación de que la variante Omicron solo causa síntomas leves para la inmensa mayoría de la población.
Si esto se confirma, y lo digo con mucha precaución: tenemos mucho que ganar con la propagación de Omicron , y esto es lo más probable que suceda, ya que todo indica que escapa a la inmunidad de la vacuna.
No es provocación; es observación y lógica.
Este es el por qué.
¿No te sorprende la reacción de los laboratorios?
Tan pronto como se identificó la variante Omicron, el gigante farmacéutico Pfizer dijo que estaba trabajando en una nueva versión de su vacuna que le permitiría apuntar a un objetivo más específico [1].
La increíble velocidad de este anuncio, sujeto a "evaluación de la eficacia de su vacuna actual", ¿no les sorprende?
Por mi parte, lo encuentro muy elocuente, en varios sentidos.
La primera es que obviamente es una admisión apenas disfrazada de que Omicron escapa a la inmunidad adquirida con las vacunas anti-Covid .
Un "escape inmune" que el jefe de Moderna, productor de una de estas vacunas, tuvo la honestidad de reconocer de manera más explícita [2]:
Esta es la lógica misma:
primero porque sabemos que las vacunas actuales, que se dirigieron a la cepa original de SARS-CoV-2, ya son menos efectivas contra la variante delta (la que actualmente circula principalmente en Europa, pero no por mucho tiempo, vuelvo), y por lo tanto el riesgo de ser "abandonado" frente a Omicron, que incluye una gran cantidad de mutaciones sin precedentes; en segundo lugar, porque en Sudáfrica, una de cada dos personas infectadas con Omicron está vacunada ... ¡ mientras que menos de uno de cada cuatro ciudadanos del país está vacunado ! Todo indica que los vacunados están más expuestos a su contaminación .
También podemos ver en estos anuncios muy rápidos de estos laboratorios un deseo de tranquilizar al mundo: ¡sí, responderán caballerescamente presentes para salvarnos a todos! ...
Obviamente eres libre de creerlo… y también libre de verlo, por el contrario, un posicionamiento agresivo en el potencial "mercado" futuro de las dosis de vacunas anti-Omicron.
Pero por mi parte, creo que esta celeridad, esta prisa, incluso, esconde una preocupación por parte de estos laboratorios , que debería ser un signo de esperanza para nosotros .
¿Dónde están los pacientes de Omicron?
Desde que Omicron hizo su sensacional debut en el escenario mundial, los periódicos han titulado complacientemente: su extremo contagio; los primeros casos identificados en Europa;
el pánico que está creando en todas partes: las vacaciones de Navidad están en peligro, las estaciones de esquí al borde de la quiebra, los Juegos Olímpicos de Invierno ...
Si bien.
Pero, ¿ ha oído hablar de los pacientes con variantes de Omicron?
¿De las hospitalizaciones que ha causado?
¿De las muertes que ha causado?
No . Es muy simple: ¡no hay ninguno!
El pánico que genera Omicron se debe, por tanto, a una variante hipercontagiosa, hiperimpredecible, que se escapa diabólicamente de las vacunas… y que no causa víctimas graves .
Esto confirma lo que les escribí anteriormente: Omicron está siguiendo el “camino real” evolutivo de un virus que quiere que sea cada vez más contagioso y cada vez menos peligroso .
Y eso… los laboratorios lo entendieron.
La carrera contra el tiempo no es lo que crees que es
Omicron ya está identificado en Europa. QUIÉN teme que se propague como la pólvora.
¡Pero es muy bueno! ¡¡Déjalo esparcir !!
Porque esta variante, como la Delta anterior, irá convirtiendo gradualmente a las otras cepas en minoría ; ahora que es mejor
¿Una variante Delta dominante que sigue provocando hospitalizaciones graves? ...
… ¿O una variante Omicron dominante (después de haber “suplantado” a Delta) que solo causa hospitalizaciones raras ?
Estoy hablando, por supuesto, sujeto a la confirmación de que la variante Omicron solo causa síntomas leves para la inmensa mayoría de la población.
Si esto se confirma, y lo digo con mucha precaución: tenemos mucho que ganar con la propagación de Omicron , y esto es lo más probable que suceda, ya que todo indica que escapa a la inmunidad de la vacuna.
Pero luego, ¿la tercera dosis?
Quizás ahora tenga una comprensión diferente de la rapidez con la que los laboratorios han "reaccionado".
Porque, si Omicron efectivamente se convierte en la variante dominante, la tercera dosis ya no tiene ningún significado ya que esta nueva variante escapa a la inmunidad de las vacunas en su forma actual .
Pero hay peores (para los laboratorios) o mejores (para nosotros):
Es que si tenemos la confirmación de que Omicron, aunque se propague como la pólvora, apenas provoca alguna forma grave - bueno, mecánicamente es el "fin" de la crisis sanitaria .
No más saturación de hospitales,
no más número de muertos que provocan ansiedad,
más vacuna para "prevenir formas graves", ya no pasa la salud para "contener la epidemia".
La versión de OMicron SARS-CoV-2 tendrá la “letalidad” de otros coronavirus implantados durante mucho tiempo en nosotros, y en el origen de… resfriados.
Y no vacunamos contra los resfriados.
