En una concurrida comparecencia ante los medios de comunicación, Barberá se negó a comentar lo publicado el domingo por el diario El País: que el cabecilla de la vertiente valenciana de la presunta trama corrupta relacionada con políticos del PP, Álvaro Pérez (alias 'El Bigotes'), afirma en una conversación grabada por la policía que ha regalado a la alcaldesa varios bolsos de la marca de lujo Louis Vuitton.
Barberá opinó que hay una intención de vincular su nombre al caso y que por eso llevará el asunto a los tribunales. "Soy yo quien, en plenitud de mi inocencia y de mis derechos, va a pedir explicaciones del porqué (...) En democracia, hay que demostrar la culpabilidad, si la hubiera, no la inocencia", señaló la alcaldesa, para quien hay una izquierda "política, social y mediática", carente de "convicción democrática", que hace estas cosas porque no puede "ganar en las urnas".
"No me van a callar ni me van a amedrentar", advirtió Barberá, que atribuyó al PSOE "actitudes totalitarias".
Poco antes, en otra rueda de prensa en Madrid, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, pidió que la justicia actúe "contra aquellos que pudieran estar cometiendo, de forma interesada y partidista, filtraciones para ir en contra del buen nombre de algunas personas o para menoscabar el buen nombre de un partido político".
El domingo, el PP emitió un comunicado denunciando una campaña de "desprestigio" contra sus cargos públicos en la que implicó al Ministerio del Interior y al grupo de comunicación Prisa, al que pertenece, entre otros medios, el periódico El País.
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