MADRID.- El astillero alemán Blojm+Voss
construyó a este coloso de los mares en 1990. Su actual propietario es
el médico y magnate saudí Nasser Al.Rasheed cuya fortuna neta se estima
en 20.000 millones de euros, según publica Abc.
El Lady Moura
ha atracado el pasado fin de semana en la cuidad alicantina de Denia y a
su alrededor ha reunido a una variopinta multitud armada con
smartphones para fotografiar al yate, el más grande que jamás ha acogido su puerto.
El noveno buque de recreo más grande del mundo está valorado en 200 millones de euros y sus 104 m de eslora y 18 de manga lo archivan en la categoría de "gigayate" .
Está dividido en cuatro cubiertas que ofrecen privacidad, espacio y lujo a los 30 pasajeros y 61 miembros de tripulación que pueden viajar a bordo.
El barco suele reposar en los puertos más lujosos del mediterráneo porque no todos tienen la infraestructura necesaria para acoger a barcos de semejante envergadura. Durante el verano se distinguió a la embarcación en aguas de Ibiza, Málaga, Saint Tropez, Mónaco y Cannes, un destino habitual del Lady Moura, en especial durante el festival de cine.
El noveno buque de recreo más grande del mundo está valorado en 200 millones de euros y sus 104 m de eslora y 18 de manga lo archivan en la categoría de "gigayate" .
Está dividido en cuatro cubiertas que ofrecen privacidad, espacio y lujo a los 30 pasajeros y 61 miembros de tripulación que pueden viajar a bordo.
El barco suele reposar en los puertos más lujosos del mediterráneo porque no todos tienen la infraestructura necesaria para acoger a barcos de semejante envergadura. Durante el verano se distinguió a la embarcación en aguas de Ibiza, Málaga, Saint Tropez, Mónaco y Cannes, un destino habitual del Lady Moura, en especial durante el festival de cine.
Port Dénia acaba de anunciar que el El Lady Moura pasará el invierno en la ciudad.
El puerto es apropiado para el yate, que aprovechará sus servicios de
varadero y litera. La institución ha comunicado en sus redes sociales
que es la embarcación más lujosa a la que ha dado cobijo en su historia.
Aunque la bandera que ostenta el barco corresponde a Las Bahamas, su amarre habitual del navío es Palma de Mallorca, por eso es habitual verlo navegar en aguas mediterráneas . A diferencia de otros buques privados de lujo, éste no está disponible para el alquiler , esa es una de las principales razones por las que se recomienda a los amantes de la náutica acercarse a levante para contemplarlo, dado que este año su propietario hace una excepción apostando por la península.
La ostentación se lee en el exterior del navío, diseñado por el Sturchio Luigui. El impoluto blanco es su seña de identidad, toda la embarcación está bañada en este color, solo se rompe con el nombre y el escudo del navío, firmado en oro de 18 quilates.
La estructura del barco está construida en acero y aluminio cubiertos de teca. Lo propulsan dos motores diésel de 6.900 caballos de potencia que le dan una velocidad de 20 nudos. El buque, por otro lado, integra un sistema muy novedoso para compensar los pesos que reduce de forma notable el posible balanceo en los viajes.
Aunque el barco, que se entregó hace casi 30 años, se sometió a una renovación completa en 2007 que lo mantiene a la vanguardia en el sector. Sus interiores, también renovados, están repletos de mobiliario de lujo, obras de arte y piezas únicas.
Una de sus cualidades distintivas son sus esclusas y compuertas mecanizadas y automatizadas mediante sistemas hidráulicos. Desde la distancia se puede ver cómo estas compuertas se elevan o descienden desde los laterales.
Con respecto a su interior, el Lady Moura cuenta con 15 espaciosas suites para acomodar tanto a su propietario como a sus invitados, un pequeño spa, casino, sala de fiestas, club de playa, piscinas, comedores y salones de estar y un quirófano completamente equipado, un hangar repleto de lanchas y otros "juguetes" de alta mar y, en la cubierta superior, un helipuerto.
Aunque la bandera que ostenta el barco corresponde a Las Bahamas, su amarre habitual del navío es Palma de Mallorca, por eso es habitual verlo navegar en aguas mediterráneas . A diferencia de otros buques privados de lujo, éste no está disponible para el alquiler , esa es una de las principales razones por las que se recomienda a los amantes de la náutica acercarse a levante para contemplarlo, dado que este año su propietario hace una excepción apostando por la península.
La ostentación se lee en el exterior del navío, diseñado por el Sturchio Luigui. El impoluto blanco es su seña de identidad, toda la embarcación está bañada en este color, solo se rompe con el nombre y el escudo del navío, firmado en oro de 18 quilates.
La estructura del barco está construida en acero y aluminio cubiertos de teca. Lo propulsan dos motores diésel de 6.900 caballos de potencia que le dan una velocidad de 20 nudos. El buque, por otro lado, integra un sistema muy novedoso para compensar los pesos que reduce de forma notable el posible balanceo en los viajes.
Aunque el barco, que se entregó hace casi 30 años, se sometió a una renovación completa en 2007 que lo mantiene a la vanguardia en el sector. Sus interiores, también renovados, están repletos de mobiliario de lujo, obras de arte y piezas únicas.
Una de sus cualidades distintivas son sus esclusas y compuertas mecanizadas y automatizadas mediante sistemas hidráulicos. Desde la distancia se puede ver cómo estas compuertas se elevan o descienden desde los laterales.
Con respecto a su interior, el Lady Moura cuenta con 15 espaciosas suites para acomodar tanto a su propietario como a sus invitados, un pequeño spa, casino, sala de fiestas, club de playa, piscinas, comedores y salones de estar y un quirófano completamente equipado, un hangar repleto de lanchas y otros "juguetes" de alta mar y, en la cubierta superior, un helipuerto.
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