Esto solo sucederá en dos condiciones:
que Omicron sea confirmado y reconocido como una variante hipercontagiosa pero benigna ; que nosotros, los ciudadanos, tenemos la inteligencia para darnos cuenta de esto, y no ceder a este chantaje por el miedo ya dudoso instalado en la parte posterior de la ola del Delta .
Y aquí es donde los laboratorios tienen todo el interés de seguir navegando sobre la emergencia, y sobre el miedo al contagio Omicron: esto es porque a medio plazo, cualquier vacuna será definitivamente inútil: ya que no impide la circulación del virus (ya es el caso);
y que no previene el desarrollo de formas graves… inexistentes o extremadamente raras con Omicron.
La última nota cínica sería considerar que hay que seguir vacunando "por precaución", "por si acaso", jugando con el efecto todavía aterrador del término "Covid" ... ¿Pero quién se lo volverá a tragar?
Dados los acontecimientos de los últimos meses, ya no me atreveré a confiar en el sentido común de todos en esta área de reacción epidérmica que es el Covid.
Pero al menos recordemos eso: el covid de Omicron está solo lejanamente relacionado con el Covid original, el objetivo de las vacunas: no tiene, por lo que sabemos hasta ahora, ni los mismos síntomas, ni el mismo contagio, ni la misma virulencia.
Si efectivamente ocupa el “nicho ecológico” de la variante Delta, actualmente en el origen de la quinta ola, esto significará una disminución significativa de la peligrosidad atribuida al “Covid”.
Que esto no nos impide, por supuesto, cuidar nuestra inmunidad natural, recurriendo en particular a las vitaminas C y D.
Quizás ahora tenga una comprensión diferente de la rapidez con la que los laboratorios han "reaccionado".
Porque, si Omicron efectivamente se convierte en la variante dominante, la tercera dosis ya no tiene ningún significado ya que esta nueva variante escapa a la inmunidad de las vacunas en su forma actual .
Pero hay peores (para los laboratorios) o mejores (para nosotros):
Es que si tenemos la confirmación de que Omicron, aunque se propague como la pólvora, apenas provoca alguna forma grave - bueno, mecánicamente es el "fin" de la crisis sanitaria .
No más saturación de hospitales,
no más número de muertos que provocan ansiedad,
más vacuna para "prevenir formas graves", ya no pasa la salud para "contener la epidemia".
La versión de OMicron SARS-CoV-2 tendrá la “letalidad” de otros coronavirus implantados durante mucho tiempo en nosotros, y en el origen de… resfriados.
Y no vacunamos contra los resfriados.
Esto solo sucederá en dos condiciones:
que Omicron sea confirmado y reconocido como una variante hipercontagiosa pero benigna ; que nosotros, los ciudadanos, tenemos la inteligencia para darnos cuenta de esto, y no ceder a este chantaje por el miedo ya dudoso instalado en la parte posterior de la ola del Delta .
Y aquí es donde los laboratorios tienen todo el interés de seguir navegando sobre la emergencia, y sobre el miedo al contagio Omicron: esto es porque a medio plazo, cualquier vacuna será definitivamente inútil: ya que no impide la circulación del virus (ya es el caso);
y que no previene el desarrollo de formas graves… inexistentes o extremadamente raras con Omicron.
La última nota cínica sería considerar que hay que seguir vacunando "por precaución", "por si acaso", jugando con el efecto todavía aterrador del término "Covid" ... ¿Pero quién se lo volverá a tragar?
Dados los acontecimientos de los últimos meses, ya no me atreveré a confiar en el sentido común de todos en esta área de reacción epidérmica que es el Covid.
Pero al menos recordemos eso: el covid de Omicron está solo lejanamente relacionado con el Covid original, el objetivo de las vacunas: no tiene, por lo que sabemos hasta ahora, ni los mismos síntomas, ni el mismo contagio, ni la misma virulencia.
Si efectivamente ocupa el “nicho ecológico” de la variante Delta, actualmente en el origen de la quinta ola, esto significará una disminución significativa de la peligrosidad atribuida al “Covid”.
Que esto no nos impide, por supuesto, cuidar nuestra inmunidad natural, recurriendo en particular a las vitaminas C y D.
(*) Escritor
[1] Franceinfo. (29.11.2021). Variante de Omicron: el laboratorio de Pfizer ha iniciado una investigación para producir una versión eficaz de la vacuna Covid-19. https://www.francetvinfo.fr/sante/maladie/coronavirus/vaccin/omicron-pfizer-a-deja-commence-a-travailler-sur-une-version-du-vaccin-anti-covid-contre-ce- variant_4863541.html
[2] Ouest-France. (30.11.2021). Se espera que la variante Omicron haga que las vacunas actuales sean menos efectivas, según el jefe de Moderna. https://www.ouest-france.fr/sante/vaccin/le-variant-omicron-devrait-rendre-les-vaccins-actuels-roits-efficaces-selon-le-patron-de-moderna-59f8d5bc-51a9- 11ec-8e47-dc859594d424
[3] Ladepeche.fr. (30.11.2021). Omicron: 10 preguntas (y las primeras respuestas) sobre esta nueva variante amenazante. https://www.ladepeche.fr/2021/11/29/omicron-10-questions-et-les-premieres-reponses-sur-ce-nouveau-variant-menacant-9959544.php
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