ALICANTE.- La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a
un funcionario del Ayuntamiento de Alicante a una pena de ocho meses de
prisión y a su suspensión como trabajador público, mientras dure la
condena, por gastarse 1.800 euros en poner gasolina en su coche con una
tarjeta del consistorio.
La sentencia, dada a conocer este miércoles por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), confirma así la condena impuesta por el Juzgado de lo Penal número 3 por un delito de malversación contra un funcionario que se gastó, sin autorización, 1.829,74 euros en carburante para su vehículo particular desde diciembre de 2011 hasta septiembre de 2012.
Así, la Sala desestima el recurso de apelación interpuesto por el funcionario que consideraba que se había vulnerado el principio de presunción de inocencia y considera probado que el mecánico municipal, adscrito al parque móvil del Ayuntamiento desde 1994, aprovechando que por su empleo tenía acceso a las tarjetas de carburante que se utilizaban para repostar los vehículos oficiales, utilizó una de ellas, sin ningún tipo sin autorización, para llenar de gasolina el depósito de su vehículo particular en una gasolinera de El Campello, principalmente durante los fines de semana.
El mecánico ha sido condenado como responsable de un delito de estafa a ocho meses de prisión y a la inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo y a la suspensión de empleo o cargo público durante el tiempo de la condena.
Asimismo, el acusado deberá de indemnizar Ayuntamiento de Alicante, con un importe de 1.829,74 euros y a abonar las costas del procedimiento, incluidas las de la acusación particular.
La sentencia, dada a conocer este miércoles por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), confirma así la condena impuesta por el Juzgado de lo Penal número 3 por un delito de malversación contra un funcionario que se gastó, sin autorización, 1.829,74 euros en carburante para su vehículo particular desde diciembre de 2011 hasta septiembre de 2012.
Así, la Sala desestima el recurso de apelación interpuesto por el funcionario que consideraba que se había vulnerado el principio de presunción de inocencia y considera probado que el mecánico municipal, adscrito al parque móvil del Ayuntamiento desde 1994, aprovechando que por su empleo tenía acceso a las tarjetas de carburante que se utilizaban para repostar los vehículos oficiales, utilizó una de ellas, sin ningún tipo sin autorización, para llenar de gasolina el depósito de su vehículo particular en una gasolinera de El Campello, principalmente durante los fines de semana.
El mecánico ha sido condenado como responsable de un delito de estafa a ocho meses de prisión y a la inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo y a la suspensión de empleo o cargo público durante el tiempo de la condena.
Asimismo, el acusado deberá de indemnizar Ayuntamiento de Alicante, con un importe de 1.829,74 euros y a abonar las costas del procedimiento, incluidas las de la acusación particular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario